Iguales

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Durante una de mis conversaciones con Mina, en modo de broma me preguntó cómo hago para aguantar a Bakugo, y más si vivimos juntos.

La verdad es que eso ni yo lo sé, simplemente me acostumbré a él. Sin embargo eso no significa que de vez en cuando no sea algo complicado. Así que decidí hacer algo hoy, duraré todo el día actuando igual que él, ahora sabré si se aguantaría a si mismo.

Empezaré a partir de mañana, ahora mismo es de noche así que puse una alarma (o más bien 500mil :v) en mi celular para levantarme temprano mañana, al igual que Bakugo.

Al día siguiente

El día empezó normal y por primera vez busqué ropa siguiendo una paleta de colores, negro, naranja y gris. Que son los colores que Katsuki siempre lleva encima.

Intenté mantener el ceño fruncido al igual que él pero me cansé bastante rápido.

N/A: Aunque no lo crean eso cansa, intentenlo.

---Vaya, que milagro que te despegues tan temprano de esa estúpida cama.---dijo volteando a verme desde la cocina.

---Buenos dí- digo, si... bueno, simplemente me dió la gana.

Cuando empezamos a desayunar me mantuve en silencio, él siempre está tranquilo cuando come.

---T/N. ---me llamó.

---¿Mmm? ---mucité.

---¿Pasa algo? Digo, no me importa realmente, solo pregunto.

---Eehhh, no.

---Pues estás muy callada.

---¿Y?

---"¿Y?" ¿Acaso no sabes que cuando comes pareces grabadora dañada de tanto que hablas?

---¡¿Qué dijiste?! ---grité parándome de la mesa, me sentía algo tonta al "alterarme" tan fácilmente.

---Dije que no cierras la boca cuando comes y que es extraño que estés tan callada, eso dije. ---dijo acercándose a mí rostro de forma amenazante.

---Repite eso. ---dije alzando el puño.

---Oblígame. ---dijo con una sonrisa ladina.

El tono en el que lo dijo me hizo sentir como mi corazón se aceleraba y la sangre subía hacia mis mejillas, negué con la cabeza tratando de mantener una actitud seria.

---Tsk... como sea. Seguiré comiendo. ---dije sentándome otra vez.

El rubio me miró de reojo y luego imitó mi acción, al terminar de comer fui a la habitación y me encerré ahí preguntándome si estaba interpretando bien mi papel de "Bakugo".

Me puse a pensar hasta que alguien abrió la puerta de golpe.

---¡Ah, Bakugo me asustaste! Cof cof, digo... ¿qué mierda haces aquí?

---Es mi cuarto, puedo entrar cuando se me de la puta gana. ---dijo sentándose sobre la cama. ---¿Y por tienes esa expresión tan jodidamente adorable?

(¿Ah? Se supone que esta es mi cara de molestia...)

---N-no sé que estás diciendo. ---dije girando la cabeza con los brazos cruzados.

---Yo creo que sí. ---dijo agarrando mi barbilla. ---¿Qué tienes a parte de idiotez extrema?

---Pues nada. ---dije algo molesta. ---¿Y tú qué tienes a parte de esa habilidad tuya para romper tímpanos?

---Ganas de besarte. ---respondió.

---¿Eh? ¿A qué te refie-

El rubio tomó mi nuca de forma algo brusca y empezó a besarme, apreté la sábana con fuerza en busca de tranquilidad.

De un momento a otro no podía respirar, así que me separé de él para tomar aire. Bakugo me miraba con una mirada de depredador hambriento así que planeaba dar pasos hacia atrás para escaparme lentamente hasta que recordé que se supone que estoy actuando como él.

Por lo que solté un largo suspiro y puse una mano sobre su pecho, noté que me miraba con una expresión bastante curiosa y yo sonreí porque se veía algo tierno.

Negué con la cabeza y presioné su pecho para acostarlo sobre la cama, luego me senté sobre él y me congelé.

(¿T/N? ¿Qué estás haciendo? Se supone que debía actuar como el... pero en esta situación no, ¿verdad? ¿O si? ¿O no? ¡No sé!)
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(Cómo sea... ya no hay vuelta atrás.)

Pensé para luego quitarme la camisa y empezar a besarlo, noté que se sorprendió pero no tardó en corresponder.

Acaricié suavemente su cabello y empecé a dejarme llevar hasta que escuché mi teléfono sonar.

Me separé de él e iba a contestar pero el rubio me lo impidió tomando mi cintura.

---¿El celular puede esperar, no crees? ---dijo mirándome a los ojos.

---Pero....

---Pero nada... ---susurró acariciando mis labios con la yema de su dedo pulgar.

Cerré los ojos y continué besando sus suaves labios con delicadeza, el rubio se quitó la camisa y empezó a acariciar mi cintura, sus manos se deslizaban hasta abajo lentamente hasta que escuché un ruido otra vez y abrí los ojos.

---Te dije de ignorar esa mierda. ---dijo frunciendo el ceño.

---Espera... eso no es mi celular... ¡es el timbre! ---dije levantándome de encima de él para bajar de la cama.

Fui hacia la puerta y la abrí al escuchar la voz de Kirishima.

Inmediatamente entró empecé a hablar con él con entusiasmo. Siempre es agradable hablar con el pelirrojo. Por otro lado, el rubio salió de la habitación con cara de amargado y le susurré que si no quitaba su cara de culo no terminaríamos el asunto que "dejamos pendiente".

Suspiró resignado y yo me rei en voz baja, luego de eso fui a la cocina para buscarle algo de beber al pelirrojo.

(Ahora que lo pienso... ¿cumplí bien mi papel de Bakugo?)

•F•I•N•

N/A: Weeenaaasss, ya reviví, cómo dije anteriormente sigo con falta de ideas 😔 pero bueno espero que les haya gustado! Si es así háganmelo saber con sus votos 🌟 y comentarios 💬 , ¡las quiero!

One Shots con Bakugo 💥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora