CAPÍTULO 25

21 1 0
                                    

'Ira'

Anders.

Sentí mi corazón quemarse, mi alma desaparecer y, si acaso tenía alguna bondad en mi, desapareció completamente cuando vi el cuerpo de mi hermana caer al suelo, muerta.

Todo es culpa de Jason Diphron. Una ira me corroe por las venas, tan latente como las llamas que asolan el castillo. No puedo respirar, siento que mi cuerpo nada más está en ebullición; si respiro, me arde el tabique nasal entero y los pulmones me ardían y parece que amenazan con explotar.

Noto como mis vasos sanguíneos se contraen, transportando la sangre ferviente y la picazón que me ataca me pide que me rasque el cuerpo entero hasta arrancarme la piel. La ira me ha cegado, apenas veo y solo oigo gritos.

—¡Anders! —oigo que me grita Craber mientras sigo acariciando el cuerpo inerte de mi hermana. —¡Nos tenemos que ir!

—Dakota... —me lamento en el suelo y oigo una tanda de balas romper la puerta. —Vamos, por favor...

Craber se agacha frente a mí y su mano grande me toma del mentón obligándome a mirarle.

—¡Anders, vámonos! —vocifera. —¡Esta mierda se está quemando y tú no puedes morir! ¡Vamos!

Su paciencia se acaba y me toma del brazo, dejando caer el cuerpo de Dakota que se desliza hasta el suelo como un muñeco de trapo.

—¡No! —pataleo pero la fuerza de Craber puede contra mí y me lleva al hombro como si fuera un bolso. —¡Que no, Dakota! ¡Dakota!

No sé porqué la llamo; ¿acaso pretendo que se levante? Las lágrimas me enceguecen, siento una presión en el cráneo que me permite saber cómo mis venas se contraen con la presión sanguínea que me pone el corazón a latir con violencia.

Muevo las piernas intentando liberarme del agarre del navegador, pero no lo logro.

Veo a Faraday corretear hasta el cuerpo y todo se vuelve un caos: la puerta cae con fuerza desvelando el fuego que se desata llevándose todo.

—¡Mierda!

Me desoriento completamente; pierdo la noción de las cosas y ya no sé quién es quién. Solo oigo gritos, estruendos y golpes.

—¡Los papeles! —grita alguien mientras Craber sale por la ventana y se engancha de la escalera conmigo aún al hombro.

Solo veo el suelo y está borroso.

—¡Suéltame! —me zarandeo muerto de ira, con las lágrimas cayendo por mis mejillas sin ningún tipo de control.

—¡Estate quieto!

—¡Que no!

Logro escaparme de sus brazos cayendo al suelo de pie. Mantengo el equilibrio y veo a Faraday bajar con el cuerpo sin vida de mi hermana entre sus brazos. Los ojos se me llenan de lágrimas de nuevo.

Me sujeto a la escalera mientras el muchacho llega al suelo, extendiéndome a la joven inerte.

—Tome, capitán.

La tomo de nuevo sintiendo como su cuerpo se enfría poco a poco. Me alejo cuando Faraday comienza a desmontar la escalera. Caigo de rodillas al suelo, acercando a mi hermana contra mi.

—Dakota... —musito sollozando.

—Anders. —me llama Craber de nuevo. —¡Anders!

Siento que la vida se me escapa entre los dedos; el dolor que me avasalla es el mayor vacío que he podido sentir en toda mi vida.

MAR DE CORAZONES ✓ [MAR 2 ©]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora