❝ ɴᴜᴘᴄɪᴀꜱ❞ -ᴋᴏᴏᴋᴛᴀᴇ-ᴋᴏᴏᴋᴠ

07

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Solo dos días...

Solo dos días y Jungkook se casa.

Solo podía pensar en lo jodida que era su vida.

Mientras pensaba y miraba una película recostado en su sillón de terciopelo color blanco, comiendo un poco de helado sabor chocolate para calmar su ansiedad, un fuerte golpe a su puerta llamó su atención.

Miro hacia un lado de donde se encontraba a ver el reloj que estaba colocado en una pared.

11:30 pm...

¿Quien rayos se atrevía a interrumpirlo en plena depresión?

El castaño se levantó y caminó hacia la puerta, no sin antes tomar su bata.

-¿Quien es?.-pregunto hacia la puerta aún serrada.

-Soy yo.-una voz inconfundible respondió.

-¿Jungkook?.-susurró y caminó más rápido a la puerta y abrió enseguida.

Y lo que vio fue doloroso.

-Ju-Jungkook...¿qué haces aquí?.-pregunto un Taehyung abrochando su bata de seda color roja, mirando con evidente curiosidad al chico que yacía parado en la puerta de su casa a altas horas de la noche, su aspecto era una locura, su cabello azabache todo revuelto, camisa de botones abierta, ojos algo rojos y evidentemente un poco pasado de copas...ya se imaginaba que avía pasado, le dolía tanto ver a su amor en ese estado.-Pelearon otra vez...verdad.-le dijo al hombre parado a escasos centímetros de él.

-El solo pudo asentir.-¿Puedo quedarme?.-pregunto el azabache con voz tan cansada.

-Claro que si kook...anda pasa.-dijo e castaño abriendo paso al devastado hombre.

Taehyung serró la puerta y quedó cara a cara con Jungkook.

-Ven...vamos.-extendió su mano y el azabache correspondió, tae llevó a Jungkook hacia el sillón en el que antes estaba.-Te traeré un chocolate calientito y tú donita de fresa con chispas de chocolate.-dijo una vez más el castaño con melosidad mientras miraba cómo Jungkook asentía con un pequeño cachorrito.

Taehyung emprendió camino hacia la cocina, mientras que Jungkook estaba recostado en el sillón.

Por eso le encantaba estar en la casa del menor, lo mimaba y consentía, y eso a él le encontraba.

Siempre que tenía problemas con eun él iba a un bar, tomaba hasta perder la consciencia y ni siquiera sabría cómo llegaba a la casa de su amigo...pero hoy no fue el cazo, discutió muy fuerte con eun y siguió la misma rutina, pero con una diferencia de que hoy estaba 99% de consiente, su tomo micho pero era tolerante al alcohol, solo que...¿por qué no hacerse el más grande ebrio con su amigo?...el solo quería que lo consintiera, que le diera su chocolatito y donita, y olvidar todo lo que su prometida le hizo pasar.

-Listo.-un lindo castaño salió de la cocina con una bandeja, donde estaba una taza de chocolate caliente y en un plato pequeño una rica y apetitosa donita.-Toma jungkookie...-extendió la bandeja hacia el.-Dame eso.-extendió su mano y quito la botella que Jungkook traía en sus venosas manos.-¿Tienes frio?.-pregunto.