❝ ɴᴜᴘᴄɪᴀꜱ❞ -ᴋᴏᴏᴋᴛᴀᴇ-ᴋᴏᴏᴋᴠ

09 ½

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Día de la boda.

Pov Jungkook:

Y su nueva vida iniciaba hoy, tan aburrida y monótona, no esperaba más, pues su relación con jieun siempre fue así, monótona siempre se basaba a lo mismo.

Pero ya que más daba.

A solo unos minutos antes de estar ahí vistiéndose para su compromiso se dio cuenta del error más grave que estaba cometiendo.

Su cabeza era un lío, y en lo único que pensaba era en Taehyung y en esos labios que lo hicieron tocar el mismísimo paraíso, ni las noches de pasión con jieun habían sido tan magnificas como ese beso.

Su mente estaba tan cansada
Ha estado a solo un poco de ponerle fin a todo, de cancelar esa boda, por qué a estas alturas ya lo sentía más como una obligación que por gusto.

Pero joder ¿quien lo entiende?
Hace unas horas juraba y perjuraba estar solo confundido y completamente enamorado de su prometida, pero hace tan solo unos minutos quiso renunciar a todo y correr a los brazos de su amigo y saber el por qué le hizo sentir así, por que mierda se sintió tan bien con ese simple beso.

-Agh!!!...MIERDA!!.-grito desesperado en la sola habitación donde se encontraba.-¿Qué carajo hiciste conmigo Taehyung?.-pequeñas lágrimas se acomunaron en los negros ojos del atractivo azabache mientras se tomaba con fuerza el cabello.

-¿Todo está bien cariño?.-la voz de su madre resonó por toda la habitación por detrás de la puerta.

Jungkook tomó un par de jaladas de aire y habló

-Si madre...todo está en orden.-su voz salió tan neutral que hasta su madre le creyó, no sabiendo que dentro de esas cuatro paredes se encontraba su hijo completamente roto por haberse dado cuenta tan tarde del grave error que cometió.

-Ya que más da...no puedo hacerle esto a Jieun...además...¿quien me asegura que Taehyung siente lo mismo por mi?.-el inseguro azabache se repetía a sí mismo.-Tal ves solo fue un desliz de su parte...si tal ves fue eso.-suspiro ya cansado.

{...}

Pov Taehyung:

Dolor total...eso era lo que sentía Taehyung...como si todo por dentro quemara.

Llevaba desde hace un par de horas tomando vino para así anestesiar un poco el inigualable dolor que sentía.

Tomaba pero siempre estando consiente para su desgracia.

¿Y cómo no estar tan mal?

Se recriminaba a cada minuto el haber besado los labios de Jungkook, pues desde que lo besó fue como si por las pequeñas aberturas de sus labios se infiltrara una adictiva droga, una droga que por desgracia no podía consumir.

En solo un par de horas ya era una necesidad para él y no poder hacerlo era el mismísimo jodido infierno.

Se tenía que arreglar...para asistir a la boda de su amor y entregar esos anillos de compromiso.