Rhyming heart || Jenlisa

Capítulo 9

— ¡Jennie! — entró de golpe a su hogar, el picaporte de la puerta golpeó la pared sonoramente, la sala y cocina lo recibieron, estaban vacías— ¡Jennie! — repitió el nombre de su amada, yendo hacia el dormitorio, la cama estaba destendida, como era costumbre, luego de dormir juntas no solían tender la cama hasta que se hiciera de noche y tengan que volver a arroparse en sus brazos ㅡ¡Jennie~!ㅡFue hacia el baño, su última oportunidad, al abrir la puerta, este estaba vacíoㅡ Jennie... No, no, no, no...

Negó, su corazón corría a mil veces la hora, sus manos sudaban, todo su cuerpo temblaba.

Jennie no era real, nadie debía verla, nadie excepto ella, porque ella la había creado, Jennie era suya, desde el principio de todo, desde hacía meses atrás, Jennie había estado con ella, todo el tiempo.

Le había escrito un libro, le había escrito poemas, la había besado y abrazado, le había hecho el amor, habían dormido juntas todas esas noches, la había enamorado y la había echo feliz.

Si no era real y solo era producto de su mente no podría irse tan fácil, no podría desaparecer así como así.

Le había hecho descubrir el amor, y nunca supo en qué punto Jennie se había vuelto real, y era ella la creación de su amor.

Jennie le había dado vida a Lisa, le había mostrado un mundo nuevo, la había enamorado, la había cambiado, su corazón había vuelto a latir con ella, le había hecho compañía aún a pesar de que Lisa lo había oculto, encerrada en su casa, abandonado en su soledad... Nunca se había preocupado por el como la hacía sentir, aún sabiendo que eso lo ponía triste a su dulce algodón de azúcar.

Y nunca le había dicho "te amo".

- Jennie... ¿Dónde estás?

La busco abajo de la mesa, de la cama, dentro de la heladera, de las gavetas de la cocina, del cajón de los cubiertos, detrás de la cortina del baño, en su armario...

ㅡJennie, vamos... Sal.

Jennie no estaba en ningún lado, porque Jennie no era real.

¿Lo había inventado realmente?

ㅡ¿"Ya llegué amor, no llores más corazón"? – aventuró, a ver si con una rima podía volver, con si con una rima pudiera invocarla, se sintió una idiota al instante.

Por un momento creía que no, que los abrazos, los besos, los mimos en la cama... Su tacto no podía mentirle, por más que su mente sí.

—Jennie, esto no es gracioso... Por favor, sal.

Lisa rogó para que aparezca, rogó para que aquella chica de sus rimas volviera.

ㅡVamos tengo algo importante que decirte, Jennie, ¿Era lo que querías escuchar, no? ¡Jennie!

Cerro sus ojos, lo recordó, lo imaginó en el fondo de su mente, su risa, sus labios esponjosos, sus mejillas rosas, su cabello castaño, sus besos sabor chocolate de frutilla, y sus caricias cálidas como un abrazo de luz del sol sobre su corazón.

ㅡJennie...

La recordó con todas sus fuerzas, lágrimas surcaban sus mejillas y su corazón poco a poco parecía vaciarce de amor, quedando seco.

—Jen...

Aquel corazón hecho de rimas, aquel amor incondicional que ella no había correspondido nunca.

ㅡJennie... Lo siento....

Le había roto el corazón, mil veces, aquello roto en los ojitos de Jennie siempre había sido eso: aquel "Te amo" que ella nunca pudo repetir, por miedo, por ignorancia, por estupidez, por creer que podría haberlo dicho después.

Por creer que como Jennie no existia no importaba, pero Jennie era real, porque en su corazón era real, porque su amor si era real.

ㅡYo sí te amo, Jennie.

Y no había un después, Jennie se lo había dicho, desde el primer día, el día que lo encontrara sería el día en que lo perdería, la Jennie de su propio mundo, La Jennie real, la que ahora tendría que aprender... A intentar a amar de nuevo, con la que no podía permitirse cumplir con los mismos errores.

ㅡ Te amo, te amo, te amo...

No podría nunca decírselo, nunca confesar su amor, dejar que se rompieran sus ojos, desear que se terminaran sus rimas, dejarlo llorar en sus brazos, y ahogar las penas con su cuerpo.

ㅡDios... Te traté tan mal, Jennie...

Sus rodillas se hicieron débiles y cayó al suelo, en aquel dormitorio que ahora estaba vacío, mirando una cama que no habían arreglado aquella mañana ninguno de las dos cuando aún eran dos, cerró sus ojos y lo intento una vez más, intentando volver a ver a aquel algo de amor incondicional que había tenido a su lado tantos, tantos meses.

ㅡ Amor...

Al abrir los ojos de nuevo, su hogar seguía tan vacío como antes, igual que meses atrás,antes de que la pequeño castaña apareciera en su vida.

ㅡJen...

Lisa estaba sola de nuevo.