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Ataque silencioso

Hoseok se despertó temprano pues estaba acostumbrado a madrugar, salió de la habitación usando ropa muy cómoda y decidió hacerle el desayuno a su hijo, sonrió al llamarlo hijo pues ahora sabía que lo era. Sin embargo, eso le trajo recuerdos amargos de la mentira de Yoongi. Le había dado una oportunidad, trataría de confiar en él, pero él había traicionado mucho su confianza, tocó su mejilla y aún dolía aquella bofetada.

Al llegar a la cocina se detuvo en la puerta al escuchar la conversación de las dos chicas del servicio, la primera era Ju-Eun y la segunda Mary, sabía que a ellas no les agradaba mucho y prefería esperar la llegada de Daisuke quien de seguro estaría revisando que la servidumbre estuviese despierta, sin embargo la conversación de ambas chicas lo hice sentirse tonto.

—El Amo Min está siendo considerado con ese aparecido... De seguro se la chupa muy bien pues quien no sabe que el amo ama las mamadas.

— ¡Mary eres una descarada!

—¿Qué? No miento... Tú y cada empleada de la casa sabe que es cierto pues han probado a ese hombre delicioso.

— A pocos hombres se les puede decir delicioso...

— Así es...

Ambas rieron y comentaban lo bien dotado que era el Amo Min, de las veces que las había llevado a la cama y de la forma que había tratado a Hoseok. De pronto Hoseok se sintió diminuto, Yoongi solo había tenido amantes mujeres y él jamás le había hecho una felación a Yoongi. Era demasiado inexperto, sintió una lágrima recorrer su mejilla pues las chicas lo veían como un estúpido.

Hoseok se iba a ir, pero una mano tomó la de él, vio a Taehyung quien como todo un señor entró con él a la cocina.

— Ustedes putitas quitense que mi suegro hará un delicioso desayuno... ¡¿Qué esperan estúpidas Mesalinas?!

"¡Ya lo hacemos Amo Kim!" Taehyung sonrió al verlas correr pues sabían que si no obedecían recibirían la visita de sus guardaespaldas, Bogum y Ji-Han. Hoseok le dio un beso en la cabeza a Taehyung quien se sonrojó y luego empezó a cocinar el desayuno para los tres pequeños y él. Cuando Hoseok servía los platos Taehyung lo abrazó por la espalda quedando su cabeza en la espalda baja.

— Te prometo que en otra vida, yo seré tu esposo y te trataré como un dios, Ángel.

—Tae eres muy tierno...

—Eres un maldito demonio, mocoso hijo de Belial. —dijo Yoongi en la puerta, Taehyung restregó su rostro en la espalda se Hoseok quien no quiso ver a Yoongi. Jungkook llegó de la mano de Jimin y Taehyung corrió para abrazarlos y darles un beso en la mejilla. Se sentaron para desayunar y todos los puestos quedaron ocupados.

—¡Se ve delicioso papá!

—Lo hice para ustedes.

—¡Un momento! ¿Dónde está mi parte?

Jungkook frunció el ceño y sin ver a su padre respondió. —¿Qué parte de lo hice para ustedes no entiendes?- dijo señalándose. —Además ¿Por qué mi padre alimentaría a su verdugo?

—Respétame soy tu padre y yo ya me disculpé con Hoseok...

—Bueno suegro... Creo que cuando entré a la cocina Ju-Eun tenía su desayuno casi listo mientras hablaba de lo bien que se llevaba con usted.

Yoongi vio la mirada triste de Hoseok y supuso que las chicas habían hablado algo que lo había lastimado. — Sea lo que sea que hayan dicho es pasado...

—Eso no me importa... A quien debe importarle es a tu esposa. Chicos coman en tranquilidad y... Yoongi tu desayuno ellas lo dejaron allí.

Dijo Hoseok señalando una bandeja, Yoongi se sintió rechazado y deseando poder probar la comida de Hoseok. Mientras Jungkook observaba a Taehyung. Se hicieron unas señas y luego los tres sonrieron. Yoongi se sentó junto a ellos y luego comió, la comida la sintió insípida y sin gracia, además Hoseok solo conversaba con los niños, Yoongi deseaba asesinar a Taehyung después se escucharlo hablar, pero se controlaría.