Nueve días y un beso [Minsung]

O9: Primera noche

Acabaron por dormir ambos en el cuarto de Han, ya que Lee se sentía mal y la verdad no quería estar solo en ese momento, le aterraba la idea de estar a solas con sus pensamientos y Han no lo iba a dejar, no ahora que era cuando mas necesitaba que alguien estuviera ahí para el.

Estaban acostados, Minho apoyaba su cabeza en el pecho de Jisung y este dejaba suaves cariños en la misma a ver si lograba que se relajara y pudieran dormir ambos cómodos, pero la verdad lo veía a difícil tras lo que le paso a Lee, se veía que aun estaba algo asustado. 

— ¿En verdad no te molesta que me quede aquí? Puedo buscar otro lugar

Minho trataba de pensar en formas de no ser tan intrusivo en el espacio de Han, pero lo veía difícil, así que lo cambio por ideas sobre como compensar a su amigo.

— No me molesta, bobo

— Voy a pagarte la renta, después de todo empiezo a trabajar dentro de unos días y así no soy solo un estorbo

Jisung se acomodo un poco, listo para aclararle todas las cosas a Minho y que así no pensara de mas.

— Minho, no es necesario. Ya te dije que con tu compañía iba a ser suficiente porque por lo general me aburro y no puedo dormir bien al estar pendiente de todos los ruidos, estar contigo lo va a hacer todo mejor. Además como ya dije antes, sabes lo de mis padres y no es necesario que tengas que cargar con pagarme

— Pero Sunggie... No quiero abusar de eso

— Nada de peros, ahora concéntrate en dormir, lo necesitas

Se quejo Jisung, logrando que Minho se relajara al menos un poco.

— No puedo dormir, no dejo de pensar en que arreglaste tres puntos en un día

— Es verdad, viste que soy como tú hada madrina, voy concediendo tus deseos

Minho soltó una pequeña risa, el objetivo del menor sobre distraerlo iba bien, pero le seguían preocupando los golpes del contrario, ¿Debería llevarlo a urgencias? Creía que no era necesario, pero siempre estaba la duda y debía preguntar.

- Honnie, ¿No quieres ir al hospital?

- No es necesario, no me siento tan mal como para llegar a ese extremo

- ¿Estás seguro? No van a tardar en atendernos

- Estoy seguro, ahora vamos a cambiar el tema y hablemos de ti ¿Cómo te sientes?

Jisung sabia lo que se venia, pero prefería hacerse el bobo.

- ¿Respecto a que?

- Respecto a lo de Dahyun

Y ahí su idea sobre hacerse el bobo se fue a la mierda, no quería hablar de ello realmente, pero lo necesitaba de cierta forma y también le serviría para dejar un poco mas tranquilo a Minho.

- Oh...¿Sabes? No me esperaba que ella fuera quien inició todo

- Ni yo, o quizá en parte sí

- No lo sé

Hubieron algunos segundos de silencio, Jisung soltó un suspiro y Minho sintió que había tenido la mejor idea de su vida.

- Sunggie, vayámonos de ahí

Solto sin pensar, sorprendiendo un poco a Jisung.

- No podemos simplemente dejar las cosas así como si nada

- Si podemos, busquemos soluciones

Jisung lo pensó un momento, Minho no tenía un mal punto, salir de ese infierno ayudaría a ambos y ayudaría a un punto de la lista que estaba pasando por alto "Punto cuatro, alejarse de aquel establecimiento y empezar de nuevo" Hubiera sido más sencillo partir por ahí, o quizá no, el acoso puso moverse hasta otro instituto por rumores entre conocidos, ya no sabía que era lo mejor, no podía evitar pensar de más. Minho noto que su cabeza tiraba humo, así que lo interrumpió.

- Deja de pensar tanto y acepta, vámonos juntos, vamos a poder los dos contra todo

Eso borro todas las dudas de su cabeza, serian ellos dos contra todo de nuevo.

- Tal como antes...

- Exacto

- Me parece bien, Minho y Jisung contra el mundo

Y así fue como decidieron escapar de allí, tenían que conseguir sus informes y certificados para hacerlo, en si no era una escapada a las tontas y locas, sino que iba a ser organizado y legal.

Entre la conversación a Jisung le ganó el sueño, así que Minho en movimientos cuidadosos acomodo las mantas y luego se acomodó él para así cerrar sus ojos, aunque no podía dormir, los pensamientos horribles seguían ahí, Jisung podría estar haciendo esfuerzos increíbles, pero nunca podría contra el mayor enemigo, la mente de Minho.

Pasaron algunas horas y dieron las cinco de la madrugada, en una hora debían levantarse y pensó que ya no valía la pena pegar ojo.

Se levantó sin despertar a Jisung, el contrario solo se removió un poco ante la ausencia del cuerpo ajeno y luego siguió durmiendo, lo miro unos segundos y sintió su corazón hacerse blandito, Jisung estaba babeando y había notado que entre la noche se movía un poco, quizá estaba soñando algo interesante.

Tomó su celular y luego optó por ir a preparar el desayuno e hizo café con tostadas, su especialidad, o lo único que sabía hacer. Fue hasta el cuarto nuevamente y despertó a Jisung dejando un beso en su frente, aún le dolía el estómago al agacharse, pero lo podía aguantar.

-Aún no suena la alarma...Cinco minutos más

-Jisung, no pusiste alarma ayer

Y en eso Jisung se levantó de golpe, Minho seguía agachado por lo que acabaron dándose un golpe algo fuerte con Minho, logrando que esté se echara hacia atrás.

-¡Han Jisung, cuida las pocas neuronas que te quedan!

-¡Déjame! Es tu culpa por asustarme así

Respondió mientras dejaba caricias en su propia frente, parpadeando repetidas veces para tratar de acostumbrarse a la luz.

-Ven, si quieres matarme a cabezazos hazlo desayunando, te hice cafecito

Minho se volvía muy "Suavecito" Cuando ya se sentía más en confianza, cosa que a Jisung le generaba demasiada ternura.

-Vamos a tomar cafecito entonces

Para Jisung fue una noche linda y un despertar aún mejor.

Para Minho fue una noche llena de pensamientos feos, pero al menos cuando el menor despertó pudo sentirse mejor.