Lenna Wolff, nuestra protagonista de 23 años tirando para 24, es la actual hija mayor del gran conocido Toto Wolff, a la cual le ofrecen un puesto de trabajo en el equipo de su padre como la segunda al mando. Por un momento, ella se niega a hacerlo...
Suena mi teléfono, y veo que me está llamando la plasta de mi mejor amiga Paula Sainz, cuelgo de cualquier manera porque aún no estoy lo suficientemente despierta y cuando me intentaba volver a quedar dormida, vuelve a aparecer el nombre de mi amiga en el teléfono y decido aceptar la llamada.
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Y ahí es cuando escucho a mi amiga gritar como una loca.
- LENNIEEEEE, DESPIERTAAAA YAAA. - gritó mi amiga toda ilusionada, no sé cómo narices tiene tanta energía por las mañanas esta mujer, creo que estar mucho tiempo con Lewis le ha afectado mucho. - DEJA DE PENSAR EN LO QUE ESTÁS PENSANDO Y ÁBREME LA PUERTA.
- ¡¿Espera estás en la puerta!? - pregunté gritando y ella sólo se rió. - Paula no me jodas tía. - dije desesperada mientras me tiraba de nuevo a mi cama.
- O me abres o te dejo sin desayuno. - le escuché decir seriamente y en ese momento, me levanté como si tuviera un cohete en el culo y fui directamente hacia la puerta. - Hostia que rápida has sido esta vez, pequeña Wolff.
- Mi desayuno. - imploré seria y ella rió mientras me enseñaba varias bolsas del Starbucks, estará loca esta chica pero la quiero más que a nada. - Te he dicho lo mucho que te quiero? - pregunté mientras le agarraba la cara y le daba un beso en la mejilla.
- Lo sé Lennie, siento venir tan temprano pero ya sabes cómo es Lewis, siempre quiere ir temprano a correr. - dijo ella riéndose mientras entraba en el apartamento que alquilé para pasar mi primer gran premio, sé que es una tontería pero no me apetecía estar en un hotel con todos mirándome y criticándome con la mirada.
- Tu y Lewis no sabéis disimular eh. - dije riendo y vi como mi mejor amiga se convertía en un auténtico tomate al oír mis conclusiones. - ¿Cuánto lleváis ya tortolitos?
- ¿4 meses? - dijo mientras forzaba una sonrisa nerviosa y yo solo la miré alucinando.
- ¡¿Y POR QUÉ NO SABÍA NADA!? - grité mientras abría la boca de par en par, Paula no era una chica de relaciones desde hace unos 4 años, ya que su novio de ese momento, Nico, murió en un accidente de coche y decidió no tener relaciones por un largo tiempo hasta ahora, lo cual me sorprende. - ¿Y este cambio? ¿Ósea en que momento?
- Me he enamorado, ¿vale? - dijo ella riéndose y me alegraba verla sonreír de esa manera. - Y no empieces con lo de la diferencia de edad.
- Nah, 10 años no son nada cariño. - dije riendo. - Mis padres se llevan 11 y miralos, son la pareja perfecta.
- Tus padres son lo mejor y por cierto, son 9 años de diferencia. - dijo riendo mientras sacaba mi desayuno de la bolsa y me lo tendía. - Toma guapa.
- Un año más, un año menos. - dije riendo mientras ella ponía los ojos en blanco. - Gracias mi niña. - dije sonriendo y le di un sorbo a mi café que aún seguía calentito. - Hay alguna novedad para esta temporada?
