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Mi corazón latió con fuerza al momento del contacto visual, y me senté sin despegar la vista de su rostro, pero ella ya había apartado la mirada.

Las presentaciones terminaron y pronto el profesor nos puso la primer actividad, nos estaba dictando cuando la pelirroja pidió permiso para ir al sanitario, en un rato regresó pero se atraso bastante en el dictado. Me arme de valor y le dirigí la palabra. -Hola- dije con una sonrisa en el rostro -oye, como te atrasaste cuando fuiste al baño ten mi libreta para que copies lo que te falta, y si quieres te puedo explicar el ejercicio-, cuando volteé a ver su rostro ella tenía una sonrisa y con su linda voz me respondió -claro, muchas gracias dani-.

¡¿Quéé?!, omg, ella me llamo dani, en ese momento di gritos y saltos internos. Que hermosa voz, y además me llamo por mi diminutivo, ¡se acordó de mi nombre! Que felicidad.

Tiempo después me devolvió mi libreta y le explique como era la actividad, al poco tiempo la terminamos y pasamos a sellar el trabajo con el profesor. Como ya habíamos terminado la actividad nos sentamos a platicar, me di cuenta que ella tenía gustos parecidos a los míos e intereses en común, de verdad me pareció un chica muy interesante.

   Aparte de bonita es inteligente y culta, que mujeron.

¡Daniela!, por favor deja de pensar en eso, me reprendi a mi misma por pensar en eso y continúe hablando con ella las siguientes clases, hasta que tocó el timbre del recreo, en ese momento le pregunté -disculpa, pero ¿te gustaría desayunar conmigo?- ella me dio una respuesta afirmativa y salimos del aula. Ella y yo nos dirigimos a la cafetería, cada una tomó su bandeja y agarramos el alimento que más nos gusta, noté que ella agarro muchas cosas dulces y una leche de chocolate. Me ofreció una caja, pero mi cara se puso pálida -no gracias, soy muy alérgica a la leche- y no miento, se me incha el estómago y me lleno de ronchas, ella se disculpo y dejamos el tema del lado.

Yo estaba por tomar un poco de ensalada cuando mis manos rozaron otras más cálidas, cuando volteé ella me estaba viendo fijamente con la mano aún pegada a la mía, mis mejillas poco a poco intensificaban su color y mi vergüenza crecía cada segundo más en el que manteníamos el contacto visual, noté que ella también adquiría un color rosado en sus mejillas.

-Jaja, te vez muy tierna ir- se me escapó decir y ella soltó la risa más bella que eh escuchado.

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⏰ Última actualización: Jul 30, 2022 ⏰

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