Feliz cumpleaños Persia

4.- Bufón

La cordura de Inuzuka se había desplomado, técnicamente no existía ya, desde aquella plática con Hasuki todo empezó a irse en picada, cada vez era más agresivo y la lastimaba constantemente, incluso en la intimidad era muy agresivo, al punto de que siempre se le veía a Hasuki con moretones y heridas, pero todos decían que era por la intensidad de la pareja sin pararse a pensar que eso no era normal.

Un día mientras Hasuki caminaba hacia las clases se encontró con una vieja conocida que no veía desde el incidente que desencadenó toda esta historia.

- Oh. ¡Hasuki!

- Eh, ¿Char?

- ¿Cómo estás? Hace tiempo que no te veía, específicamente desde aquel día.

- Sí, ha pasado tiempo.

- ¿Cómo está Inuzuka? Oí que ustedes dos llevan un tiempo saliendo. Personalmente pensaba que ese idiota iba a quedarse llorando todo el tiempo. Aunque una parte de mi está decepcionada de que no haya luchado por ella, per supongo que después de todo es comprensible,

- Si claro, nosotros estamos bien, somos una pareja amorosa y apasionada jeje.

- Hmm, Hasuki esos son ¿moretones?

- Eh, esto... sí, me caí de las escaleras cuando bajaba del dormitorio, estaba medio dormida.

- Esos moretones no parecen hechos por una caída, ¿acaso te los hizo Inuzuka?

- No es su culpa, solamente es algo apasionado y no mide su fuerza a veces.

- Ese bastardo, ¡Ya me escuchará!

- No, no te metas en nuestra relación. Esto es solo de los dos.

- Pero Hasuki, esto no está bien.

- Lo sé, pero él necesita ayuda en este momento, soy la única que lo entiende, no tiene a nadie más que lo apoye.

- Pero esto es... demasiado.

- No te preocupes, sanará pronto. Fue un gusto volver a verte, nos vemos.

Char se quedó con una incertidumbre bastante grande, algo dentro de la historia no le quedaba del todo claro. Pero si de algo estaba seguro es que esto no lucía bien, empezó a buscar a Inuzuka por todo el colegio hasta encontrarlo acostado en el pasto.

- ¡Eh! Inuzuka.

- ¿Char? ¿Sucede algo?

- No lo sé, tú dímelo.

- Pues nada nuevo, ¿y por qué me miras así?

- Por nada, ¿podrías explicarme el por qué de los moretones de Hasuki?

- ¿Ella te dijo algo?

- Nada en especial.

- Entonces no es nada. Quizás fui muy rudo en la cama, debería contenerme para la próxima.

- Oye, ¿estás seguro de esto? Pensé que amabas a Persia más que a nada, esto no suena para nada a ti.

- ¿Enserio? Yo no fui el que le dijo que se fuera.

- ¡Era para protegerte imbécil! ¡¿No te das cuenta de que a ella le dolía verte lastimado todo el tiempo?! Podrías ser un poco más considerado con ella.

- Bueno, no es mi problema ahora, ya tengo a Komai, así que no necesito nada más. Además, ella tiene al imbécil de Scott.

- ¿Ella te dijo algo?