Siete

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Siete: Mitsuya quiere que vayan a una fiesta... pero, ¿qué planea? (Ellas)


Yuzuha miraba sin entender que estaba pasado del todo con su hermano.

Este le miraba con una sonrisa culpable, como si hubiera hecho algo malo y no tuviera el valor de decirle que era; le recordaba mucho a cuando eran niños que el chico había cometido una travesura de la que después ella tendría que hacerse responsable para que el chico no recibiera el castigo.

Entrecerró los ojos haciendo que su hermano se encogiera en su lugar, aumentando su sonrisa culpable, pero con obvias intenciones de no decir absolutamente nada de lo que lo hacía actuar de esa manera.

—Bueno, me voy—sentenció después de sostenerle la mirada por un rato.

—¿A dónde?

—Tengo cita con las chicas—se paró del sillón caminando hacia donde se encontraba su bolso—¿Vendrá Mitsuya?—inquirió mientras tomaba el bolso en sus manos y veía que llevara todo lo que necesitaba para su tarde de amigas.

—Algo así—asintió.

La chica se giró a verlo confusa y su hermano de nuevo le regalo una sonrisa culpable.

—Es que también vendrán los chicos...

Yuzuha se puso alerta.

—Por chicos, ¿nos referimos a los chicos o a esos otros chicos?—inquirió alzando una ceja.

—A los chicos—se apresuró a contestar Hakkai—Es que Mitsuya les quiere hacer una invitación.

—¿A dónde?

—A una fiesta.

Frunció el ceño.

—¿Fiesta?

—¿No se te hace tarde?—preguntó esquivando el tema.

La chica ya se estaba imaginando por donde iban las cosas, estaba a nada de empezar a regañar a su hermano, pero se mantuvo quieta en su lugar, al final hoy vería a las chicas, entre ellas Ema, así que sin problemas ella le diría si eran ciertas sus sospechas o no y en la noche podría regresar a reprimir a su hermano como era debido y si estaban los chicos no le importaba.

Apretó sus labios en una fina línea y le regalo una sonrisa forzada a su hermano que la vio con ojos alarmantes.

—Cierto, nos vemos hermanito—dijo lentamente la frase ocasionando que Hakkai le diera una mirada llena de pánico—Pórtense bien y no hagan estupideces, ya son adultos.

Y dicho eso salió al encuentro de sus amigas.



—Es que, ¿dónde se consigue uno así?—suspiro Senju mientras se dejaba caer en la mesa de manera dramática—Aun recuerdo cuando tenía un crush con Wakasa—musito—Y luego con ser parte de un poliamor con Shinichiro y Wakasa.

Todas en la mesa rieron al ver la cara de la chica al recordar eso.

—O ser parte de un poliamor con cualquiera que estuviera Takemichi—bromeo ella, ocasionando más risas en las chicas.

—Estamos de acuerdo que Takemichi es la debilidad de todas y todos—dijo Hina sonriendo con algo de nostalgia al recordar el breve periodo en que el chico y ella fueron novios.

—Por supuesto que sí, así que brindemos por ello—Ema alzó la copa de vino frente a ella, y todas rieron mientras alzaban la suya y la chocaban.

—Fuera de broma—habló de nuevo Senju—Realmente me alegra mucho que ya estén haciendo planes para la boda, Ema.

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