swimming | kookv

Capitulo 10

Taehyung se sentía desubicado en aquella banca tan ruidosa llena de omegas hormonales, alfas y betas ruidosos.

El realmente no sabía ni entendía mucho sobre fútbol americano, solo pensaba que era un deporte muy violento y confuso.

Pero ahí estaba.

Luego de hablar con Bogum y desearle buenas suerte, fue a buscar cualquier asiento no tan lejos porque sino no alcanzaría a ver claramente, pero afortunadamente encontró uno en la segunda fila.

Podía ver claramente todo.

Todo.

A Jungkook sudado y agitado, con su musculatura tensa y ceño fruncido.

Se veía tan fuerte, grande e imponente ahí en el campo, todo de él, desde la forma que agarraba el balón, en como mandaba un pase largo, como tacleaba a los otros jugadores, y lo rápido que corría. Jungkook sabía lo que era, sabía que lo iba a hacer bien, tenía la confianza en si mismo.

Parecía intocable.

Intocable porque nadie parecía ser capaz de alcanzarlo, y cuando querian, no le veían ni el polvo, por el su equipo ya había avanzado 30 yardas.

Solo 10 yardas para terminar y pasar el balón al otro equipo.

Era hipnotizante verlo que se olvidó por quien supuestamente había ido a ese partido.

Hacia mover a su lobo la cola enérgicamente cuando luego de que hiciera un touchdown y volteara a verlo fijamente.

Desde que tomó asiento en las gradas pudo notar la mirada fija del alfa, cuando calentaba solo lo volteaba a ver asegurando que el omega también lo veía.

No a los porristas, no a los demás omegas, a él era a quien veía luego de anotar.

Era innegable.

20 minutos después, el otro equipo derrotado y un Jeon triunfante, salen del campo con todo el mundo aclamando su victoria.

No tardó en ubicar a Bogum y enseguida se acercó. Noto como mientras se acercaba este lo recorría lentamente con la mirada y sin ningún disimulo. Justo como lo había hecho antes. Una mirada que Taehyung ya conocía muy bien.

Al instante se sintió incómodo, trato de sacar su sonrisa más sincera aunque cuando algo le molestaba era imposible ocultarlo.

-Felicidades.-

-Gracias, Tae.

¿Y este estúpido que se cree para ponerte apodos? Su lobo una vez más aunque esta vez estaba algo de acuerdo.

-Entonces, ¿Adónde iremos?

-A casa de BamBam. Vamos, mi auto esta por aquí.- Trató de tomar la mano del omega pero este rápidamente la quitó.

A él usualmente no le agradaba el contacto físico. Así que apresurando El Paso camino hasta el auto de Bogum.

El viaje, (al menos para Taehyung), era incómodo, a él le gustaba estar en silencio, sí, pero se suponía que esto era una ¿cita?. ¿Por qué Bogum no trataba de hacer conversación con el?.

Ahí se sintió mal. Las intenciones del alfa volvían a ser las mismas que cualquiera que le hablara. No trataba de conocerlo, no trataba de agradable, no era atento como antes, era la misma historia.

Era seguro que nadie lo querría para amar de verdad como el tanto había soñado.

No llegaría su príncipe azul en caballo blanco a proponer amarlo incondicionalmente.