swimming | kookv

Capítulo 19

Una vez más Taehyung no entendía el cambio de actitud en Jungkook, es decir, un día tenía mil omegas con el y ahora hacía todo lo posible para que lo perdonara.

Solo lo hace pensar que quiere jugar con el un vez más.

Mientras tanto, Jungkook pensaba algo completamente diferente a lo que el omega se imaginaba, y tenía sus razones.

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Noche buena, estaba solo en la víspera de navidad, el alfa caminaba por las frías calles de su ciudad, triste, solo, en una fecha que se supone debe estar reunido con los que más quiere.

Nadie había querido estar con él en esta fecha. Todas las personas que decían ser sus amigos eran meramente superficiales, ahora lo tenía claro, realmente estaba solo.

La casa del omega que debió haber sido suyo apareció en su campo de visión y con ello un profundo sentimiento de melancolía de lo que pudieron haber sido si en su momento hubiera do escuchado a su lobo. Se acercó hasta la ventana y pudo ver al peligris en un sillón frente al árbol navideño.

Su quijada se apretó cuando vio salir a Min Yoongi de la cocina notando sus patéticos suéteres navideños combinados.

No eran los únicos ahí, estaba su toda la familia reunida. Min Yoongi se sentó junto al omega y frente a toda la familia empezaron a sonreír mientras el alfa acariciaba el vientre de Taehyung.

Su Taehyung. Una cachorro, su omega estaba esperando un cachorro de otro alfa. Pronto la ira los cegó y se convirtió en un gran lobo negro que corrió hasta la ventana para entrar a la fuera y estrellarse contra los cristales, creando un alboroto.

Y sin saber cómo, la casa empezó a estar en llamas y vio a Taehyung salir de ahí con miedo de él.

Jungkook despertó después de tan horrible pesadilla. Estaba empapado en sudor y notoriamente agitado.

En ese momento lo tuvo claro.

Su sueño fue una manifestación de lo que quería. Quería a Taehyung a su lado, estar con él no solo físicamente, lo quería en todo momento, era ridículo fingir que no, que no estaba enamorado y se arrepentía cada maldito momento por hacer sufrir al omega.

Estar lejos de él dolía tanto, sabía que no sería fácil conseguir que el peligris le diera una oportunidad.

Pero lo intentaría.

Haría lo posible.

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El lunes por la mañana Taehyung salió de su casa para dirigirse al colegio. Iba un poco tarde, lo usual ya que se le pegaron las sábanas. Y se sorprendió mucho al ver a Jungkook recargado en su auto.

-¿Qué haces aquí? -Fue lo primero que salió de su boca, antes de pensar que no le debería de preguntar nada.

-Vine por ti. -Dijo el más alto acercándose a él.

-¿Qué?

-Para ir al escuela, Tae, se está haciendo tarde, es mejor que te subas. -Señaló su auto y abrió la puerta para el.

-No me subiré -Trato de caminar ignorando al azabache pero fue sujetado del brazo. Al instante se apartó como si el toque del alfa lo quemara.

Jungkook hizo una nota mental de no tocar al omega a menos que el sea quien inicie el contacto. Aunque en estos momentos lo dudaba mucho.

-Solo quiero llevarte para que no camines y llegues tarde.

-Me gusta caminar -Se alzó de hombros y siguió su camino. Creyó que Jungkook se había rendido hasta que después de unos pasos escuchó a alguien perseguirlo.