4.$♡ NI PARA ESO SIRVES ♡$

2.3K 199 93
                                    

.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

.

Abre sus ojos lentamente enfocando el techo de la habitación, apenas es capaz de estirarse perezosamente, cuando llega a sentir una presencia junto a él.

Gira su vista y ve aquel hombre que es su esposo acostado a su lado, pero aun con la ropa del día anterior, arrugada.

¿Qué Mierda hace Chan en su habitación?.

Trata de salir de la cama, pero los brazos de su esposo se encuentran alrededor de su cintura como si no planeara dejarlo ir.

Puede ver sus finos rasgos, no puede entender como un hombre como él puede llevar un rancho tan grande y por lo que le había contado Jessi aparte de que maneja el rancho se va a las empresas donde desde ahí se hace la compra y venta del ganado o cualquier otro animal en el rancho.

Apenas recordaba vagamente la familia de Chan, bueno un hermano y su esposo, pero el día de la boda todo fue tan rápido que apenas lograba recordar algunas cosas.

No sabe porque, pero con Chan siente aquel sentimiento de que puede estar protegido y seguro, es como si cuando está en sus brazos o cuando él lo besa o bien le hace el amor se siente tan... tan querido, un sentimiento nuevo que le da a su vez miedo, las únicas personas que lo han querido han sido su madre y ella murió, su hermano y ahora está lejos al igual que Irene.

Aparte ¿Cómo podría quererlo o enamorarse de él? Él solo es un niño tonto que fue vendido con el único propósito de ser un negocio para su padre.

Siente como los brazos de Chan lo acercan más hacia su cuerpo, haciendo que él mismo respire aquel aroma varonil.

Vuelve a cerrar sus ojos para poder dormir de nuevo, Jessi no sube a despertarlo, bueno ayer no lo despertó, ¿Cómo sabría que no lo disfrutaría hoy?.

Puede sentir como comienza a moverse, para poder fingir que sigue dormido, se mantiene quieto.

Chan por su parte comienzan a abrir sus ojos, enfocados para saber dónde diablos está, esa no es su habitación y mucho menos esa es su cama, gira su rostro para ver a la pequeña figura que lo acompaña.

Minho, su esposo ¿Cómo demonios entro a su habitación?, lo último que recuerda es que estaba en su despacho tomando una botella de whisky, lo demás le es tan confuso.

Se lleva una mano a la sien, la misma que abrazaba a Minho de la cintura, mientras la otra se encuentra debajo del cuerpo de este.

Ve a su esposo de nuevo entre sus brazos, tan tranquilo que le dan ganas de besarlo para poder desnudarlo y hacerle el amor.

Con cuidado de no despertarlo se retira de la cama viendo a ese pequeño ángel, debía de salir de esa habitación antes de que sus hormonas hicieran algo.

- ¡Maldición! -Exclama al cerrar la puerta para llegar al baño, se puede ver en el espejo toda su ropa arrugada y sucia después del trabajo, se había dormido con Minho de esa forma, ahora que se despierte le reprochara eso, él mismo había dicho que ambos tendrían habitaciones separadas, fue un trato y como tal debía de respetarlo.

Vendido | MinChan AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora