Wamy Lapter y Aful Resid luego de experimentar lo aleatorio y doloroso que puede ser el destino hacen frente a el sentimiento de frustración al suministrar en moribundos una droga que genera la sensación de haber vivido experiencias de autorrealizac...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Nueve años atrás cuando Feske recién se levantaba como ciudad capital de Fluct después de haber sido remodelada por un incidente ocurrido allí Aful podía leer un papel que había quitado de su espalda el cual decía "No sueñes que me duele" y solo se quedaba callado mientras oía y veía como otros niños murmuraban a su alrededor.
Aful solo se limitaba a vivir con el perfil bajo hasta un día cuando se llevaba una reunión entre varias personas de ADSU.
En ese entonces Aful eran cuidados por dos personas que estaban en esa reunión
—Aful, deberíamos irnos a casa, ellos tardaran. —dijo Mirlotte quien estaba cansada y aburrida de estar allí.
—Yo no me puedo ir, tengo que estar aquí para cuando ellos digan que poremos comenzar nuestro próximo proyecto. —dijo Aful con entusiasmo.
—¿Sabes qué hacen con esos "proyectos" suyos verdad? —preguntó Mirlotte.
—No empieces de nuevo con esas tonterías por favor. —dijo Aful molesto. —Por cosas como esas nunca te digo nada sobre lo que construimos.
—Yo sé que tú eres consciente de lo que pasa con sus construcciones. —dijo Mirlotte. —Eso en lo que tanto se esfuerzan termina siendo usados para... —Es interrumpida por Aful quien puso su mano en su boca.
—Te diré lo que es pero no hables de eso aquí. —dijo Aful nervioso y la soltó.
—Mira ya salio la señora Sabery. —dijo Mirlotte.
Sabery se acerco a ellos y les dijo:
—¿Qué hacen ustedes aquí? No me digan que han estado aquí todo el tiempo de la reunión. —Lo siento, trate de convencer a Aful pero el no quiso que nos fuéramos. —dijo Mirlotte.
—¿Y que tal va la reunión? —preguntó Aful.
—Pues la verdad es que no esta yéndonos bien. —dijo Sabery. —Escucha Aful lo más probable es qe las cosas no salgan bien.
—¿Y las cosas en algún momento nos han salido bien? —preguntó Aful seriamente. —Vamonos Mirlotte, nos vemos en casa señora Sabery.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
