A Full Being

Capítulo 5: Chiste mal contado.

Mientras que Aful y Mirlotte ya habían llegado a su destino y laboraban en Feske regresaban la mayoría de los soldados supervivientes los cuales traían una gran carga encerrada en lo que parecía una jaula y cubierta con una tela con ellos.

—¡Abran paso! —dijo el hombre que manejaba el carro con la carga.

Entre los soldados que escoltaban el camión estaba Becca Bernelle, la hermana de Mirlotte quien después de llevar la jaula a una sala de experimentación se retiró a su casa donde encontró una nota de Mirlotte que le decía "Fuimos a reparar su desastre, vuelvo pronto" mientras descansaba no hacía más que en su cabeza se cuestionaba.

—Aful, espero que sigas igual de comprometido que aquella vez. —pensó Becca. —¿Debería ver que está pasando? ¿O confiar en que esa alarma base miedo no sonará? ¡Yo prometí que los dejaría en paz en esas pocas veces que pudieran librarse de la vigilancia de la ciudad!

Después de que Mirlotte y Aful investigarán en Siud; la ciudad que fue afectada por la producción de abono, Aful y Mirlotte ayudaron en la descontaminación y después de dos días ambos pudieron regresar

—¿Estará bien? —pregunto Aful a un doctor de Siud.

—Si descuida, en cuanto despierte la pondremos al cuidado del orfanato local. —dijo el doctor.

—Infórmenos si encuentran un caso parecido. —dijo Aful.

—Cuenten con nosotros. —dijo el médico.

Luego de eso Aful y Mirlotte regresaron a donde estaba Yev con Wamy.

—¿Qué tal les fue? —pregunto Yev.

—Por parte de la contaminación eso está solucionado, pero la aceleración que causo bastantes muertes y desapariciones. —dijo Mirlotte. —En cuanto a las desapariciones ese ya es trabajo de la policía ¿A ti que tal te fue?

—Estuve algo aburrido, pero me da gusto que haya sido así. —dijo Yev.

—Bien y ¿Alguien pensó en como la esconderemos? —pegunto Mirlotte. —Si la llevamos la vigilancia provocará que nos investiguen aún más y cuando descubran que estamos ocultando a una persona de un país enemigo todo se habrá acabado para nosotros.

Yev con desesperación llevo sus manos a su cabeza y con exaltación dijo:

—Maldición creí que con aguantar hasta que regresar mi trabajo aquí estaría completo, pero no puedo pensar después de que tuve que usar la mitad de mi comida y de mi agua para mantenerla viva.

—Pero has vencido tú miedo, cuando le contemos a Anan seguro se fijará en ti. —dijo Mirlotte.

—No creo que las cosas no funcionen así, como si eso fuera a alejar a todos sus pretendientes. —dijo Yev.

—Si quieren ustedes pueden regresar a Feske. Mirlotte, Becca regreso ayer y si te quedas aquí ella nos encontrará en seguida en cuanto note que no has vuelto el día que le dijimos. —dijo Aful. —Y Yev, no quiero que mueras después de haberte arriesgado por nosotros.

—Bien, Mirlotte, ya escuchaste a Aful es hora de irnos, ah y por cierto Aful ¡No te olvides de invitarnos a la boda! —dijo Yev.

Entonces Aful saco un poco de comida y agua de su mochila, se los dio a Yev, posterior a eso dijo:

—Toma esto ayudará a tú cerebro.

—Gracias. —dijo Yev desconcertado. —¿Qué comerás tú?

—Yo aún tengo la comida que traje desde casa, te doy esa porque es de la que nos dieron en Siud.

—Pero esa ciudad estaba contamina... olvídalo ya entendí. Con esa seriedad que siempre tienes no puedo saber si estás hablando en serio o me estás hablando como en... —Decía Yev pero lo interrumpió una carcajada la cual provenía de Wamy.

—Creo que a la dormilona si le dio risa. —dijo Mirlotte.

Repentinamente después de esto Wamy se lanzó contra Mirlotte dispuesta a devorarla.

—¡Ayuda! —Dijo Mirlotte con mucho pánico.

Aful y Yev luego de esto la trataron de ayudar, pero mientras lo hacían Wamy se tranquilizó y volvió a quedarse inconsciente por unos segundos y al poco tiempo ya cuando Mirlotte estaba a salvo Wamy volvió a despertar preguntando.

—¿En qué lugar estoy? ¿Me raptaron los aliens? —se cuestionó en un tonó atontado mientras que su vista se aclaraba. —¿Son aliens?

Luego de esto a Wamy se le aclaro la vista y los vio bien.

—¿Son Fluctenses? ¿Y yo? No recuerdo ¿Ustedes saben que me paso? —dijo Wamy con confusión.

—Lo que paso es que te encon... —decía Mirlotte pero Aful le boca con sus mano.

—Tú nombre es Sower Sulsop, lo que paso es que íbamos camino a descontaminar un lugar, pero un último Wamiano sobreviviente nos atacó y tú fuiste la única que tuvo la valentía de confrontarlo. En la pelea luego de que lo venciste en un último ataque arranco tu tallo y el trauma causo pérdida de memoria. —Dijo Aful.

—¿Lo mate? –preguntó Wamy con tristeza. —¿Estás diciendo que extinguí una especie?

—No, lo matamos entre todos. —dijo Mirlotte. —Extinguimos a una especie entre todos y lo permitimos por el miedo a desaparecer. —Dijo Mirlotte la cual se acercó a Wamy y le dio un abrazo.

Luego de que Mirlotte la soltará, Wamy dijo:

—A pesar de que no recuerdo nada. Me hace feliz que me hagan sentir como en casa. —dijo con un tono tranquilo y luego vio en dirección a Aful. —¡Por cierto tú! enséñame más de esas bromas tuyas ¡Son muy buenas! —dijo con entusiasmo lo cual sorprendió a Aful y luego Wamy vio en dirección a tallos que los Fluctenses tenían en la cabeza. —¿Y lo que tienen en su cabeza es un tallo? ¡Es increíble! ¡Me gustaría no haber perdido el... —En ese momento Becca apareció repentinamente y le dio un golpe muy fuerte a Wamy.

...