A Full Being

Capítulo 17: Negociando con el orgullo.

Wamy al ver lo que los soldados pensaban hacer logró se lanzó sin pensarlo, abrazando a Aful y cayendo ambos al suelo sin recibir ningún daño significativo.

—Por favor no pierdas el ritmo, sé que puedes ser veloz. —Dijo Wamy quien se levantó y dio un paso hacia atrás dejando el camino libre a Aful quien se levantó rápido y tomó la delanterá.

Entonces los soldados trataban de precisar temblorosos hacia la cabeza de Aful que sobresalía un poco sin embargo Becca muy molesta dijo:

—Olvidan que si fallan estamos muertos idiotas. —dijo Becca lo que hizo los soldados bajaran las armas.

Posterior a eso Becca se fue siguiéndolos lo que le daría más presión a Aful y atrás de ella Neb no se limitaría en lanzarse contra Lazb quien confiado observaba lo que había provocado de manera burlona.

—¡No debiste haber sobrevivido hijo de puta! ¡Pero te borraré ahora esa maldita sonrisa! —dijo Neb con furia. —¡A los tres nos había costado tanto sobrevivir y con tus estupideces mataste a alguien!

—Deberías de agradecer que fue solo un novato ADSU, aunque me duela admitirlo hubiera sido una pérdida significativa haber matado a Resid tan rápido. —dijo Lazb para luego recibir un golpe por lo que los demás soldados se apresuraron a separarlos.

—¡Suéltenme! ¡Lo tengo que matar! —exigió Neb quien pronto tuvo una escopeta apuntando su frente.

—No debiste subestimarme, pero tranquilo ahora que advertí que ese traidor tiene muchos secretos podré tener la oportunidad de hacer que te manden lejos y no podrás hacer nada para defender a tu hermanita. —dijo Lazb.

—¡Ni creas que dejaré que le pongas una mano encima! —dijo Neb.

—¿Por qué piensas tan mal de mí? Créeme será tan tierno, Mirlotte y yo seremos unos padres para ella, su educación será base de estricto rigor.

Neb aparto rápidamente el arma de Lazb y lo derribó nuevamente dejándolo esta vez inconsciente y recibiendo miradas de decepción.

—¿En serio crees qué Mirlotte dejaría que le pusieras una mano encima a Niban? Tanta necesidad te hace hablar de forma patética. —dijo Neb. —¡Escuchen! ¡Yo soy testigo de que los planes de Aful Resid están libres de dobles intenciones! ¡Él sabrá explicar los beneficios en su momento! ¡Ahora dejemos aquí a este charlatán y ayúdenme a convencer a nuestra superior a posponer la ejecución!

—¡Si! —enunció el resto de forma sincronizada.

Al mismo tiempo más adelante Wamy y Aful se habían mantenido en ventaja contra Becca y aprovechándose de eso Wamy preguntó:

—¿Aful alguna vez hablaste con alguna cosa como fantasmal cuando tu cuerpo estuvo en total descontrol del HAFEND?

—No recuerdo mucho, solo recuerdo la sensación de culpa. —dijo Aful.

—Ya veo. —dijo Wamy.

—Ahora te preguntaré a ti ¿rompiste acaso la promesa con Yev? —dijo Aful mientras entraban a las ruinas de un edificio y todo se tornaba oscuro.

—Justo por eso necesitaba preguntártelo. La noche que acepté esa condición no me sentí como yo en mi totalidad. Comprendo si lo sientes como excusa y me callaré si me lo pides ahora. —dijo Wamy.

—Yo lo entiendo más que nadie, aunque no sé si Mirlotte lo vaya a hacer. —dijo Aful.

—Pero ella está consciente de la existencia del HAFEND. —Preguntó Wamy.

—Si, pero nunca estaría de acuerdo con su uso en una persona sana y si perdemos su apoyo estamos acabados. —Dijo Aful.

Mientras tanto a fuera Becca estaba a punto de adentrarse en el edificio cuando Neb la alcanzó:

—¡Espere señora Bernelle! —Dijo Neb quien llegaba solo a la entrada del edificio donde Becca se detuvo.

—Neb... ¿Qué haces aquí? ¡Ni tu ni nadie tenía autorizado moverse!

—Lo siento señora, pero tenemos que hablar con usted. —dijo Neb.

—¿Tenemos? —dijo Becca y Neb vio a sus lados donde no había nadie.

—¡Son unos cobardes! ¿A dónde fueron? ¡Hace casi nada estaban atrás!

—La respuesta es sencilla. —Dijo Yev desde atrás de ellos quien apuntaba con un arma. —Nosotros nos deshicimos de ellos. —él estaba asistido por un grupo de niños de entre ocho y nueve años.

—Oye, sus padres deben de estar muy preocupados por ustedes. —dijo Becca. —Deja de bromear no quiero sentirme mal por matarte luego de que has salido bien librado, además Mirlotte se enojará si te pasa algo.

—No quiero que este tan confiada. —Dijo Yev. —No importa la fuerza que tenga, eso nunca le podrá ganar al deseo que tengo de proteger a mis amigos.

—¿Un traidor como Aful lo puedes considerar amigo? —preguntó Becca.

—Ese traidor como lo llaman y la chica que esta con el hicieron todo esto para poder disfrutar de una vida sin vigilancia algo así como estuvimos en Catapil ¿Acaso me van a decir que no se sintieron aliviados y tranquilos sin ser vigilados? —preguntó Yev.

—Deja de retrasarme, de aceptar sus reglas estaría permitiendo que esos malditos Lapter me pisoteen una vez más. —Dijo Becca. —Antes muerta que dejarme gobernar por un Lapter.

—Se equivoca, ella no tiene la más mínima intención de gobernar ningún país, a ella se le hace un trabajo bastante aburrido. —Dijo Yev.

—¿Esperas que crea esa estupidez? ¿Qué no puedes ver a tu alrededor? —Preguntó Becca molesta.

—Ahhh cierto, ahora recuerdo el porqué de su falta de comprensión, me olvide que son excepciones con privilegios. —Dijo Yev. —Pero en estos días he podido invertir un poco las posiciones de este país y lo que ves frente a ti son parte del sector que han abandonado, pero tranquila se lo que significan para Mirlotte y no los trataré como se merecen.

—Ya me harté de escuchar tus lamentos. —Dijo Becca y corriendo dirigió hacia Yev.

—Yo no quería llegar a esto, pero será necesario. —Dijo Yev guardando su arma y alistándose para pelear.