crush ; spreen ✓

28 ︴ ready for love

ivan abrió los ojos, estaba cansado, había dormido horrible en ese colchón, quería volver a su habitación, pero tenía miedo de incomodar a nini.

hablando de ella, miro hacia arriba y la vio con una camiseta gigante de la tercera gira de twice, con un rodete en la cabeza todo desordenado y sus pantuflas de gato.

aún así era hermosa.

— buen día — bostezo — ¿cómo has dormido?

— bien — mintió levantándose del colchón.

— parece que no — lo miro de arriba a abajo, escaneandolo, cosa que lo puso nervioso — ¿quieres que te prepare algo?

— nini, sos pésima cocinando.

— ey, no tanto — se quejo — se hacer café tipo estorba.

— starbucks.

— eso — lo señaló — ¿quieres?

— no es nece-

— siéntate ahí, ya te llevo — sonrió emocionada, quería demostrarle que sabía hacer algo.

el muchacho suspiro y se sentó en el sofá, mirando su celular y a la castaña medio rubia.

recordó que una vez le dijo que se tiñera de rojo fuerte, parece que nina se olvidó...

jeje...

— eu — la llamo, ella volteó intrigada — ¿te acordás lo de que te tiñas el pelo?

— ay, si — exclamó sorprendida.

— se me ocurrió algo para un stream — dijo — no, un vídeo.

— a ver — se cruzó de brazos para escuchar.

— "le tiño el pelo a mi novia"

— ¿que?

hubo un silencio incómodo, hasta que spreen se rió.

— joda, boluda — rió incómodo.

— ah... — murmuró desilucionada.

— ¿te parece? — ignoro el tono de la chica y el hecho de que se volteo nuevamente, dándole la espalda.

— si...tal vez — se encogió de hombros para caminar a el y darle el café.

— pero vení, ey — la llamo cuando ella comenzó a subir las escaleras.

— me voy a vestir — informo sin mirarlo.

el suspiro cuando la vio meterse a la pieza, ¿que hizo mal?

escucho un chillido desde la habitación que lo hizo salir de su viaje, miro a la escalera y vio a nini con su ropa normal bajando las escaleras corriendo.

— ¡blackpink ha sacado ready for love! — gritaba sin parar, el la miraba raro.

— ¿black que? — frunció el entrecejo.

— no importa, hay que oírla — coloco el vídeo en su celular.

la canción y el mv se reproducían y nini cada vez chillaba más, ivan se acercaba a ella lentamente, para ver el vídeo y para estar cerca de ella.

— i'm ready for love — murmuraba, el la observaba con admiración.

cuando termino, anina se lanzó al suelo con emocion, amaba a blackpink.

— ¡es increíble!

— está buena.

— ¿has visto? ¿y el rap de lisa? uff — se sentó sonriendo, dejando que su cabello largo rubio medio castaño callera por sus hombros.

— me encanta tu pelo — el se bajó del sofá para sentarse frente a ella y tocar su cabello.

ella solo se limito a ponerse nerviosa mientras miraba los ojos oscuros del muchacho.

el lo noto, por lo que se rió levemente y saco la mano de su pelo.

ambos se quedaron mirando mientras la nueva canción de blackpink sonaba de fondo.

ella iba a acercarse un poco para romper el hielo, pero el timbre sonó, interrumpiendo el momento.

— ah, es lo que pedí para el stream de hoy — dijo el, levantándose y tomando las llaves para abrir la puerta.

la chica bufo cuando el se fue, era el momento...

se levantó igualmente y se sirvió un vaso de agua.

— mira lo que es esto — le mostró el muchacho al llegar nuevamente al departamento.

— ¿que es? — dijo curiosa, acercándose a él y tocando la caja.

— ni idea — se rió, hasta que levantó la vista de la compra y observo con el interés que la chica miraba la caja.

nini trataba de desifrar que era aquello tan extraño, hasta que vio letras japonesas.

— ¡nipponsei! — exclamó de la nada.

— ¿eh?

— hecho en japón — señaló las letras.

— cómo lo que tenes en tu bio de instagram — se rió.

— ¿que?

si, nini tenía "made in japan" en su biografía de instagram, lo raro es que lo cambio ayer a la noche...¿como el lo sabía?

— so — hizo burla para cambiar de tema.

ella rodo los ojos y lo empujó, causando que la caja cayera y quedará en las piernas de ivan, quien cayó al suelo.

— ¡hija de puta! — se quejo mientras ella reía, para luego tomarla de la mano y tirarla arriba de el.

ella se quejo gritando y miro los ojos oscuros del argentino, quedándose en ellos por tiempo.

el tampoco podía apartar la vista de ella, pero de sus labios, moría por besarlos desde hace mucho.

ella no hizo nada más que llenarse de valor, haciendo lo que más esperaba hace mucho tiempo.