Último adiós | Chaennie

Capítulo 22 (despedida)

Jennie

La cena de mi padre terminó un poco tarde, tenía sueño así que solo llegué a mi casa a dormir le dejé un mensaje a Rosé esperando que contestara pero no lo hizo. Me quedé dormida, hasta que el sonido del celular me despertó pude ver que era Rosé y contesté.

Hubby amor, ¿que pasó todo bien?.

Jennie, soy yo Chaeyoung, te llamo para que vengas al hospital.

Chaeyoung ¿que paso? ¿Porque me hablas tú y no Rosie? -ya estaba preocupada y me desespere-.

Solo ven si, aquí te cuento todo.

Ya salgo para allá -me levanté y fui al cuarto de mis padres les comenté que Rosie estaba en el hospital y decidieron acompañarme, no me sentía tranquila sentía que algo andaba mal, llegamos al hospital y me encontré con Chaeyoung, Alice y Lisa-.

Ya vine que pasó, donde está Rosie quiero verla -ninguna de las tres me decía algo, me desespere- ¿Que pasa porque ninguna me dice algo- las tres se miraban entre ellas para ver quién decía algo-.

Jennie cálmate si, ven conmigo, acompáñame -Alice tomó de los hombros a Jennie y la alejó un poco de los demás-.

Que pasó Alice dime, porque tú estás llorando y Chaeyoung también, ¿Rosie está bien? -a este punto Jennie tenía sus ojos cristalizados tratando de buscar respuesta en los ojos de Alice- ¿qué fue lo quepasó?.

Jennie tienes que ser fuerte si, Rosé tuvo un accidente en la moto un camión impactó contra ella y...  -Alice se quedó unos segundos en silencio- se perforó un pulmón, sufrió un gran golpe en su cabeza a pesar de llevar casco. Rosé se veía muy mal Jennie, su salud estaba en mal estado, hice todo lo que estaba en mis manos pero no pude Jennie, no pude salvarla el accidente fue muy duro que no pudo resistir -dijo Alice llorando-

Mi hermana falleció hace 1 hora Jennie, lo siento mucho. -Jennie no pudo más y rompió en llanto-.

Por favor dime que no es así.

Jennie cálmate por favor si -dijo Alice tratado de agarrar sus manos pero Jennie no se dejó-.

No me pidas que me calme, como quieres que lo haga si ya no volveré a ver a Rosie, sueltame por favor, necesito verla -Alice la abrazó mientras Jennie le daba pequeños golpes en su pecho- no puede estar muerta Alice.

Todos estaban en la sala de espera mientras que Jennie estaba sentada solita mientras lloraba desconsoladamente. Su madre se acercó a ella para abrazarla

Hija...

Mamá, no puedo creer que Rosie ya no esté -los ojos de Jennie ya estaba muy hinchados de tanto llorar- yo tenía muchísimos planes con ella mamá, porque todo lo que me hace feliz me lo arrebata la vida mamá, ella era el amor de mi vida.

Su madre no soportó ver a su hija destrozada la abrazó mientras que su padre se acercó lentamente hasta ellas y la abrazó.

Estamos aquí hija, se fuerte estoy seguro que a Rosé no le gustaría verte así -dijo su padre mientras la abrazaba-.

Jennie dijo que iría al baño, pero en realidad entró al cuarto donde Rosé se encontraba. No soportó verla así en la camilla, Jennie devastada dejó caer sus lágrimas.

Porque me dejaste hubby, teníamos planes por cumplir amor -Jennie se acercó al cuerpo de Rosé mientras acariciaba su mejilla- te amo Rosie, no se como saldré adelante sin ti, tu eras mi angel. Gracias a ti aprendí a ser fuerte, pero en estos momentos no lo soy.

Jennie besó sus labios una última vez. Y salió de ahí antes de que la llegarán a sacar.

Deben ir a casa ya es demasiado tarde vayan a descansar-dijo Alice con su voz entrecortada-.

No podré dormir igual -dijo Jennie-. Ya no tengo sueño, ya nada será igual.

Jennie iba a salir pero vio a Chaeyoung y Lisa hablando y se acercó a ellas.

Oigan ustedes dos estuvieron en la carrera verdad, me podrían decir que pasó por favor. -dijo Jennie mientras evitaba llorar-.

Yo la estaba esperando en el punto de llegada, pero nunca apareció hasta que Lisa me dijo lo que pasó -dijo Chaeyoung muy triste-.

Yo si se que paso -dijo Lisa cabizbaja- yo venía atrás de ella pero llegué tarde para ver exactamente todo, pero un camión se estrelló con Rosé, al parecer perdió el contro y Rosé no pudo esquivarlo, aparte la lluvia pudo afectar en eso, llamé a la ambulancia pero no resistió, Jennie lo siento mucho de verdad. -dijo Lisa poniendo una mano en el hombro de Jennie-.

No puedo creer que ya no la podré ver nunca más -Jennie salió del hospital y se fue a su casa, mientras veía vídeos y fotos dónde estaba con Rosé-.

Jennie entró a su habitación y cerró la puerta, sacó el suéter que era de Rosé mientras lo abrazaba aún olía a ella ese perfume que le encantaba a Jennie y se lo puso, lo que quedaba de la noche Jennie no dejaba de llorar, hasta que se quedó dormida.

Ya había amanecido cuando su madre empezó a tocar su puerta Jennie no quería ver a nadie, sus lágrimas ya no salían por más que quería llorar, sus ojos dolían se sentía destrozada del corazón y alma.

Hija abre la puerta, ven a desayunar come hija, te enfermaras y no quiero verte mal.

No quiero mamá no tengo hambre, no me importa estar enferma a este punto -dijo desde su habitación-.

Hija por favor has el intento.

Jennie con las pocas fuerzas que tenía abrió su puerta pero se volvió acostar.

Hija vamos.

No quiero mamá.

Irás al sepelio hija, te acompaño.

Será muy doloroso mamá. Pero quiero despedirme de ella.

Ven vamos a comer si y después vamos.

Jennie no comió casi nada su apetito se desvaneció. Ya habían llegado al lugar del sepelio. Jennie no podía llorar aunque quisiera no podía, fue como si sus lágrimas se hubiesen secado.
Alice se acercó a ella.

Hola Jennie.

Hola -Jennie no tenía ánimos de nada-.

Se que esto será muy difícil. Nunca se supera la pérdida de alguien pero aprendemos a vivir con la ausencia. Ahora en la mañana sentí un gran vacío en mi casa, esto será demasiado difícil para mi Jennie, ella era todo lo que tenía y ya no estará más -Alice ya estaba llorando-. Vi que la habitación de Rosé estaba abierta así que entré y encima de su escritorio encontré esto. Pensé que querrías tenerlo, habla mucho de ti en este cuaderno, pueda que solo esté escrito pero de alguna manera ella te acompaña. Y esta foto donde ustedes dos están, Rosé un día me dijo que tú eras esa luz en su vida. Y te agradezco como no tienes idea, porque hiciste que mi hermana volviera a ser feliz y conociera un amor verdadero. Gracias Jennie, te dejo esto, tú sabes que cuentas conmigo para lo que tu quieras. -Alice se acercó la abrazó dejó la foto y el cuaderno en manos de Jennie y se despidió-.