Accidente.

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Rey vivía en Naboo con su mamá. Su padre había muerto cuándo ella era pequeña así que solo eran ellas dos. Su madre tenía una hermana en Coruscant pero no eran muy cercanas.

Esa mañana cuándo bajo a desayunar le preguntó:

-Oye mamá, crees que podrías prestarme el auto?

-No, hoy debo ir al otro lado de la ciudad.

-Oh, está bien.

Elein miró a su hija y le dijo:

-Sabes que siempre te lo puedo prestar, pero si lo hago hoy llegaré muy tarde a casa, entiende cariño.

-Lo entiendo mamá, no te preocupes.

-Rey...

Está suspiro y se disculpó:

-Lo siento, es que llegaré más tarde hoy.

-Esta bien.

-Muy bien mamá- dice levantándose de la mesa- mejor me voy.

-Con cuidado cariño.

-Sí mamá, te amo.

-Tambien yo.

-Ten cuidado, quieres - le dijo desde la puerta.

-Lo tendré, adiós.

-Adiós mamá.

Rey se fue sin saber que sería la última vez que hablaría con ella. Cuándo llegó a la escuela ya era tarde y uno de los profesores la regaño. Cuándo acabó el día ya en la tarde Rose la acompaño a la parada de autobús y le preguntó:

-Oye mañana vamos a ir, es viernes.

-Claro, porque no! Espero que mamá me presté el auto.

-Sí no te lo presta nos venimos con Poe.

-Esta bien.

-Bueno, nos vemos- se despidió Rey.

Llegó a su casa y puso su mochila en el sillón, después prendió su radio y se puso a hacer la comida.

Unas horas después ya había comido y estaba haciendo sus deberes cuándo tocaron el timbre, ella se extraño porque su madre tenía llave; tal vez la dejó, fué a abrir diciéndo:

-Sabes mamá eres...

Pero se detuvo al ver a dos policías en su puerta. Las lágrimas empezaron a salirsele, ya sospechaba lo que sucedía, uno de ellos la agarró de la mano diciéndole:

-Vamos Rey, hay que entrar.

Rey asintió pero seguía llorando hasta que se calmó y preguntó:

-Cómo paso?

El policía suspiro y le contestó:

-Estaban construyendo y derrapó, el auto se volteó; lo siento.

-Puedo verla?- preguntó llorosa.

-No creo que sea buena idea.

-Porque no?

-No Rey, no es una buena idea.

-Pero...

-Mejor quédate con el recuerdo de cómo era ella.

El policía suspiro y miró al otro oficial. Esté tragó saliva. Casi estropea todo. Salió de la casa y el policía le preguntó a Rey:

-Tienes dónde quedarte unos días?

-Sí, con mi amiga Rose- le dice.

-Bien.

La vió que no se movía y le susurró:

-Ve a hacer tú maleta, para llevarte a casa de tú amiga.

-Esta bien- dice ella levantándose.

Ella subió las escaleras, entró a su habitación e hizo su maleta pero cuándo acabó empezó a llorar, se sentó en el suelo agarrándose las rodillas y lloró más fuerte; estaba sola y no tenía a nadie, su madre había muerto. Se secó las lágrimas, se levantó y cerró su maleta, prometió ahí en la oscuridad que sería valiente a pesar de todo, que sería una gran persona cómo le decía su mamá, lo haría.


Aquí otro capítulo.

Saludos Marí 😉.

sexo, drogas y otras cuestiones.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora