En el centro de la ciudad de la cruz en el complejo de departamentos de siempre, 2 hermosas jóvenes se encontraban sentadas en un sillón, una de ellas estaba totalmente inmersa viendo una película, mientras que la otra había caído en un profundo sueño. Pareciera que no tenía planes de despertarse, su hermoso rostro parecía tan tranquilo que sería un pecado despertarla.
Una vez que la película finalizara, la joven que abrazaba su oso de peluche formó una hermosa sonrisa llena de satisfacción, su rostro constrastaba perfectamente con el de su amiga, pues mientras una tenía un aura más madura y sexy, la otra era más infantil y tierna, dando la sensación de querer protegerla y mimarla.
Jhovanna: No importa cuántas veces la vea, siempre es igual de entretenida. ¿Verdad Sofy?.
Jhovanna esperaba la respuesta de su amiga, la cual nunca llegó, cuando volteó para verla encontró a su amiga profundamente dormida. Se paró y se posó frente a ella mientras pareciera contemplar el infinito totalmente inmersa en sus pensamientos.
Como si un foco se hubiera encendido en su cerebro, el tierno rostro de Jhovanna floreció en una sonrisa maliciosa, se acercó al rostro de su querida amiga y sacó dos marcadores, les quitó la tapa y comenzó su maquiavélico plan.
Jhovanna: Esto es por todas esas veces que te burlaste de mi.
La joven tomó los marcadores y dibujó un bigote y un monóculo en el bello rostro de su amiga, miró satisfecha su trabajo, pero sentía que algo le faltaba, se quedó contemplando el rostro de su amigo pensando en lo que faltaba.
Jhovanna: ¡Ya sé!.
Se acercó aún más y levantó el flequillo de su amiga, pues su plan era dibujar un par de cuernitos en la frente de Sofy. Lo que no esperaba era que cuando levantará el flequillo la otra parte abriera sus ojos y la mirara con una sonrisa.
Sofy: ¿Qué estás haciendo?.
Jhovanna: Solo quería darte el besito de las buenas noches.
La joven había puesto sus infalibles ojos de cachorrito regañado para que su amiga no dudará, pero al ver que no estaba funcionando enderezó su espalda y camino en dirección al baño.
Jhovanna: Tengo que ir al baño, ya vuelvo.
Como si su vida dependiera de ello corrió con sus pequeños pies hacia el baño, Sofy solo se quedó en su lugar mirando con una sonrisa a su pequeña amiga, planeando lo que e haría a continuación.
Despues de unos minutos Jhovanna salió y caminó hacia el sillón como si hubiera aceptado su destino, Sofy se levantó y caminó hacia el baño sin decir nada, la pequeña parpadeó confundida, pero pensando que era su oportunidad corrió para buscar un escondite en el departamento. Una vez que logro encontrar un buen escondite pudo escuchar los pasos y un hermosa voz cantando una canción muy tétrica.
Sofy: Uno dos Sofy viene por ti.
Tres cuatro cierra la puerta.
Cinco seis me estoy acercando.
Siete ocho…
Jhovanna estaba temblando de miedo, la venganza de Sofy estaba rindiendo frutos, recordó el temor a las películas de miedo de su amiga, así que decidió torturarla un poco, solo faltaba la cereza del pastel.
La pequeña se encontraba totalmente aterrorizada, estaba esperando lo peor, pero no sé escuchó ningún ruido. Pero tampoco quería fiarse del silencio, así que lentamente movió su cabeza hacia un lado y un rostro totalmente aterrador aparecía frente a ella y dijo 2 simples palabras.
Sofy: Te encontré.
Cuando Sofy estaba por estallar de a risa pudo ver que los ojos de la pequeña se volvían blanco y caía inerte al suelo, Jhovanna se había desmayado del susto.
Sofy al verla de esa manera no se preocupó, no es como si fuese a morir, así que solo la levantó y la llevó hacia su cama mientras miraba a la joven con una sonrisa malvada.
Sofy: Hora de completar mi venganza.
Sacó su celular y comenzó a tomar fotos de Jhovanna en diferentes poses.
En medio de la carretera.
En un auto en medio de un embotellamiento se encontraban 3 jóvenes, 2 hombres de unos 25 años y una mujer rubia que parecía en sus 20. Los 3 estaban escuchando la radio mientras tenían una sería conversación.
Lucas: Por última vez, Iron man le parte la madre a Capitán América.
Lautaro: Y yo te digo que no, ¿Acaso no viste la película?.
Mily: De hecho debo darle la razón a Lucas, el Capitán América solo le hizo frente a Iron man con la ayuda de Bucky.
Lautaro: Mi propia sangre me traiciona.
Mientras El joven que conducía se sujetaba el pecho con una mano como si hubiese sufrido una herida fatal, los otros 2 solo lo miraban serios y hablaron al unísono.
Lucas/Mily: No es mi culpa que tengas mal gusto para super héroes.
Lucas: Solo falta que me digas que King-kong le gana a Godzilla.
Lautaro, Pero si lo hace.
Mily: Me repugnas, mamá una vez me dijo que alguien en la familia era adoptado, ahora sé quién es.
Mientras la rubia regañaba a su primo el celular de Lucas sonó, lo sacó de su bolsillo y miró la notificación, se dio cuenta que Sofy le había mandado una foto, así que por mera curiosidad abrió el chat y cuando vio aquellas imágenes, sus ojos se abrieron de par en par.
Al ver que Lucas estaba con su celular Mily frunció el ceño y estiró su mano sacándole el celular a Lucas.
Mily: Estamos de vacaciones, nada de celular para ti…
Estaba por continuar hablado pero por accidente vio la pantalla y también abrió sus ojos de par en par, su bello rostro se sonrojó y miró con reproche a Lucas.
Mily: Pervertido.
Lucas decidió no refutar nada, pero mientras Mily estaba distraída recuperó su celular y guardo todas las fotos en la nube.
De nuevo en el departamento con las chicas.
Sofy estaba mirando con gran orgullo su obra maestra, la pequeña Jhovanna se encontraba recostada en la cama, su cuerpo estaba cubierto de sudor, su hermoso rostro estaba sonroja y su ropa estaba totalmente desordenada. Hacía tiempo que había recobrado la conciencia, pero no pudo hacer nada ante la fuerza superior de su amiga.
Jhovanna: P-pervertida, me v-voy a vengar.
La respiración de Jhovanna era pesada, trato con todas sus fuerzas de articular correctamente sus palabras mientras miraba con enojo a su querida amiga, la cual básicamente había abusado de ella.
Jhovanna: ¿Le mandaste las fotos a alguien?.
Sofy: Tal vez.
Los ojos de Jhovanna empezaron a empaparse con lágrimas mientras miraba con reproche a su amiga la cual sonreía de forma malvada mientras sujetaba su celular.
Sofy: Oh vamos no me mires así, agradece que no se las mandé al extraño del mercado.
Jhovanna: S-se las enviaste a L-lucas?.
Sofy: ¿A quien más?.
Jhovanna: ¡Te odio!, ¡Voy a dejar de ser tu amiga!.
Sofy: Siempre dices eso y mirate, 500 años después todavía vienes a mi casa.
Jhovanna: Ésta no es tu casa, es de Lucas.
Sofy: En si no estás tan mal, pero se te olvida que yo pago la renta, así que el departamento es parcialmente mío, podría decirse que se me entregó temporalmente, además Lucas ya ofreció regalarmelo.
Jhovanna: Si, pero tú lo rechazaste.
Sofy, Eso fue por qué mi mamá me dijo: “Si alguna vez alguien con dinero te ofrece algo, acéptalo, ya que dinero no le falta”.
Jhovanna: Entonces… ¿Por qué lo rechazaste?.
Sofy: Por qué la madre que me dio ese consejo, también fue la que eligió a mi querido esposo que me estranguló hasta matarme.
Mientras hablaba con una sonrisa en su rostro, bajo el cuello de su camisa y dejó ver la marca del alambre que rodeaba su cuello pálido.
Jhovanna: Ah… Eso tiene sentido.
Sofy: Sabes, siempre me lo eh preguntado, pero, ¿Cómo fue que te moriste?.
Jhovanna: Emmm pues verás, un duende mágico me tiró al pozo y me estranguló hasta matarme.
Sofy pudo ver que su amiga estaba bastante nerviosa, desviaba la mirada y estaba sudando.
Sofy: Ahora dime la verdad.
Jhovanna:… Escuché a unos niños hablando de un pozo que cumplía deseos fuera del pueblo, pensé que si me asomaba después de lanzar la moneda podría ver mi deseo hacerse realidad, pero… T-tropeze y me caí dentro del pozo.
Sofy:…
Jhovanna:…
Sofy: pffft… ¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!.
Jhovanna: ¡N-NO TE RIAS DE MI!.
Sofy: P-pero don es que solo, Jajajajajajajajaja, el deseo… Tu… ¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!.
Jhovanna Ya tenía sus hermosos ojos cubiertos de lágrimas mientras veía a su amiga reírse a carcajadas mientras se sujetaba el estómago, pero entonces se le ocurrió una idea y sacó el celular que Lucas le había regalado y abrió la aplicación de cámara y sacó unas cuantas fotos en secreto.
Sofy continuó riéndose por unos minutos más hasta que logró calmarse y miró en dirección a su amiga, la cual sonreía con malicia y satisfacción a su celular, lo cual llenó de curiosidad a la joven y por lo cual se acercó a ella.
Jhovanna no lo ocultó, mostró que había enviado la foto de ella riéndose a carcajadas y una en la que tenía la cara pintada mientras dormía, levantó la mirada y miró fijamente a la pequeña frente a ella y solo pronunció una palabra.
Sofy: Corre.
Jhovanna sé levantó de un salto y corrió por todo el departamento mientras era perseguida por Sofy.
Sofy: ¡MAS TE VALE QUE NO TE ATRAPE ENANA, O JURO QUE TE ARRANCO LOS PECHOS!.
Jhovanna: ¡AAAAAAH, NO PUEDES ARRANCARME LO QUE NO TENGO!.
Ambas dejaron de correr en ese momento y se quedaron quietas, Los ojos de Jhovanna empezaron a llenarse de lágrimas, en contraste Sofy había empezado a reírse a carcajadas, estuvieron de esa forma por unos minutos hasta que Sofy se calmó y le dio palmaditas en la cabeza a su amiga la cual había estado haciendo pucheros desde hace rato.
Sofy: Ya ya, ¿Quién quiere helado?.
Jhovanna miró de reojo a Sofy y dijo refunfuñando.
Jhovanna: ¿De que sabor?.
Sofy: ¿De cual más si no chocolate?.
La linda cara de Jhovanna se ilumino de repente y empezó a dar saltos por la sala. Mientras Sofy la veía saltar sacó su celular y buscó una heladería con servicio de entrega, envío un mensaje con su pedido y se recostó en el sofá.
Jhovanna ya se había preparado para salir, se había puesto un abrigo y estaba esperando en la puerta a qué Sofy salga, pero cuando no apareció entró a la sala y la vio recostada en el sofá, así que salto sobre ella para apurarla.
Jhovanna: ¿Qué estás haciendo?, Tenemos que ir a comprar el helado.
Sofy: ¿Sabías que ahora existe algo maravilloso llamado internet?.
Jhovanna: Por supuesto, soy básicamente una experta en eso.
Sofy miraba a su amiga inflar su básicamente inexistente pecho con orgullo y solo podía sonreír.
Sofy: ¿Enserio?, ¿Qué acabo de hacer hace un momento?.
Jhovanna: Súper fácil, acabas de enviarle un mensaje a Lautaro por qué lo extrañas.
Dijo la pequeña con orgullo y confianza, como si fuera imposible fallar.
Sofy: Aja, ¿Sabías que ahora hay restaurantes y locales que tienen entregas a domicilio?.
Jhovanna: ¿Cómo el chico que le trae pizza a Lucas?.
Sofy: Exacto, acabo de buscar y resulta que hay una heladería cerca de aquí que hace entregas a domicilio. Ya hice el encargo de tu helado.
Jhovanna: ¡Genial!, Entonces iré a vestirme para la ocasión.
Jhovanna corrio hacia la habitación de Sofy bajo la mirada perpleja de la misma, ¿A qué se refería con vestirse para la ocasión?, Después de pensarlo un poco, Sofy dejó de preocuparse y siguió recostada en el sofá. A los pocos minutos escucho la puerta de su habitación abrirse, volteó la mirada y pudo ver a una Jhovanna con un traje de dinosaurio verde. Al verla de esa forma Sofy no pudo evitar hacerle una pregunta.
Sofy: Dime Jhovy, ¿Cuántos años tienes?.
Jhovanna: ¿Por qué preguntas?.
Sofy: solo curiosidad.
Jhovanna: Antes de morir tenía 27 años.
Cuando escuchó eso Sofy abrió los ojos perpleja, recordó que su amiga había muerto por escuchar rumores de un pozo de los deseos y no pudo comprender, que hacía una mujer de 27 años lanzando monedas a un pozo supuestamente mágico.
Jhovanna: ¿Por qué me miras con esa cara?.
Sofy: Solo estaba pensando en lo infantil que es Lucas.
Jhovanna: ¿¡Verdad!?, Incluso tiene un pijama de Pikachu.
Cuando Jhovanna mencionó el pijama Sofy recordó que ya había visto al joven usándolo, pues aquella vez ella había ido a entregar el dinero de la renta y el abrió la puerta vestido con aquel pijama, Sofy lo miró de arriba abajo y solo pudo decirle.
Sofy: ¿No estás mayor para usar un pijama como ese?, ¿Por qué no maduras?.
A lo que el joven la miró con indiferencia, tomó el dinero de forma brusca y contestó.
Lucas: ¿Acaso me visto cara de fruta?.
Y luego cerró la puerta en el hermoso rostro de Sofy.
Luego de recordar ese día Sofy pensó en hacerle la misma pregunta a su querida amiga.
Sofy: Oye Jhovy, me eh preguntado esto por un tiempo, pero, ¿No tienes más de 500 años?, ¿No creés que es hora de madurar?.
Jhovanna: ¡¡JAMÁS!!, ¡MADURAR ES PARA FRUTAS!!.
La pequeña tenía las manos en su cintura, veía fijamente a su amiga mientras hacia un puchero.
Sofy solo pudo suspirar y negar con la cabeza al verla de esa manera.
Sofy: Me gustaría decir que Lucas te contagió lo idiota, pero ya eras así.
Jhovanna: ¿¡A QUÉ TE REFIERES CON ESO!?.
Sofy: Nada Nada.
Jhovanna iba a seguir replicando pero escuchó el timbre de la puerta, a lo que su amiga sacó su teléfono y vio que tenía un mensaje de la heladera diciendo que su pedido ya estaba en camino.
Sofy: Parece que el helado ya llegó.
Sofy miró a su amiga la cual ya no se encontraba a su lado, si no que había corrido a toda velocidad hacia la puerta y la abrió con entusiasmo, le arrebató el helado de las manos al joven y lo miró extender su mano como si estuviera esperando algo.
Jhovanna: ¡CIERTO!, ¿Cómo se me pudo olvidar?.
El chico de las entregas tenía una gran sonrisa en el rostro, Jhovanna levantó su mano y chocó los 5 con fuerza con aquel joven, luego cerró la puerta con fuerza y corrió hacia el comedor a buscar una cuchara.
Al ver lo que su amiga había hecho, Sofy se levantó del sofá, fue hacia la entrada, abrió la puerta y le dio la propina al joven, el cual agradeció a Sofy y se fue.
Cuando Sofy miró a su amiga, ella ya había comenzado a devorar de una manera frenética el helado.
Sofy se apresuró a tomar una cuchara y empujó a su amiga para aunque sea tener una probada, a pesar de que Jhovanna había gruñido no pudo contra la fuerza de su amiga, y así ambas terminaron juntas el helado mientras veían una película que Sofy había elegido.
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Mi vida con una fantasma
RandomTodo era normal, solo era yo y mis series en mi departamento... No pensé que todo cambiaria aquel día que recibí ese mensaje.