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"Tulipán rojo"

Habían pasado ya algunos días incluso pocas semanas de haber estado saliendo, picnics, cenas, o simplemente llamadas eternas por teléfono, el verano comenzaba a asomarse... Era hermoso y triste a la vez como el tiempo pasaba volando cambiando de estaciones desde aquel soleado día en Febrero cuando Nemuri regresaba del hospital hasta los lluviosos días de Junio y era lindo el saber que ambos a pesar del cambio que había por el paso de los meses ese sentimiento seguía en pie en ambos corazones.

Un Lunes últimos días de clases antes de que las vacaciones comenzaran Shota y sus hijos estaban preparándose para la escuela, a pesar de que la UA ofrecía dormitorios, los fines de semana la mayoría volvía a casa con sus familiares y bueno el caso de Hitoshi y Kiyomi no era una excepción, después de una rápido fin de semana ambos chicos ya estaban en la sala de su casa esperando a su padre el cual arreglaba a Eri.

-¿Tu crees...que llegue a pasar algo muy en serio?- Hitoshi miró a su hermana la cual salió de su celular -Sobre papá y la señorita Yumei- La verdad es que Hitoshi era el más desconfiado en la mayoría de los aspectos en realidad y el que una persona nueva llegara de la nada a su vida era algo nuevo -Bueno...ambos salen demasiado pero a pesar de todo papá no se ah olvidado de nosotros de hecho siempre está pendiente a nuestra opinión sobre su "relación"- Respondió Kiyomi acercándose a su hermano -Pero creo que si necesitas decir algo deberías contárselo a el...estoy segura que sabrá responder- Le dió una sonrisa que inspiraba confianza -Cuando tu le digas a papá sobre tu relación con Todoroki consideraré decirlo- Habló con un tono algo burlón lo cual molestó a su hermana -¡Eso no tiene nada que ver! ¡Por dios Hitoshi por una vez quiero hacer un buen papel de hermana y lo jodes- Habló con un tono fastiada aunque obviamente no estaba molesta realmente -Kiyomi no me gustan esas palabras en la casa y lo sabes- Se quejó su padre bajando por las escaleras con la menor -¡Papá! Lo siento- Habló entre risas avergonzadas, miró a su hermano el cual ni siquiera reaccionó y solo se levantó para ir a el auto.

Después de un largo camino todos llegaron a la UA, los adolescentes se dirigieron a su aula y bueno Shota y Eri fueron a la sala de maestros
-Buenos días- Saludó a sus compañeros de trabajo los cuales respondieron de la misma manera -Shota! Llegaste temprano- Aquel extravagante rubio se acercó con una sonrisa -Hizashi... Si, la verdad es que... dormí bien ayer y bueno hoy desperté con facilidad- Sonrió un poco mirando a el rubio el cual asintió -Entiendo, ¿Cómo está Yumei por cierto? Fuera de lo que paso en la última cena que tuvieron, ya sabes cuando tus hijos llegaron...al fin ese beso- Las mejillas de Shota se pusieron rojas y negó -¿Puedes bajar la voz? No es algo que quiero que todos sepan ¿si?- el de ojos verdes comenzó a reir y asintió -Y bueno sobre Yumei...pues hemos estado hablando, ah estado muy ocupada para salir en citas, pero me contó que pronto estará menos ocupada- Explicó el azabache mirando a su amigo el cual lo escuchaba atentamente, comenzó a caminar hacia la máquina de café siendo seguido por Hizashi -Pero...lo estuve pensando y bueno en estos meses me dí cuenta que me gusta...o algo así- Miró su café, como si estuviera hablando de lo más casual del mundo aunque por dentro parecía que se hiba a morir por todos los sentimientos -Y... decidí que...me quiero confesar- Agregó tomando su café llevando este a sus labios tomando un sorbo de este... Mientras que Yamada estaba bastante sorprendido ante la seguridad de el Azabache, sin duda había cambiado... demasiado, jamás lo había visto tomar una decisión sobre el amor tan bien -Y ¿haz pensado cómo hacerlo?- Trató de responder calmado ya que no quería llamar la atención de todos los maestros para que su amigo no se molestara -Bueno... Supongo que solo lo diré- Eso si no lo hiba a permitir -Shota ¿cómo crees posible eso? Es terrible- Habló molesto lo cual provocó una mueca en el azabache -Ah no puedes simplemente decirlo- Comenzó a tomar un café para el también y luego miró a su otra amiga llegar a la sala, Nemuri -Nemuri! Ven- La de cabellos oscuros se acercó -Uy café mañanero yo también quiero!- Habló la mujer comenzando presionar los botones de la máquina -¿De qué hablan?- Miró a sus dos amigos esperando una respuesta -Shota quiere declarar su amor a Yumei solo diciéndolo- Nemuri hizo una mueca y soltó un suspiro -Se que no eres un experto en el romance pero Shota...creo que todos si queremos que nos declaren su amor nos gustaría, romance o detalles...no puedes simplemente escupirlo- Aizawa estaba confundida pero entendió poco a poco, sabía reconocer que a Yumei le encantaban los detalles, los significados de las flores, su té con bastante azúcar, el empeño que ponía en organizar cada cita, todos eran detalles de Yumei y no hacer un mínimo detalle para declarar su amor, algo importante, sería algo grosero ¿no?
Shota se avergonzó rápidamente al reconocer que era lo que estaba diciendo -¿Recomiendan algo entonces?- Nemuri llevó su dedo a su mentón -Bueno debe ser una cita especial...debes de arriesgarte un poco y así notará las intenciones- Sugirió, algo que molestó ligeramente a Shota, arriesgarse no era lo suyo, prefería por completo irse a la segura...pero así ¿Yumei notaría sus intenciones? Antes de la intervención de sus dos amigos estaba muy seguro de la desición -Lo tengo- El rubio llamó la atención de ambos amigos provocando que la miraran -En el centro de la ciudad habrá un pequeño festival o algo así, habrá lugares dónde la gente pueda bailar- Tan solo escuchó eso Aizawa negó muchas veces -Por su puesto que no- Se interpuso antes de que su amigo terminara -Vamos hermano, Yumei dijo que le encantan esos lugares, por una vez que hagan algo que le guste a ella creo que quedaría muy bien- Shota suspiró fuertemente -¿Cómo sabes eso?- Habló mirándolo -Ah bueno en la fiesta de su hermano menor a la que fuimos, contaban anécdotas y Yumei dijo que desde que era niña le encantaba bailar- Explicó algo confundido ya que su amigo no lo sabía -Creí que lo sabrías- Y si quizá lo sabría pero Shota ese día tenía la cabeza en mil lugares menos en la tierra junto a todos esos extraños sentimientos que aún no podía descifrar -Lo importante es que le gustaría eso seguramente, yo te puedo enseñar a bailar- Habló Nemuri llamando la atención de su amigo el cual se negó molesto -Por su puesto que no...es una tontería- Tomó su café de un trago y tiró el vaso desechable en la basura -Tengo que ir a el aula de la 1-A- Fue una forma de despedirse y sus amigos suspiraron algo cansados de la actitud de Shota pero era claramente obvio que no se darían por vencidos.