Viernes por la mañana
Jimin y Jungkook ya estaban uniformados y sentados en la cocina, donde su madre preparaba el desayuno y su padre ayudaba a picar algunos vegetales y regalar besos rápidos a su esposa, más que nada.
Cuando el desayuno estuvo listo, la familia se sentó en la mesa y comenzaron a desayunar tranquilamente.
— Hijos — habló el señor Jeon — hoy mismo en la tarde sale nuestro vuelo a Seúl, saben que el trabajo es fuerte allá y saben como es esto, cuídense el uno al otro, no peleen mucho, coman bien, cuiden la casa, que al final, es de ustedes prácticamente.
— No se preocupen, vamos a estar bien — Dijo Jungkook tranquilamente mientras Jimin sonreía.
— Si, además, probablemente pronto comenzaremos a trabajar para poder independizarnos. Me gustaría tener mi propia casa. —agregó Jimin
— No no no — negó la madre — Esta casa es totalmente suya, y mientras no tengan una esposa y familia como tal, me gustaría que estén aquí, y se hagan cargo de ella. — Jungkook tragó saliva.
...
Otra vez, iban muy a tiempo a clases, así que optaron por llegar a la preparatoria caminando.
— ¿de verdad quieres vivir solo? — preguntó Jungkook mientras caminaban.
— Quiero ganarme la vida por mi propio esfuerzo, no deseo seguir siendo una molestia para ti — Aclaró y Jungkook se detuvo de la nada.
— Jimin mirame — Jimin lo hizo. — ¿Por qué piensas eso?
— No sé, tu.. me cuidas demaciado y se que es por que mis padres te lo piden, pero quiero demostrar que también puedo cuidarme solo y no tienes que ser mi niñera siempre.
— Eso no es verdad, no soy tu niñera, ni te cuido solo por las órdenes de nuestros padres, sabes lo mucho que he cuidado de ti, desde que somos muy pequeños.
— si pero algo ha cambiado. Has cambiado Jungkook, antes lo hacías con gusto y decias ser mi superhéroe, decias quererme y protegerme para siempre, me ponías apodos cariñosos y me sonreías todos los días ¿donde quedó todo eso? ¿crees que no me doy cuenta? sé que hemos crecido y madurado de alguna forma, pero siento que ahora lo haces más a fuerza que de ganas, incluso te alejas cuando siquiera intento abrazarte.
Jungkook sabía que todo eso era completamente cierto, las cosas habían cambiado mucho entre ellos dos pero nada por culpa de Jimin, fue Jungkook quien se alejó poco a poco del castaño, y no porque haya dejado de quererlo, para nada. Simplemente el cariño que Jungkook le demostraba a Jimin cuando no tenían en claro lo que era el "amor" era muy transparente, era sincero y sin filtros, luego que fue creciendo y entendiendo como funcionaba el afecto que brindamos a otras personas, se dio cuenta que su amor, no era sólo de hermanos o amigos, sino de algo más allá.
—Jimin, es que.. bueno yo..
— no te molestes en dar explicaciones, Jungkook. Digan lo que digan mis padres, pronto conseguiré una casa o departamento y me mudaré para no molestarte más.
— Es que no es así, lo estás mal interpretando todo. — la frustración que sentía Jungkook era incomparable.
— ¿entonces por qué? ¿cual es la razón de nuestro alejamiento?
— Nada Jimin, nada. — siguieron caminando en un ambiente incómodo.
Jungkook no podía darle ninguna pista a Jimin de su pasado, no podía decirle eso así como así, por más difícil que fuera para él, o por más problemas que causara entre ellos, estaba primero la felicidad de Jimin.
Llegaron a clases y el día pasó normal y tranquilo, Jimin y Yoongi estudiaron un poco en el descanso, y Jungkook le llevó la comida a su hermano para que no se pasara sus horas de comida, al igual que supervisaba que no coquetearan de más, eso definitivamente lo ponía de mal genio.
Justo como en el momento que escuchó la charla en la que Jimin le decía a Yoongi de necesitar un tiempo para él, para ver una película romántica y comer muchas frituras, mientras que Yoongi le respondía "podemos hacer planes y la vemos en mi casa", Ja! , claro que Jungkook nunca dejaría a Jimin ir a casa de ese tonto, a menos que él esté presente.
Las clases terminaron, Jimin y Jungkook caminaron hasta llegar a su casa, la cual estaba de nuevo sola, pues sus padres ya habían volado a Seúl.
Se quitaron el uniforme y se encontraron en la sala.
— ¿verás la televisión? — Jimin frunció el ceño, pues Jungkook era más de jugar videojuegos en su habitación.
—Si ¿por que? ¿Querías verla? — se puso cómodo en el sofá
— siempre lo hago ¿y ahora por que no estas en el Play?
— uhm, no sé, de pronto me dieron ganas de ver una película, ¿quieres verla conmigo? — palmeó el sofá y Jimin sé sentó junto a él.
— okey... ¿Cual veremos?
— aún no se, recomiendame una romántica.
— ¿Romántica? — Jimin estaba muy sorprendido.
— si ¿que pasa, prefieres otra?
— no, está bien, pero.. pensé que preferías las de acción.
— pues si, pero hoy no.
— oh..
Después de que Jimin asimilara todo y le recomendara una película, se encargó de buscarla y Jungkook desapareció en la cosina.
— ¡Jungkook! Ya la encontré.
— ¡Voy! — Jungkook apareció con muchas frituras y gomitas en las manos.
— Jungkook..
—¿que pasa? —sonrió
—¿por qué compraste frituras? odias comerlas y más si estás en semanas de entrenamiento intenso.
— Una vez al año, no hace daño ¿no? —Jimin sonrió como un niño pequeño.
Apagaron las luces y se sentaron a comer y mirar la película.
