Lunes por la mañana.
Jimin estaba arreglado, había tomado una ducha anteriormente, dejando su piel reluciente y suave como cada día , su uniforme bien planchado y su cabello relativamente peinado. Hace poco había comprado una nueva loción así que no dudó en usarla.
Preparaba un desayuno con total entusiasmo, las clases no le emocionan mucho pero ¿a quién no le emociona un nuevo año?, además que, las vacaciones fueron muy largas y ya necesitaba volver a ver a Kim Taehyung, su mejor amigo.
Sacó el pan de la tostadora mientras tararea una canción y los puso en ambos platos ya preparados.
—cállate, lastimas mis oídos. —Jungkook apareció en la cocina.
Su cabello seguía desordenado, al igual que su aún puesta pijama.
—¡¿no te has cambiado?! Jungkook es el primer día de clases, llegaremos tarde por tu culpa. —reclamó.
—¿por que te interesa tanto? Es otro día más. —le restó importancia.
— Es un nuevo año. — Jungkook se sentó en la barra con tranquilidad
—¿y qué?, ¿piensas que algo será diferente? Todos los años sacas malas notas, ni siquiera se como has logrado llegar a tercer año, si no fuera por mi, estarías todavía en primero —dijo sin mirarlo.
—yo no he pedido tu ayuda. —lo miró de mala gana, sirvió el café y colocó los platos en la barra.
—si no te ayudo papá y mamá no me lo perdonarán —comenzó a comer.
—me cuesta más aprender. —hizo un puchero
—te distraes muy fácilmente, tal vez deberías dejar de salir tanto con Tae, te llevará por mal camino.
—¿que?, ¿estas loco?, es mi único amigo. Tu también tienes muchos amigos.
—Yo no salgo con ellos, no pierdo mi tiempo, ni tampoco tengo problemas para concentrarme — dijo simple, haciendo a Jimin bufar.
Comenzaron a comer en silencio, Jimin con un puchero en su cara, pues toda emoción de poder ser alguien nuevo en cuestión académica se había esfumado gracias a su hermano.
Una vez que terminaron el desayuno, Jungkook se levantó de la barra y sin decir nada comenzó a caminar fuera de la cocina.
—¡¿ni siquiera vas a lavar tu plato?! —le gritó sin obtener respuesta. —¡Eres un malvado!
Jungkook detuvo su paso en las escaleras y se giró para observar a su hermano desde ahí, con una sonrisa arrogante.
—Es mi trabajo como hermano —y se fué
—maldito —susurró con rabia.
Efectivamente este no sería un nuevo y renovado año.
...
Al llegar a la preparatoria.
Bajaron de la bicicleta de Jungkook y Jimin intentó irse rápidamente hacia su aula pero la mano de su hermano lo detuvo de la mochila.
—No uses perfume, ninguno te queda bien. —murmura Jungkook en el oído de su hermano.
Jimin suspiró pesado y se soltó del agarre para seguir su camino.
Entró a el aula y observó todas las caras, ninguna desconocida, se detuvo en su mejor amigo quien agitaba su mano para llamar la atención del castaño.
Caminó hacia él, y se recibieron con un abrazo y una larga sonrisa.