(PAUSADA)
━ ❝ 𝙸 𝚆𝙰𝚂 𝐄𝐍𝐂𝐇𝐀𝐍𝐓𝐄𝐃
𝚃𝙾 𝙼𝙴𝙴𝚃 𝚈𝙾𝚄 ❞
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Luan pasaba todo su tiempo
metida en libros, sin prestar
mucha atención a quienes
la rodeaban.
...
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MARY Y MARLENE caminaban eufóricamente de un lado a otro por toda la habitación de la Gryffindor mientras Dorcas las miraba con burla.
Habían vuelto a Hogwarts para pasar año nuevo todas juntas. Luan y Lily tuvieron que rogar a sus padres por el permiso para volver, pero en vista de lo peligroso que se estaba volviendo el exterior, lo más sensato era que estuvieran en Hogwarts todo el tiempo que pudiesen. Hogwarts era el lugar más seguro del mundo mágico.
—Listo, ya llegué. Estoy aquí —Beverly se abrió paso por la habitación, llevaba una enorme mochila en su espalda y otras dos bolsas llenas en sus brazos—. Un poco de ayuda no estaría mal.
Las tres se acercaron para quitarle el peso de encima.
—¿Por qué tardaste tanto? —Dorcas cuestionó.
—Bueno, nadie me dijo qué tan malditamente difícil es entrar a la maldita sala común de Gryffindor siendo una Slytherin.
—Sólo tenías que decir la contraseña —Mary le recordó.
—¡Ese maldito retrato! —la pelirroja exclamó mientras se tiraba en una de las camas—. ¡Dijo que no soy una verdadera estudiante de Gryffindor y luego me obligó a escuchar sus horribles cantos por veinte malditos minutos! ¿Saben la tortura que pasé?
Marlene carcajeó. —¿Y cómo lograste entrar?
—Una linda pelirroja se apiadó de mí y obligó al retrato a abrirse. Era muy amable en serio.
—¿Hablas de Lily?
—Ella es la prefecta, ¿verdad? —Marlene asintió—. Entonces sí, ella. La linda.
—La conociste cuando fuimos a casa de Pandora, ¡y un montón de veces antes!
Beverly hizo una mueca. —No soy buena recordando.
—En fin, ¿ahora qué? —Dorcas preguntó.
—No lo sé, ahora debemos ayudar a arreglar el asunto de Luan y Remus, ya saben —Marlene dijo.
—¿Por qué Lily no está aquí? —Beverly preguntó.
—Tiene que patrullar.
—Oh, es verdad. Yo también debería estar haciendo eso.
—¿Y qué haces aquí? —Dorcas preguntó.
Beverly se encogió de hombros. —Me gusta estar con ustedes. Son muy divertidas. La única amiga que tengo siempre está con su estúpido novio, lo detesto.
Dorcas y Marlene compartieron una mirada con una sonrisa que pasó desapercibida por todas las demás.