●~Caught Up~● ○△☆☂

Capítulo 41 "De vuelta al inicio"

Narra Myeong:

No pude saber de nadie en cuanto me ingresaron a la sala de emergencias. Seguía aturdida por lo sucedido. Algunos doctores intentaban hacerme responder unas cuantas preguntas de chequeo, pero no podía formular las oraciones correctas dentro de mi cabeza. Era como si todo estuviese sucediendo en cámara lenta.

—Ya perdió mucha sangre —habló una de las enfermeras.

El eco de su voz parecía provenir desde un túnel lejano. Comencé a sentirme cada vez más mareada, la herida en mi cabeza seguía punzando. Tal vez tenían razón y acababa de perder bastante sangre. Ahora podía comprender porqué mi cuerpo se sentía tan pesado.

—Va a desmayarse —comentó el doctor.

En cuanto terminé de escucharlos, sentí mi cabeza chocar contra el respaldo del colchón. Las luces del techo me cegaron unos instantes, de nuevo todo se volvió oscuridad. Ya comenzaba a hartarme de quedar inconsciente cada cierto tiempo.

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Una vez más me hallaba dentro de estas cuatro paredes. Cuando mis ojos enfocaron el primer objeto de la habitación, pude percatarme del suero que estaba conectado a mi brazo. Tenía tanta sed que podría beber lo que fuera. Giré mi cabeza sobre la almohada cuando sentí la presencia de otra persona.

—Myeong —me llamó con alivio—. No podía dejarte sola, me alegro de que despertaras.

Hana dio unos cuantos pasos hacia el frente. Quería asegurarse de que todo estuviera en orden.

—¿Dónde está Jung? —intenté sentarme sobre mi lugar.

—No hagas mucho esfuerzo, te golpeaste en la cabeza bastante fuerte —explicó—. Jung está a salvo, los médicos curaron sus golpes, se encuentra en mejores condiciones que tú.

—¿Qué pasó con Hyeon? —fruncí el ceño.

—Murió —soltó como si nada.

—¿Qué? —elevé mi tono de voz bastante sorprendida. No podía creer lo que acababa de escuchar.

—Todo pasó muy rápido... Después de que Ryu los rescatara, un par de hombres llegaron a la escena. Estamos seguros de que Kim los envió. Cuando se percataron de que teníamos capturado a Hyeon y que tú habías logrado escapar de sus manos otra vez, le dispararon justo en el pecho mientras huían en una camioneta negra.

Tuve que detenerme un par de segundos para analizar la información. Es cierto que Hyeon era un completo idiota, pero no merecía terminar de esa manera. Al menos habría pasado el resto de sus días en prisión.

—Eso no es todo, te tengo buenas noticias —sonrió levemente.

Llegué a asustarme un poco, algo grande debía haber sucedido como para provocar esa reacción en ella.

—¿Qué pasa? —la miré a los ojos.

—Encontramos a los culpables del ataque terrorista.

Sentí que el corazón se me detuvo un instante. Tensé todos mis músculos, deseaba salir corriendo del hospital y comprobarlo por mi propia cuenta.