➳ Trece

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Lo primero que pensó Taehyung al subir a un avión era que se iba a caer y su corta y joven vida terminaría ahí. La segunda vez, que subió a un avión era que posiblemente pasara como en los juegos que algunos chicos jugaban, caían en una isla solitaria y abandonada con canibales que seguramente buscaban comida.

La tercera vez, el miedo volvió a inundar su sistema nervioso, mientras que el rizado solo lo observaba con una pequeña curva en sus labios que se podía decir que era semejante a una pequeña sonrisa. Para la mayoría le era inevitable pensar que, el gran CEO Jeon jungkook, sonriera a causa de los miedos de un omega y no en el sentido de burla, sino, en el sentido de un sentimiento semejante al de ternura.

Taehyung lanzaba preguntas por doquier mientras observaba el camino hacia el aeropuerto, tanto como pequeñas historias que contaba. Jungkook solo atinaba a asentir, sin decir nada, porque nunca había tenido ese tipo de conversaciones con sus empleados, aunque su cabeza se lo decía, algo en él quería negarlo, y era que Taehyung solo es un simple empleado y el culo que folla.

Cuando llegaron al aeropuerto, el pequeño omega parlanchín se había quedado callado y solo hacía su chequeo. Subieron con normalidad al avión de la empresa y hicieron todo con normalidad, sería un viaje largo, y Taehyung estaba cansado, después de lo sucedido con su jefe en su casa, solo le había quedado tiempo para cambiarse de ropa y guardar la que necesitaría.

-Señor -murmuró con timidez captando la atención de su jefe quien leía lo que sea que tenía en sus manos -. ¿Por qué voy yo a este viaje? Quiero decir, la mayoría de veces lleva a jimin. Tengo entendido, porque él es muy bueno.

Jungkook lo miro por unos segundos y desvió la mirada recordando a jimin, aún sentía la rabia recorrer su sangre por lo que se había atrevido a decirle, pero trataba de olvidar ese pequeño inconveniente en su oficina. Iría a un viaje de negocios y regresaría como si nada. Su relación con jimin dejó de funcionar cuando el amor se convirtió en ambición.

-Realmente -murmuró y miró directo a los ojos a Taehyung-. No lo llevo solo por eso. Siempre es bueno tener una compañía.

Taehyung asintió, sintiendo como algo en su pecho se removía y su omega parecía contento, sonrió un poco antes de volver a concentrarse en la ventana del avión y observar las espesas nubes que estaban en el cielo, coloreadas de unos tonos rosados y anaranjados. Todo era lindo pero el sentimiento que acaba de sentir, era otra cosa.

Frunció un poco sus labios al pensar en la respuesta que jungkook le había dado, ¿cómo se supone que debe tomarlo?. De alguna forma, su omega no le parecía la respuesta, y se regocijó en su interior tratando de tomar la respuesta como algo positivo. Tamborileo sus dedos contra el mango del asiento y resoplo.

-Entonces, ¿yo que soy? - se atrevió a preguntar, algo en su interior le pedía hacerlo y tomando desprevenido a su jefe quien lo miró sorprendido, desvió la mirada al sentirse expuesto.

-Una compañía -murmuró Jungkook mirándolo -. Tu presencia siempre me hace compañía -le dijo, Taehyung lo miro por escasos segundos sintiendo su omega regocijar de alegría -. Eres un chico muy inteligente, Taehyung, tan astuto que sin ti, quizá todo se fuera por la borda.

-¿Eso quiere decir?... -preguntó mordiendo su labio, algo en él tenía una cierta esperanza en que su jefe le dijera algo lindo.

- No lo sé -le sonrió, Taehyung asintió sintiéndose un tanto decepcionado y quejándose por ello, porque ellos no eran nada.

Jungkook suspiró y desvió la mirada, su alfa se sentía extraño. No se sentía así, ni con jimin que en alguna vez juro amar de por vida, cuando eran jóvenes y no sabían nada de lo que estaba por venir. Taehyung era diferente y podía demostrarlo sin pruebas, se había cogido a tantos de los asistentes cuando jimin dejó de satisfacerlo, tratando de encontrar en ellos lo que había perdido. Con Taehyung, lo volvió a encontrar, pero encontró algo mucho más fuerte.

-¿Siempre llevas ese amuleto tan peculiar? -preguntó cuando observó como el más joven jugaba con ese collar en sus manos. Taehyung lo miro.

-Sí, mi abuela me lo dio -murmuró y resopló, Jungkook asintió mirándolo confuso -. Según ella es para otra cosa, pero yo creo que es para la buena suerte. Ella cree en muchas cosas.

-Ya veo -le sonrió -. Es igual de encantadora que tú.

Taehyung le sonrió una vez más, los minutos pasaron y el vuelo aún seguía. Era la primera vez para jungkook sentirse tan cómodo con alguien en el mismo avión, cuando llevaba a jimin, el ambiente era tenso, y aveces se ponía hablar de temas que para él eran muy delicados y no le gustaba hablar, tal era el caso de sus hermanos y su sobrina, nunca le gusta tocar esos temas, estaba casi seguro que Taehyung sabía la existencia de esos temas, todos en la oficina lo sabían, conocían la historia de los Jeon, pero era el primero que no se atrevía a preguntar sobre eso. Y eso le encantaba, era otra prueba de que Taehyung no era como los demás.

o-o-o-o

Taehyung sujeto con fuerza el barandal de las gradas del avión observando dos camionetas Mercedes esperando por ellos, había hombres esperándolo, uno más alto que los demás y era el único que vestía un impecable traje gris sin corbata y lucia como alguien muy importante y quien le sonrió a su jefe cuando lo vio bajar.

Lo más sorprendente fue cuando jungkook se detuvo a los pies de la escalera, esperando por él y le tendió la mano para ayudarlo a terminar de bajar la cual no dudó en aceptar. Su mirada se posó en los ojos claros del otro hombre y por su olor, podía deducir fácilmente que frente a él tenía a otro imponente alfa.

- ¡jungkook, hermano gusto verte y bienvenido a Londres! -le sonrió el hombre y abrazo golpeando la espalda de su jefe y después la mirada clara del alfa se posó en él -. Vaya, no sabía que traerías a un acompañante muy lindo.

Jungkook frunció los labios asintiendo y pasándole unos guantes a Joaquín por la ventisca helada que traía consigo Londres. Jackson, ah su buen amigo Jackson, aficionado por la ropa Gucci y su buen estilo de vestir, podría conquistar a cualquier omega con solo una de sus miradas seductoras, su alfa esperaba que eso no pasara con Taehyung.

- ¿Me lo presentaras?.

- No - musitó cortante, Jackson frunció el entre cejo mirando a su amigo confundido y jungkook no expresó nada con sus gestos -. Estaré unos días por acá.

- Claro - le sonrió y su mirada se posó sobre el pequeño chico que su amigo traía consigo. Esquivo olímpicamente a su amigo posándose frente al omega -. Un gusto cariño, soy Jackson wang.

- Es hora de irnos - musitó jungkook tomando de la mano de su asistente y tiro de él con cuidado para conducirlo al Mercedes que lo esperaba.

Jackson sonrió ladino mirando como su amigo subía con ese apuesto omega de mejillas rojas, suspiró mirando como la Mercedes arrancaba directo a la autopista, Jackson tenía por seguro que ese omega no se iba de Londres no sin antes probar un poco de su persona.



Celos de tus ojos cuando miras a otro chico tengo celos..... CELOS

Ups, perdón se me vino a la mente esa canción en la última escena de jk con Jackson

Poco jodido [Kookv]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora