"Almas gemelas" por Iida Tenya {TodoIzu}

6. Luchan por la relación

—¡Shotoooooo! ¡Deja de ignorarme!— Un nuevo día, una nueva reunión de padres, un nuevo drama por parte del héroe No. 1 (antes mejor conocido como el No. 2).

Iida veía todo desde el pasillo mientras su amigo tomaba sus cosas y pasaba a un lado de su padre como si no estuviera ahí.

El héroe de las llamas, Endeavor, no se rindió ante el nulo interés de su hijo menor, y heredero de su legado. Continuó caminando detrás de él, tratando de llamar su atención de cualquier manera.

El menor de los Todoroki paró sus pasos y volteó a ver a su progenitor, y cuando el pro-héroe pensó que había ganado, su hijo le recordó que tenía muchas cosas por las cuales pagar.

—Guarda silencio anciano. Interrumpes las clases de los otros años— y continuó su camino hacia el gimnasio.

Iida quedó satisfecho, pues el mismo estaba a punto de pedirle al héroe, con todo el debido respeto, que dejara de poner en mal su nombre interrumpiendo al resto de alumnos. Porque, aunque Iida no lo admitiera, había algo en Endeavor que realmente no le agradaba, seguramente por las pocas frases que Todoroki solía soltar de él, y que solo dejaban de entrevisto que no era un buen padre.

El motivo de la reunión de padres era para un "reporte de avances", de especial importancia para los alumnos que tenían familiares en el mundo heroíco. El auge de la presentación, era un entrenamiento de demostración. Jirou, Yaoyorozu, Midoriya, Todoroki y él habían sido seleccionados como equipo. Esta vez, seguramente con el objetivo de que todos pudieran tener su momento bajo el reflector, los contrincantes eran robots mejorados por parte del departamento de apoyo.

Sin embargo, la misión no era tan fácil. El objetivo era rescatar a los rehenes sin que los villanos -robots- se percataran, pues poseían un mecanismo de alerta, y cuando uno viera a los héroes, alertaría inmediatamente a los demás y los rehenes -maniquíes- morirían. La ubicación del rescate era una zona al azar, y su equipo tuvo la suerte de trabajar en una montaña nevada. El plan más lógico era atacar al mismo tiempo e impedir que el robot más cercano a los rehenes pudiera ejecutar la acción de 'acabar' con ellos. Sin embargo, un rápido análisis de Midoriya y Yaoyorozu los hizo razonar que seguramente, los circuitos de los robots serían a prueba de frío.

—Están demasiado separados como para poder atacarlos en un mismo lugar— mencionó Jirou en un susurro, protegiéndose del frío bajo la capa térmica de Momo.

—Supongo que llamar su atención no es una opción, puede que se active el mecanismo y perdamos a los rehenes— concluyó Iida.

—Si suponemos que nuestra sospecha es correcta, no creo que el hielo de Todoroki-kun pueda servirnos por ahora... pero, quizá su resistencia al frío los haga más vulnerables al calor— dijo Izuku volteando a ver a Shoto. —¡Creo que tengo un plan!

Midoriya explicó rápidamente la idea y todos estuvieron de acuerdo con que era la mejor salida. Sin embargo, Todoroki no parecía muy concentrado.

Iida sabía que su amigo tenía una razón muy importante por la cual no había usado su fuego hasta su primera batalla contra Izuku, y aunque no sabía cuál era, suponía que tenía que ver con su padre. Seguramente, saber que Endeavor lo observaba no era algo muy grato para él. Pero antes de que Iida pudiera objetar contra el plan y proponer otra manera para no obligar a Todoroki a usar su fuego, Midoriya volteó a verlo y le sonrió.