Little Bunny~ SaNayeon

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-Buena soda rico día.-Su mano tembló mientras sostenía el vaso, y sólo una rió, acariciando su hombro, tratando de calmarla.

-¿Cómo les fue?

-Bien, sólo... nos arreglamos.-Un beso en sus labios, haciendo sonreír inmediatamente a Nayeon.- Nayeon se volvió a inscribir a una academia de baile, denunció a su padre y, creo que hizo algo más que no recuerdo.

-Lo del departamento, bebé.

-¿Y qué opinas de que mi prometida y yo estamos juntas en esta comida?-Sólo la castaña entrecerró los ojos, tratando de recordar.-¿Applebee's?-Negó. Abultó sus labios, achicó su ojo, y volvió a negar. No recordaba nada más.-Dios, tú lo dijiste, que somos tal para cual porque te caemos mal.

-No dije eso, dije que eran tal para cual porque hacen todo más incómodo, estaba tensa, ¿Qué harías tú si te enteras que tu padre fingió su muerte, no te vio desde los 18, te dijo que necesitaba un lugar para dormir?

-¿Y por qué aceptaste la comida?

-Porque quería ver a mi Sha, no sabía qué más hacer, Mina y Jeongyeon están descansando en su departamento, mi amiga estaba trabajando, y yo...-Entrelazó su mano con la de la mayor, suspiró, y las vio.— Ultimamente estoy muy tensa.

-¿No quieres hablar?-Como si la capa grosera y a la defensiva de la pelinegra más alta hubiera caído, su voz sonó tranquila, mientras intentaban ignorar a Tzuyu, que se estaba comiendo un buen plato bien servido.

-Son muchas cosas que aún no he asimilado, tuvo la valentía para... para venir, decirme que necesitaba un hogar y, que lamenta la muerte de Jessica

-¡¿Qué?! Joder, Nayeon, todo lo malo de la vida te pasa a ti. -Y se ganó una mala mirada de la omega-. Perdón... Pero realmente todo lo malo de la vida te pasa a ti, sólo falta que un camión aplaste a Sana antes de tener a tu bebé, siempre pasa así en los libros.

-Si pasa, pero sólo a la gente que le ha ido bien, por suerte a Nayeon nada le sale bien. -Cerró la rubia, riendo, abultando más sus mejillas llenas de comida. Sana sólo las miró mal.

-No me gusta que hablen así de-

-Tienen razón, me pasa todo lo malo del mundo.- Otro puchero, y antes de que pudiera decir otra palabra, tomó su rostro, la besó, y luego besó su nariz, sorprendiéndola. -Por eso siempre digo que tú eres lo único bueno que tengo en la vida y que gracias a ti todo mejoró.

-¿Siempre que tienes la oportunidad de hacer algo romántico lo haces? Si hubiera música romántica sonando, se hubiera cortado dramáticamente porque- habló la más alta de todas, y Nayeon suspiró.- Deberían irse de ahí, así que miró a su novia, que ya la estaba viendo.

Sólo se sonrieron, entrelazaron sus manos, y la menor habló.

-Yo no tengo hambre, Sha, ¿Tienes hambre?

-No tengo hambre, oh Dios, no tenemos hambre, supongo que nos iremos porque no tenemos hambre, lo que hace el hambre.- Muecas falsas, rostros apenados, y Momo sólo rió, viendo el anillo de Sana.

—¿Hace cuánto tienes el anillo? Jamás te lo había visto.

-Desde... Enero, febrero...- Comenzó a dar cuenta con sus propios dedos, viendo confundida a Nayeon.-¿Cuándo es nuestro aniversario?

-Ehm...

—¿No saben cuánto llevan juntas?—La rubia rió de nuevo, viéndolas divertida.—Si el bebé ya tiene tres meses, ustedes están muy apuradas en su relación si acaba de iniciar.

-Nos gustamos desde marzo.- Ambas asintieron. -Sólo que nos dimos cuenta por abril y lo hicimos oficial en Julio.

-Lindo anillo, ¿Y el de Nayeon?