Diet Mountain dew. [Batman AU/ Batjokes.]

°Capítulo 6

Se escucharon golpes fuertes al piso con las chanclas, pequeños gritos de júbilo y carcajadas sonoras.

Era obviamente el peliverde, el cual hacía un escándalo de emoción por todo el almacén. La rubia, al contrario, se encontraba tranquila tomando un buen Capuccino sentada en el sofá de la sala de estar dentro de ese viejo almacén y leía un libro de psicología; sin embargo, fue interrumpida por la entrada del más alto otra vez, que daba saltos y se tiró chillando al otro sofá.

Harley lo miró con ternura y el payaso la miro expectante a una pregunta.

—¿Qué te dijo Es que tan feliz te puso? —alzó una ceja sabiendo que eso quería que le preguntara.

—¡Que bueno que preguntes! Pues... A ver, ya sabes que no soy mucho de hacer equipo, más porque quiero la atención de mi Batsy solo para mí... ¡Pero, pero!

—¿Pero...?

—Pero Ed me dijo que necesitaba mi ayuda para molestar al millonario ojiazul un ratito, quiere robar una máquina de plasma y, bueno, yo mantendré ocupado a mi rey —movió sus piernas alegremente mientras miraba al techo soñador.

—¡Oh! Eso es genial Pudding —sonrió al verlo tan alegre —Mmh, pero Mistah J, yo creo que debería tener un poco de cuidado... No cuestiono mucho a Ed y Pengu, pero ya sabes cómo son... Y quizás te devuelvan lo de la última vez.

—Nah, eso está en el pasado Harls, no creo que vaya a pasar nada más, solo debo distraer a Bats y ya... Aunque ahora que lo piensas... —se quedó en silencio por un momento, pensativo... ¿Y sí Harley tiene razón? ¿Y si de la nada se le ocurre a Riddler y al Pingüino hacer algo contra él? ¿Debería confiar? A ver, él ya hizo las pases con Edward... ¿Pero con Oswald? El Pingüino seguro lo mirará mal a la primera que lo vea luego de todo, solo espera que el castaño adicto a los puzzles lo defienda un poco del mafioso y que no acabe todo con él mismo colgado del edificio más alto de Gotham.

Tragó saliva pero sacudió sus verdes cabellos, no tenía miedo, solo eran... Suposiciones, ¡El Príncipe Payaso del Crimen era más fuerte! ¿No?... ¿No?

***

Una hora antes de reunirse.

El Joker se alistaba emocionado, con una gran de y mítica sonrisa en su rostro. Se miraba al espejo mientras se aplicaba su pintalabios rojo carmesí intenso, luego terminó con un pequeño colorete y se todo la mejilla. Quedó en silencio por un minuto y parecía como si algo pasara por su cabeza ¿No era nada? No lo sabe, está loco de todas maneras ¿Qué podría...?

Su sonrisa desapareció al ver a un hombre de igual figura, pero este tenía el cabello castaño y la piel de un tono normal y no pálido. Sus ojos verdes tóxico eran profundos y mostraba melancolía con nostalgia... El hombre reflejado tenía unas ojeras no tan notables; tenía un traje negro y blanco con una pajarita, en sus manos una capucha roja...

—No, no, no y no. Ese recuerdo no, no otra vez —se alejó del espejo, pero veía con más intensidad el triste rostro del hombre delgado —Otra vez mi maldita cabeza con lo de siempre, oh vamos, me estaba arreglando, deja de mirarme así... Eres patético —se tocó la cara y el castaño hizo lo mismo a la vez —Basta... —entonces tapó el espejo y fue a ponerse lo último que le quedaba en su vestimenta: La chaqueta y la corbata de lunares. Llevaba ropa nueva, quería estrenar algo nuevo para este enfrentamiento con su Batsy (...).

Al terminar de vestirse no se miró ni al espejo, no quería verlo otra vez, a ese hombre no.

Bajó por las escaleras con ánimos y seguridad, aunque algo angustiado por lo antes sucedido. Fue a un mini armario y se colocó una flor de broma en el bolsillo de la chaqueta, para después colocarse una navaja en el bolsillo y otra escondida en el calzado. Agarró unas bombas de gas de la risa y las guardó al lado de las de humo, para terminar agarrando de última una pistola normal y corriente (o eso dice).

Dio pequeños saltitos dirigidos a la puerta para después abrirla con libertad, miró atrás y se despidió de su compañera con la mano, esta se lo devolvió para después seguir hablando con alguien por teléfono.

***

Mientras, en el edificio de Wayne Enterprise.

Riddler se encontraba en el edificio de en frente con el Pingüino, en el tejado. Los dos esperaban al payaso con ansias, no llegaba tarde pero querían que llegara lo más rápido posible.

—¿Tu crees que llegue tarde? —preguntó Oswald luego de dejar un rastro de humo de cigarro salido de su boca.

—Nah, no creo Ozzie, ya sabes que es bastante puntual. Estará arreglándose o algo —se puso las manos a la cintura y con una sonrisa ladeada miró la entrada de la empresa con las gafas adaptables que tenía normalmente arriba de su sombrero, esas gafas raras que parecían de inventor.

—Mmm, sí. Esto, Eddie, te olvidaste limpiarte la mejilla, tienes grasa negra —se señaló lo mejilla para que viera en qué parte se encontraba la mancha pequeña.

—Oh, perdón, estuve tan ocupado organizando todo el plan y creando esta cosa —mostró una pequeña máquina con patas metálicas y un signo de interrogación, luego se intentó limpiar la mejilla pero lo único que consiguió fue extenderla más.

Oswald intentaba no reír al ver cómo la mancha se esparcía más —Mejor deja la mancha, la estás extendiendo, no la limpies con tu mano... ¿Qué es esa máquina? Parece una araña.

—Es un mini robot, tiene una cámara y se mueve con voz — tocó la esfera que había al final de su bastón —Irá a ciertas coordenadas y colocará una pequeña bomba, cuando agarremos lo que queremos esta explotará en la planta de arriba donde Joker guiará en distracción a la rata con alas y... ¡Kaboom!

—Buena pequeña venganza por lo de la última vez —apagó el cigarro y miró a la máquina.

—Lo sé, es brillante —sonrió —Mientras viene ese payaso está pequeña irá a adentrarse al edificio discretamente —colocó la máquina en el bordillo —Go.

Entonces el pequeño robot bajó del edificio y corrió con sus patitas de metal dentro de la empresa de Bruce (...).

Se escucharon pasos detrás de los dos villanos, los cuales voltearon y encontraron al que tanto esperaban. El cual saludaba con una gran sonrisa maliciosa y un gran carisma...