1

2.7K 121 37
                                    

¿Cuando empezaron a cambiar las cosas? ¿Que fue lo que se acabo en su matrimonio? ¿Que era lo que estaba mal? Esas eran algunas de las preguntas que Mikasa se hacía a diario. Eren se levantaba todos los días con una actitud fría y muy esquivo con su propia esposa, ni siquiera llegaba a dormir algunas veces, o siempre llegaba en la madrugada. La excusa diaria de el era su trabajo el trabajo en sus empresas lo tenía tan ocupado para descuidar durante meses a su esposa. Si eso era. Mikasa nunca lo cuestionó por que confiaba en el, en algún momento pensó que Eren tendria una amante pero, eso no podía ser, el la amaba ¿no es así? Jamás le sería infiel. Pero muy en el fondo ella sabía que era una gran posibilidad. En muchas ocasiones se canso de esperarlo despierta, y con lágrimas en sus ojos lograba consiliar el sueño. Intentaba seducirlo pero no lo lograba. Eran raras ocasiones en las que el le hacía el amor, o bueno ella ya no lo llamaba de esa manera, ya que ella ahora lo sentía como simple sexo. El Eren que le susurraba palabras hermosas mientras le hacía el amor de una manera dulce y cariñosa ya no estaba. En algunos de sus encuentros el era brusco con ella, a pesar que ella le repetía muchas veces que lo amaba el ya no era el mismo.

Muchas veces después de sexo siempre le decía que ella lo aburría y que si la tocaba era porque ese era su deber como su esposo. Esas palabras empezaban a herir el corazón de Mikasa, pero aun así ella intentaba hacer que las cosas fueran como antes, e incluso el día de su aniversario de bodas siempre hacía algo especial para ambos, solo que esta vez Eren nunca llegó a casa, eso hizo que la punzada que atravesaba su corazón fuera más grande. Apago las velas de la hermosa cena que había preparado para el, y se fue a dormir. Ni siquiera había recordado que era la fecha de su aniversario. Al pasar los días decidió enfocarse en su carrera como modelo en un cien por ciento. Era una mujer muy hermosa, para la vista de cualquiera. Una de las modelos más cotizadas en la industria del modelaje. Pero al casarse con Eren decidió que su matrimonio estaba primero y descuido su carrera como modelo. Ella tenia planes, ella quería formar una familia con el pero ahora, ella dudaba mucho de eso.

Mikasa dejó de insistir en acercarse a él, empezó a enfocarse en su carrera nuevamente, y por lo visto a Eren no le afecto en lo más mínimo.
.
.
.
.
.
.

-Eres un cobarde Eren - repetía varias veces un rubio con ojos azules - si Mikasa se llaga enterar la perderás para siempre

-Pero ella no se enterara - habló el castaño con prepotencia - o dime ¿tu se lo dirás? - dijo amenazante a su amigo de la infancia

-Eren te estás acostumbrando a una doble vida en la cual tu te llegaras a quedar sin nada - ahora Armin estaba furioso con su amigo - solo espero que no te des cuenta cuando sea demasiado tarde - camino hacia la puerta de la oficina del castaño - y también espero que Mikasa te perdone Eren - abrio la puerta para salir de la oficina del castaño

Eren no dijo nada, de hecho no le importaba, estaba disfrutando mucho su nueva vida, su nueva experiencia teniendo una amante, era algo nuevo. Ni siquiera había un poco de remordimiento en su conciencia. Tomó su teléfono y marcó a la mujer con la cual había estado pasando cada noche desde hace 8 meses.

.
.
.
.
.
.
Mikasa había tenido una sesión muy agotadora durante todo el día, ahora que ella había regresado al modelaje muchas empresas la querían como portada de sus revistas ya que la belleza de Mikasa no tenía comparación. Llegó completamente exhausta, eran casi las 2 de la madrugada pero de cierta forma ella se distraía de su caótico y desgastado matrimonio. Llegó subió hasta la habitación que compartía con Eren y como era de esperarse el no estaba. La tristeza la invadió por un momento, se dirigió hacia el baño, se puso un hermoso camisón rosa que resaltaba a la perfección su cuerpo, decidió dormir ya que para ella ya era una costumbre que Eren llegara tarde o que en algunas ocasiones no llegara. Con un dolor enorme en su pecho se durmió, pero minutos después la despertó un sonido proviniente de la cocina.

Una segunda oportunidad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora