Una segunda oportunidad

Epílogo

-Hola mamá ya llegue - saludo Patrick de 25 años entrando a casa de sus padres

-Hola cariño - saludo su progenitora desde la cocina

Mikasa seguía con su carrera como modelo, a pesar de tener 47 años seguía siendo una mujer hermosa, sin excepción en algunas arrugas en su rostro que le daban un aspecto más digno, además tanto ella como Eren aún estaban en buena condición física, el yoga y el gimnasio eran actividades constantes en sus vidas, y al igual que ella, Eren ya tenía 47 años.

-Algo huele delicioso mamá - Patrick se acerco para abrazar a su madre

-Son galletas de chocolate, tus favoritas - dijo la azabache acariciando el rostro de su hijo

-¿Y papá? - pregunto Patrick qué por cierto ya era igual de alto que Eren

-Esta arriba, en la terraza - menciono la azabache metiendo las galletas al horno

-¿Y mis hermanas? - preguntó de nuevo

-Tus hermanas salieron - dijo Mikasa midiendo la temperatura del horno

-Ya veo, quería saludarlas - dijo Patrick con un suspiro de desánimo

-¿Por qué no las esperas y te quedas a cenar? - pregunto su madre con ternura

-Me encantaría mamá, además Adele llegara hasta mañana - mencionó Patrick

-¿Ya está todo listo para la boda? - pregunto Mikasa entusiasmada por su hijo quien se casaría en un par de semanas

Patrick había sido todo un prodigio, y a tan solo 14 años entró a la universidad, además de ser el vicepresidente de la cadenas de empresas de su padre ahora a sus 25 años.

-Si, sólo faltan algunas cosas pequeñas como el florista quien quedó de vernos la próxima semana

-Awww, mi bebé está a punto de casarse - los ojos de Mikasa se cristalizaron colocando ambas manos en las mejillas de su hijo - parece que fue ayer cuando te sostuve por primera vez en mis brazos

-Mamá, no llores si - Patrick beso la frente de su madre dedicándole una sonrisa - sabes que igual estaré cerca de ti, eres mi mamá lo más valioso y maravilloso que tengo en la vida

-Estoy orgullosa de ti cariño - Ella lo miro con nostalgia ya que desde hace mucho tiempo había dejado de ser un niño al cual ella arrullaba en sus brazos todas las noches antes de dormir

-Iré a saludar a papá - dijo Patrick dedicándole una última sonrisa a su madre mientras ella a sentía y él se dirigía hacia las escaleras

Subió al segundo piso, de la enorme residencia de los Jeager - Ackerman, hasta llegar a la terraza.

-Hola papá - saludo encontrando a Eren de espaldas viendo un reloj en la pared

-Hola hijo - respondió Eren acercándose para abrazar a su primogénito

-¿Como estas papá? - pregunto su hijo mientras ambos se sentaban en el enorme sofá de la terraza

-Bien hijo - dijo aún mirando el reloj en la pared, Patrick lo miro de una manera extraña al notar el interés en ese reloj - ¿Y tu como estas? ¿Como van los preparativos de la boda?

-Creo que hasta el momento, muy bien, solo faltan algunas cosas pero es algo que se resuelve en pocos días - Patrick noto que la mirada de Eren seguía puesta en ese reloj

-Sabes, siento como si hubiera sido ayer cuando te sostuve por primera vez entre mis brazos - Eren lo miro con nostalgia poniendo una de sus manos en el hombro de su hijo - y ahora mirate, ya eres todo un hombre y estas a punto de casarse - Patrick le sonrió mientras sus ojos Esmeralda miraban a su padre