݁ me or the ps5 𝄒 ⠀jeongsung

⋆ 𝗙𝗢𝖴𝖱 ᵎᵎ

Esa tarde, el gran J.One estaba en un dilema, la cuestión era si editar aquella parte donde había estornudado por qué era muy visible un moco o si editar primero la miniatura del vídeo, con un tipo de letra que había conseguido y le gustaba bastante aunque la verdad es, no tenía idea por dónde comenzar, allí es cuando Jeongin aparece por la puerta con cara de pocos amigos, cosa que a él le había sentado mal por que...

Más temprano le canceló su ida esa noche al cine, por estar editando un vídeo que debía subir hace días. Y por pura casualidad tomó ese día para editarlo.

Apenas.

— Amor, estas-

— Jisung, dime para qué me llamaste. En serio no estoy de humor.

Sí, el seguía enojado.

— Bueno... Te traje esto. —dice el youtuber, pasándole una bolsa de dulces, que sabía le gustarían.

El menor tenía una cara no de disgusto, pero era confusa, tenía mucho, muchísimo rato que Jisung no le daba algo como eso, de vez en cuando un dulce. Pero una bolsa... Era raro.

Muy raro.

— ¿Esto es para mí? —pregunta Jeong, y Sung asiente— Yo...

— Escucha, sé que he hecho las cosas mal... Todo este tiempo, y en verdad lo siento.

Jisung podía tener muchos seguidores en ese momento, cosas que hacer, e incluso eventos o demás, pero al final del día tenía que encontrarse con que Jeongin a veces no respondía sus mensajes para saber cómo estaba, o contándole que había llegado bien ya sea para algún lado o simplemente había llegado a casa después de un día ajetreado, y en cierta manera era irónico pues, él no tenía tiempo para su novio pero se sentía mal por qué éste no le respondiera los mensajes.

— Yo, uhm...

— No tienes que decir nada. ¿Sí? Solo tómalo, pero no comas demasiado, o te dolerá la panza. —sonrió un poco en su dirección, y mientras su pequeño inspeccionaba la bolsa no pudo evitar ensanchar su sonrisa más.

Sung no sabía como tomarse los vistos de su novio, y por al menos en ese último tiempo tenía que recurrir a darle regalos o pasar tiempo con él como para aliviar un poco las cosas, sin embargo la mayoría de las veces no sabía que hacer cuando el más alto se molestaba con él por dejarlo solo o como ese día, cancelar los planes.

Sentía que era su culpa pero, cuando Jeong sonreía parecía estar todo mejor.

Suspira el azabache. — Tú pareces muy ocupado últimamente... 

— ¿Tú crees? —asintió el menor, antes de que volviera a su expresión triste el mayor cambió de tema— Mira, estaba pensando si editar esta parte o esta otra, es que no sé que hacer y...

De pronto el teléfono de Sung comenzó a sonar, y como estaba Jeongin con él quiso ignorarlo, pero esté respondió de inmediato con una sonrisa sarcástica.