Tú le pusiste fin, yo quería continuar escribiendo nuestra historia, pero ya habías cerrado el libro.
Tu excusa fue estar confundido, pero olvidaste decirme que esa confusión tenía piernas y cabello.
Lo peor fue mirar dentro de mí en busca de errores, cosas que cambiar como si con eso te fuera suficiente, y ese fue el problema, jamás fui suficiente para ti.Mientras yo pintaba nuestro cielo de colores, tú le dibujabas el universo a alguien más.
Mi cabeza estalló, tal vez como señal de que dolía el que ya no estés, tomé una pastilla para apaciguar el dolor, pero ¿qué pastilla tomo para un corazón roto?
Y de todos los finales que imaginé para nosotros, jamás pensé que sería este.Te bastaría mirarme tan solo unos segundos a los ojos para que ellos te cuenten que se desviven llorando, tan caprichosos e ingenuos, queriendo verte.
Estoy lista para empezar mi viacrusis, estar en el mismo sitio todos los días, a unos centímetros de ti, pero sintiéndote tan distante.
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Cosas que nunca te dije
RomanceCosas que nunca sabrás que habitan en mí, palabras que jamás escucharás de mis labios, pero que leerás de mi alma. Por todos esos corazones rotos, como el mío, que perdió varias piezas, así como yo perdí mi sonrisa. Por ti, por creer que sería difer...