Ya sé que no queda esperanza para nosotros, pero como quisiera tener aún tus abrazos.
Ya me contaron que te vieron con él, sabía que eso pasaría, aún así no estaba preparada.
Tengo que cruzarme contigo por todos lados, eso es señal de que la vida me odia y no la culpo, hasta yo lo hago.
Todavía no encuentro la ciencia que me explique por qué yo sigo acá si ya te fuiste, tal vez es mi equipaje pesado llenos de recuerdos y tantos "te quiero" lo que no me permite avanzar. Quizá se debe a que veo los trenes pasar y no me animo a subirme a uno porque sé que al primer segundo voltearé y le pediré al conductor que se detenga para volver al inicio.
Probablemente siga por costumbre o porque en el fondo sé que queda una chispa viva, capaz de crear todo un incendio en donde arda el amor que sigue vivo.
No sé cuál sea la respuesta a tan grande incógnita, pero sé que aún se me revuelve algo en el sistema cardiovascular cuando te veo.
ESTÁS LEYENDO
Cosas que nunca te dije
RomanceCosas que nunca sabrás que habitan en mí, palabras que jamás escucharás de mis labios, pero que leerás de mi alma. Por todos esos corazones rotos, como el mío, que perdió varias piezas, así como yo perdí mi sonrisa. Por ti, por creer que sería difer...