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14. Grandes noticias

Viernes y por fin Hee podría decir que estaba libre de cualquier compromiso, solamente quería volver a casa, usar su mejor pijama y ver películas hasta quedarse dormida, sonaba como el plan perfecto. Lamentablemente no podría ser así, ese mismo día, la cita con Hoseok y su esposa Suni se llevaría a cabo por la tarde, por ello HeeYoung se encontraba sentada en su escritorio terminando una propuesta para uno de los nuevos clientes.

Una familia procedente de Japón, estaba interesada en invertir con construcciones en territorio coreano; ellos tenían tanto poder que el Gobierno de Corea fue muy accesible con los permisos correspondientes. Este nuevo proyecto, trataba de condominios que serían compartidos entre la familia y personas externas que quisieran pasar unas vacaciones de lujo en las costas del país. Aunque este proyecto era bueno y quería enfocarse para agradarle a sus clientes, no podía. El complejo del señor Jeon había avanzado tanto que el anteproyecto ya estaba finalizado y se podía ver un gran avance en obra, los edificios por fin tomaban forma; el problema era que aún no se le informaba al señor Jeon.

Haciéndola caer en cuenta, hace dos semanas que no hablaba con él, probablemente estuviese igual de ocupado que ella, en fin, debía terminar su trabajo del día.

Los últimos detalles estaban siendo terminados cuando una notificación avisaba a Hee, que un correo había sido recibido en su bandeja y sin pensarlo lo abrió.

Hablando del rey de roma. El correo que estaba en su bandeja era nada más y nada menos que de Jeon & Co Abogados, donde le informaban que los señores Jeon pedían un reporte de avance en la obra de los complejos. Un poco decepcionada, pues esperaba que Jungkook al menos se dignara hablarle, sin importar que fuera para exigirle cosas.

Como podía hacer como si nada cuando la había besado ahí mismo, en Hanbada, sin cuidado ni permiso alguno. La enfurecía pensar qué tal vez lo había hecho con una segunda intención, volverla a llevar a la cama.

Suspirando y molesta, dejó el correo de lado para seguir con su tarea inicial, antes de irse contestaría el correo.

Pero, a veces la curiosidad ganaba. Una idea cruzó por su mente, podría contestar el correo de una vez y pedir que el "Señor Jeon" se comunicara con ella directamente.

No, no era una buena idea.

Por segunda vez, frustrada y molesta, sin saber por qué, dejo el correo de lado una vez más. Mejor terminaría lo que debía hacer y se iría a casa para alistarse y salir nuevamente.

El documento había sido terminado, una pequeña presentación de la visualización que se tenía para los condominios de la familia japonesa y un discurso planeado para aclarar sus ideas antes de exponerlas.

Por un momento, había olvidado por completo el tema del correo, por lo que antes de apagar su computador, escribió.

" A quién me dirija,
Sin falta, el Lunes por la mañana será enviado dicho reporte, lamento las molestias que esto pueda ocasionar.
Una vez más, hago saber que estoy en disposición siin para resolver cualquier duda del Señor Jeon.

Saludos."

A HeeYoung le daba una pizca de gracia, pues en persona no sería tan fácil para ella dirigirse así a los demás tan propiamente. Mandó el correo y sin esperar respuesta, tomó sus cosas para salir de Hanbada, pero el sonido de su celular hizo eco por el pasillo justo antes de llegar al ascensor.

-Im HeeYoung, diga- contestó al teléfono.

-Señorita Im, le habló desde Jeon & Co- la voz de una fémina se escuchaba a través del aparato.