Ultrasonido

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Tsunade estaba de regreso en la aldea, estaba contenta de que su proclamado nieto estuviera en cinta por supuesto, sin embargo Jiraiya... era otro cantar. Estaba enojado y era normal viniendo de un alfa tan soprebotector como lo era él, Minato era como su hijo por consecuente Naruto era su nieto, un nieto que amaba junto con su nieta Naruko, ese par de torbellinos eran lo que el tanto deseó, cachorros. Su instinto los proclamaba como parte de su manada aún sin compartir sangre. Minato era su cachorro ante sus ojos, estuvo ahí cuando se convirtió en Hokage y luego en padre, lo crió como suyo después de la segunda guerra ninja. En efecto era sus hijos y los cachorros de su hijo debían ser cuidados, eran omegas, la especie que según la sociedad era la más frágil y debía ser cuidada como si de cristal fueran.

Genial, tres alfas paranoicos... naruto respiro dejando salir el aire contenido en sus pulmones. Esperaba a Itachi para la revisión que tenían con Tsunade estaban contentos por que por fin conocerían a su pequeño cachorro. Estaba en la oficina de la torre Hokage, su esposo tenía un reunión con el consejo y el se quedó esperando en su oficina recostado en el sofá que Itachi mandó a colocar para cuando su esposo fuera a visitarlo o esperarlo para volver juntos a casa, naruto necesitaba instintivamente la presencia de Itachi quizá por el embarazo que hacía que esa necesidad se hiciera más grande.

Un ANBU cuidaba de su seguridad, algo exagerado pero que acepto para mantener al alfa tranquilo cuando no estuvieran juntos, sin Sasuke el siguiente en la lista para cumplir esa tarea era Sai pero Itachi era celoso de el alfa que antes mostrara interés en su esposo lo estuviera rondando, entonces....

—Shisui... ¿va a tardar?— pregunto con aburrimiento.

El susodicho se rió bajo la máscara.

—¿sabes que decir nuestros nombres esta prohibido?, la mascara no es de adorno, es para mantener nuestras identidades secretas...

Shisui el ANBU personal del Hokage fue encomendado a cuidar al omega durante su embarazo, y el mayor estaba feliz de cuidar al pequeño así como a su futuro ahijado.

Naruto rodo los ojos y arremedo al mayor, logrando que este se riera a comparación de Itachi, shisui era muy amigable, expresivo y sociable nada que ver con el introvertido de su primo menor, tal vez por que Shisui no heredo el odio que transmite la sangre maldita del clan Uchiha.

—Bien, bien. Lo siento.. cuervo. Entonces...  ¿mi esposo va a tardar?.

—No creo... ¿estás impaciente? ¿quieres algo?, se que Itachi suele mandar a atraer frutas para ti.

Naruto ríe, inmediatamente un viejo recuerdo llega a su mente.

El joven omega mira con anhelo en árbol cuyo fruto son unas jugosas manzanas, a sus 10 años el control de chakra no era para el su fuerte. Pero tenía un gran deseo por aquella fruta, Itachi estaba a su lado, como futuros compañeros de vida intentaban establecer primero una relación amistosa, Itachi sabia que el menor era su destinado pero Naruto aún no era conciente de este hecho.

El deber de un alfa era hacer ver a su omega era fuerte, que podría ofrecer protección y sustentabilidad, mostrar que era lo suficientemente  hábil para proveer seguridad. Ese era su instinto cuidar a su omega, así como alimentarlo... y cuando vio esos ojos zafiro fijos en la fruta roja no dudo en subir al árbol.

Trepó usando su chakra para caminar por la corteza y llegar a la manzana que Naruto quería. Estiro la mano intentando agarrar la fruta... sin embargo no contaba con que una ardilla enojada apareciera y le saltara en la cara por invadir su territorio, el cayo irremediablemente y las manzanas que se desprendieron del árbol cayeron sobre el omega rubio.

Baby en proceso.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora