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Debía admitir que la idea de los Haitani de tener de vez en cuando un día solo para nosotros había sido la mejor idea que podría habérseles ocurrido, amaba cada una de nuestras salidas, una vez por semana o semana por medio teníamos nuestro día donde no siempre íbamos al mismo lugar, habíamos pasado un día en la playa, otro en un hotel en medio del centro de Tokio e incluso me habían llevado dos días a las Maldivas

No solo mi humor había mejorado muchísimo últimamente, sino que nuestra relación, aunque jamás estuvo mal, mejoró mucho más

Todo era demasiado bonito, tenía salidas con los hermanos, mi niña estaba feliz y saludable, Bonten se había comenzado a expandir fuera de Japón y mi trabajo cada día era más divertido, salir de misiones con Sanzu era lo mejor, a pesar de que siempre terminaba matando a alguien, pero como dice ese dicho, la calma antecede a la tormenta...

Había notado a los Haitani raros los últimos días y eso me molestaba, sobre todo porque eran ambos, y según los demás, solo eran cosas mías

No era de dudar, llevábamos tantos años juntos que la confianza que les tenía era prácticamente ciega, teníamos una hija, una familia, y pasábamos magníficos momentos juntos cada vez que salíamos solo los tres, ellos no me habían dado jamás una razón para dudar de ellos, para creer que me engañaban, pero el comportamiento de ambos los últimos días era extraño, susurraban a escondidas y cuando me acercaba a ellos se callaban enseguida ¿Cómo podía interpretar eso?

¡Preciosa!- Sanzu entró a mi oficina sin golpear y se detuvo al verme sentada frente al escritorio con mis manos sujetando mi cabeza- ¿Mei? ¿Qué sucede?

Nada- negué- me duele la cabeza, solo eso

Sabes que no puedes mentirme- se acercó a mí, sentándose sobre mi escritorio a mi lado- ¿Qué está pasando?

Tengo... la sensación de que algo malo está a punto de pasar- apreté mis labios

Nada malo sucederá- negó

Ran y Rindou están comportándose raros- susurré

¿Es por ellos?- rodó los ojos- esos idiotas solo están trabajando, no te preocupes

Eso dijo Izana también- bufé

Y créenos, si estuvieran en algo raro ya estarían muertos, ambos- afirmó- y seria mi momento para robarles a su novia

¡Haru!- golpeé su pecho haciéndolo reír

Confía en mi preciosa- se inclinó para besar mi cabeza- tengo una misión importante, ¿Vienes?

Claro que si- me puse de pie emocionada- ¿A quién mataras hoy?

Aww te adoro- pasó su brazo por mis hombros- amo como te entusiasmas por como mato

Es divertido ver como lo haces- levanté mis hombros- el trabajo de Ran y Rindou me aburre un poco, limpiar cadáveres es asqueroso, hacerlos... no tanto

Si tan solo te dejaran matar- suspiró apoyando su cabeza en la mía mientras salíamos de la oficina- serías una gran psicópata

Para eso te tenemos a ti, Haru- pasé mi brazo por su cadera- entonces... ¿De quién nos encargaremos hoy?

No mataremos a nadie, por desgracia- suspiró- Mikey me dio una misión molesta y creí que sería más divertido ir contigo, aparte, algo me dice que te querrás hablar con él

¿Con quién?- lo miré confundida

Ya lo veras- se subió a su auto cuando llegamos al estacionamiento y lo imité

No entendía de que estaba hablando, ¿Una misión molesta? Bueno, si le había prohibido matar a alguien eso ya la volvía aburrida para el pelirrosa, lo sabía

| Without you | Hermanos Haitani | +18 (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora