𝑺𝒂𝒍𝒗𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏; 𝑯𝒂𝒏𝒊

25!

narrador;

Toni entro a su hogar con los nervios a flor de piel, cerró la puerta principal detras de él y camino hasta la sala donde estaba Hëna sentada en el sofá viendo televisión, con un suspiro se acercó y se sento alado de la chica tomando el control del televisor para apagarlo recibiendo una queja de la italiana.

— Es de mala educación lo que acabas de hacer. — Alegó la chica cruzandose de brazos mientras miraba al italiano quien solo mordió su labio por los nervios. — ¿Estuviste llorando de nuevo? — Preguntó viendo como los bordes de los ojos del rubio estaban levemente rojos.

Toni rápidamente negó con la cabeza soltando una risa nerviosa comenzando a jugar de manera nerviosa con sus dedos encima de sus piernas y miro sus manos.

— ¿Podemos hablar de algo importante? — Preguntó Toni rápidamente mirando a la chica, la cual asintio acercandose más al ojiazul.

— Claro, mientras no sea de Hai. — Habló sonriendo la italiana haciendo que Toni haga una leve mueca.

— Pues, Hai no tiene mucho que ver. — Murmuró el ojiazul nervioso recibiendo una mirada confundida de parte de la chica.

El italiano soltó un suspiro mirando a su amiga que estaba esperando alguna palabra del rubio. El silencio reinó por unos segundos haciendo el ambiente algo incómodo para ambos hasta que Toni volvio a suspirar.

— Yo quiero que te vayas de mi casa, creo que es mejor que vuelvas a Italia. — Habló Toni con un tono de tristeza mientras tragaba saliva nervioso por la reacción que pudiese tener la chica.

— ¿Cómo? — Preguntó alzando una ceja al escuchar al contrario y soltó una risa mirandolo. — Ya, dime que es lo que en verdad quieres hablar. — Pidió sin creerle ninguna palabra al italiano.

El ojiazul la miro atentamente y suspiro cansado. — Es eso, quiero que te vayas, no me siento agusto con tu presencia, no tanto como antes, no después de perder mi relación con Hai por querer tu amistad toxica. — El mismo Toni se sentía impresionado por sus palabras, pero todo lo que decia de cierta manera era verdad.

— ¿Me estas diciendo que prefieres al chino antes que a mí? — Preguntó la chica cruzandose de brazos y rápidamente se levantó del sofá completamente molesta.

Toni se quedo en silencio mientras Hëna lo miraba esperando alguna respuesta pero no tuvo nada, el italiano siguio en silencio algo incómodo por la situación.

— El que calla otorga ¿No? — Soltó una risa irónica y caminó hasta su habitación para hacer las maletas completamente molesta.

Un suspiro salio de los labios del ojiazul quien cerró sus ojos comenzando a escuchar como Hëna tiraba cosas en la habitación donde ella se habia quedado todas estas semanas. El sonido de cosas rompiéndose y la voz de la chica soltando insultos al aire hacia que el italiano se sintiese culpable pero aun así mantuvo su posición de que ella tenia que irse, si se le estaba dando esta oportunidad de arreglar las cosas con Hai, no la iba a desaprovechar, no, de ninguna manera.

Abrió sus ojos al escuchar los tacones de Hëna y escuchó como esta caminaba en dirección a la puerta.

— Las llaves de la puerta dejalas aquí. — La detuvo escuchando como soltaba un insulto en italiano y le tiraba las llaves en la cabeza. — Gracias. — Murmuró manteniendo su postura firme y sin mirar como la que era su mejor amiga se iba soltó un suspiro sintiendo la culpa crecer de manera exagerada.

Un fuerte portazo se escucho haciendo que por fin Toni empiece a llorar acostandose en el sofá, abrazó sus piernas sin dejar de llorar sintiendose completamente solo y culpable.

🐛

Holaaaaa

Toni te entiendo bebé<3

besos en la cola caras de bola 😽