Capitulo 25

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—¡Vas a quedarte en casa, Nellya! —me ordena Eiron—, solo saldrás para lo indispensable, y siempre con el móvil encendido.

—Pero… ¡no puedo dejar de hacer mi vida! —replico.

—Tendrás a una patrulla en la calle de tu casa vigilando las veinticuatro horas del día —dice Eiron.

—¡Me quedaré contigo en tu casa! —suelta Sheryl—, no pienso dejarte sola.

—Perfecto, hablaré con los agentes para ver quién está disponible para patrullar tu casa —explica Eiron—, pondré en aviso a la Comisaría 24 por si los necesitamos.

—Es mejor que te vayas a casa, Nellya —me dice Kyan entristecido.

—Nosotros te protegeremos —afirma Jayden—, ¡es nuestro deber!

Mirándolos a los ojos a todos, con tristeza al ver esta cruda realidad que ahora asoma desde mi pasado, un pasado turbio y duro para mí, me despido de ellos y me alejo en dirección a la salida. Tengo que quedarme en casa y, si salgo a hacer algo, tener mucho cuidado.

—Sheryl… —le digo en el ascensor—, si te quedas conmigo, ¿qué pasará con tus estudios?

—No te preocupes, como tendrás una patrulla las veinticuatro horas, solo estaré fuera en el horario de la universidad, el resto del tiempo estaré contigo.

No podía más que abrazarla, incluso con Arrow en sus brazos, ese abrazo hizo florecer mis sentimientos, siento tanta tristeza en mí, que solo la tengo a ella.

En ese estado no podía conducir, así que le pedí a Sheryl que nos llevara a casa, porque no era capaz de hacer nada.

Llegamos a casa y me senté en el sofá con Arrow entre las piernas, al rato llegó Sheryl, que cerró la puerta, dejó las llaves puestas, de modo que nadie pudiera entrar, se sentó a mi lado y me abrazó con fuerza. De tanto dolor que siento por dentro, caigo rendida en el sofá con Sheryl, acurrucadas, con Arrow dormido entre mis brazos.

Al día siguiente, veo que Sheryl se levantó y no me consiguió despertar y, aparte, me tapó con una manta fina de verano. Despierta, desde la cocina, Sheryl me mira.

—¿Te preparo el desayuno? —me pregunta—, hoy hay unos deliciosos muffins red velvet, que he preparado porque te mereces un buen comienzo de día.

La miro y la sonrío. Con mi sonrisa, ella sabe que le estoy dando las gracias por lo buena que es conmigo en todo momento, la quiero como a una hermana.

Sheryl me trae un platito con muffins, hay que reconocer que son minimuffins, pero tienen una pinta requeterrica. También me trae mi café capuchino espumoso, como a mí me gusta, y me pongo a comer con tantas ganas que me van a salir los muffins por la nariz.

 Después de ponerme a ver mi serie favorita, Outlander, y desayunar, todo lo vivido ayer parece solo una pesadilla, pero no es así realmente, es real, y el miedo se apodera de mí, pero ahora toca centrarse y vivir.

A media mañana suena mi móvil y veo un mensaje de Roi.

Buenos días, preciosa.

Espero que andes bien. Eiron me ha contado todo el asunto que te ronda, no tengas miedo, estoy aquí para protegerte.

Espero que no te moleste que te llame «preciosa», pero es lo que pensé cuando te vi la primera vez.

Leer su mensaje me reconforta, la verdad es que no me sienta mal que me diga cosas bonitas, creo que tengo un sentimiento en mí que no sé definir, pero hay algo en mí que, cuando estoy con él, me siento feliz.

ASESINOS EN LA OSCURIDAD [Papel & Ebook] #ttw2021Donde viven las historias. Descúbrelo ahora