Finney Blake.

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 Kylie se encontraba vistiéndose para su primer día de clases, era la chica nueva en el pueblo  Denver en Colorado. No sabía que usar en su primer día, aunque de seguro tendría todos los ojos en ella por ser la nueva.

—¿Blusa negra o rosa?— se preguntaba a sí misma.

Se decidió por la rosa, se la puso y después su falda blanca con flores rositas con un cinturón negro muy lindo. Por último tenis blancos con rosa. Pensó que tal vez así se veía más amigable, o menos desagradable. De cualquier forma solo quería dar buena impresión.

—¡Kylie!— escuchó a su madre llamarla.

—¡Ya voy!— contestó Kylie terminando de abrochar sus agujetas.

Bajó las escaleras corriendo no sin antes tomar su mochila y llaves. Al llegar vio el desayuno servido en la mesa, se sentó y agarro waffles con un batido de chocolate.

—¿Nerviosa?— dijo su hermana mayor.

—Para nada, Tess.— le dijo mientras daba un bocado a su waffle.

—Bien, y te digo que no me digas Tess, me llamo Tessa.— dijo comiendo un poco de huevo estrellado.

—De acuerdo... Tess.— dijo Kylie bromeando.

Su hermana le echó una mirada matadora y la chica dejo de reír.

—Kylie, faltan 15 minutos, ya debes salir.— informó su madre.

—Bien, ya voy.— dijo dándole el último trago a su batido y se levantó con su mochila.

Se despidió de su madre y su hermana con un beso en la mejilla. Salió de la casa, cogió su bici y se subió en ella para empezar a pedalear. Después de cinco minutos vio a dos chicos caminando por la banqueta. El chico le pareció muy lindo, era la primera vez que sentía algo así, normalmente odiaba a los chicos. Y la chica a su lado parecía menor que él.

Volvió su mirada al frente para seguir pedaleando pero ahora más rápido, tenia que llegar minutos antes porque le tenían que dar su salón, antes de entrar.

A los 10 minutos llegó a la escuela, atrás de ella estaba una pelea de dos chicos, uno con el pelo largo y un pañuelo en la cabeza, el otro tenia el pelo chino y era un poco pasado de peso. No le dio importancia y entró a la escuela. Fue hasta dirección, donde entró.

—Buenos días, director.—saludó Kylie.

—Buenos días, señorita Miller.— dijo el profesor.—, Yendo al punto, en esta escuela tenemos pocas reglas. Primero: Tiene que respetar a sus mayores, tales como maestros, directores, padres de familia y conserjes. Segundo: No se permiten dentro de la escuela. Tercero: No se permiten insultos o bromas a los demás alumnos y personal de la escuela.

—De acuerdo profesor, y no se preocupe, nunca en mi vida haría esas cosas. No perdería la oportunidad de estar en esta maravillosa escuela.— mintió Kylie.

—Bien, su salón, es 2do 3. Arriba de las puertas tienen los números de los salones y su grado. Ya se puede retirar. ¡No me decepcione!— dijo el director.

—No pensaba hacerlo señor. Gracias por darme esta oportunidad en su escuela tan linda y respetable.— dijo y salió.

—Maldita escuela de mierda.— susurró después de que cerrará la puerta.

Se dirigió a su casillero, lo abrió y abrió su mochila. Tenia su horario en su mochila por lo que leyó la clase que tenia: Química.

Dejó su mochila ahí junto con su bote de agua y cosas personales. Cerró su casillero casillero y fue hacia el salón 2do 3. Llegó y al parecer todos ya estaban sentados ahí. Entonces escuché ahí dentro algo.

One Shots Multifandom I.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora