One Shots Multifandom I.

Harry Potter.

Anne estaba concentrada en clase, hasta que volteó a ver hacia atrás, para encontrarse a Harry riendo junto a Ron. Tal vez algo le hizo mal a Anne o Harry se había arreglado de más pero Anne pudo sentir como su cara ardía y su estomago sentía cosquillas. Inconscientemente sonrió embobadamente.

Pero dejo de hacerlo cuando Harry se dio cuenta de que ella lo veía e hizo una cara de confusión. Anne volteó su vista al frente asustada. ¿Qué demonios le pasaba? No tenía idea de porque sentía la necesidad de voltearlo a ver cada segundo.

Solo sabía que verlo era algo que necesitaba. Intentó prestar atención a Pociones pero solo pensaba en Harry.

¡Tú lo odias!, ¡Odias a Harry Potter!— pensó Anne.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por la voz del profesor Snape regañando a Harry como era habitualmente, solo que ahora no le pareció gracioso, si no que, le pareció injusto. Snape lo regañaba por casi todo, cuando el casi ni tenía la culpa.

La clase terminó y Anne salió junto a Hermione al comedor. Comenzó a contarle lo que le había sucedido.

—Entonces me di cuenta de que estaba mirando a Harry, y lo más extraño, es que, ¡le sonreí!— dijo Anne mientras caminaba a la par de Hermione.

Hermione le sonrió.

—Bueno Anne, es normal.— soltó Hermione muy simple.

—¿Normal?, ¿Cómo va a ser normal? — preguntó Anne.

—Pue sí, te gusta Harry.— contestó Hermione.

—¿Cómo me va a gustar? Es Harry, es un hombre.— dijo Anne.

—Ay Anne, no sé como ayudarte. Eres tan lenta para la vida.— dijo Hermione suspirando.

Llegaron justo al comedor. Así que dejaron ese tema de lao y fueron a sentarse. Estaban comiendo tranquilamente hasta que llegó Harry, entró acomodándose el cabello mientras caminaba hacia las chicas.

A Anne se le aceleró el corazón, pero entonces volvió a la realidad, estaba asustada. ¡Por Merlín! ¿Qué rayos le pasa?

—Ah- Voy al baño.— dijo Anne corriendo tan rápido que ni siquiera Hermione pudo responder.

Al salir corriendo paso al lado de Harry, el cuál la miro un poco confundido, pero siguió su camino a la mesa, sentándose justo al lado del lugar de Anne.

—¿Qué le pasó a Anne?— preguntó Harry.

—No lo sé...— contestó Hermione.

*En el baño*

Anne entró y se mojó la cara con agua del lavabo.

—¿Qué me pasa?— se preguntó a ella misma.

Se volvió a mojar la cara con agua. Justo en eso llegó Hermione.

—¿Qué paso Anne? Saliste corriendo del comedor.— dijo Hermione preocupada.

—Nada Her, estoy bien.— contestó Anne.

Hermione se cruzó de brazos.

—No lo ocultes Anne. Se nota que te mueres por Harry.— rió Hermione.

—¿Te volviste loca? ¡Claro que no!— se apresuró a decir Anne.

—¿Por qué te espantas? El es un hombre y tú una mujer.— explicó Hermione.

—¡Pues sí es malo! El es un hombre y a mí me caen mal los hombres, menos me gustan y Harry además está muy feo.— contestó Anne.

—Feo para mí, pero para ti, te trae babeando.— dijo Hermione sonriendo.

—¡Claro que no, no me gusta! Y ya no me hables, ya me enojé.— dijo Anne saliendo del baño.

[. . .]

Harry estaba en la sala común de Gryffindor había llegado Ginny junto a los Gemelos y Ron.

—Harry la idea de los dulces que tuviste fue increíble.— dijeron Fred y George al mismo tiempo.

—De nada.— sonrió Harry.

Ginny se levantó y abrazó a Harry por el brazo.

—¡Ay sí! Harry es un genio y además tienes ideas muy buenas.— dijo Ginny con una voz un poco fingida.

—Gracias.— dijo Harry forzosamente.

Harry movió el brazo intentando apartar a Ginny lo cuál funcionó.

[. . .]

Anne y Hermione iban entrando cuando vieron a Harry y Ron riendo sentados en el comedor. Los dos reían hasta que vieron a Ginny llegar junto a ellos y la alcanzaron a oír.

—¡Ay Harry! ¡Que bueno que hay un lugar junto a ti! Así voy a poder sentarme junto a ti.— dijo Ginny sentándose al lado de Harry.

Anne se volteó hacía Hermione para hacerle un comentario.

—"Así me voy a poder sentar junto a ti", que tipa tan pesada.— dijo Anne imitando a Ginny.

Hermione solo rió.

—Te cae mal Ginny porque estás celosa.— se burló Hermione.

—¡Ay claro que no!— dijo Anne.

—Claro que sí. Pero esas son cosas del amor y como a ti te encanta Harry.

—¡Ay pero ya te dije que no!— dijo Anne soltando un golpe a Harry.

Hermione empezó a darle empujoncitos Anne para que avanzará.

—Si no estás celosa, ¿entonces porque te cae mal Ginny si ni le hablas?— preguntó Hermione mientras se detenían frente a Harry, Ron y Ginny.

—¡Ay porque sí! Ya vamos a sentarnos.— dijo Anne y eso hicieron se sentaron.

Anne enfrente de Harry y Hermione enfrente de Ron.

Paso el tiempo y Anne veía como Ginny le coqueteaba a Harry. Algo en su interior ardía, no sabía que sentía.

Pronto descubrió que Hermione tenía razón, sentía celos. Demasiados celos, más de los que le gustaría admitir. Pero era inevitable, Harry le gustaba y se había dado cuenta esa noche antes de que amaneciera.

-Flashback-

Anne se encontraba durmiendo tranquilamente en su cama, no había nada raro, hasta que de un momento a otro empezó a sonreír inconscientemente. Su sueño la hacía sonreír. 

—Dios Anne, amo tus ojos.— le decía Harry acariciando su mejilla.

Anne sonrió enamoradamente.

—Yo te amo a ti.— respondió Anne.

Sus cabezas se empezaron a acercar, sus respiraciones se mezclaban, estaba apunto de suceder, los dos chicos cerraron los ojos esperando a que se terminara el espacio y justo cuando eso pasó Anne despertó de su sueño.

Se levantó como si hubiera sido una pesadilla, era de lo peor. Pero se dio cuenta de algo, Harry la traía completamente loca.

—Hermione tenía razón. Es verdad, no solo me gusta Harry, me fascina.— dijo Anne tocándose la cara asombrada.

¿¡Cómo era eso posible!? ¡Harry era un hombre! Y ella no le gustaban los hombres. O eso creía, algo cambió en Harry ese último año que hizo que Anne se volviera loca por él.

-Fin de flashback-

Anne se levantó molesta de ahí, al ver como Ginny le coqueteaba de más a Harry. Prefirió irse de ahí antes que reclamar, ay que, ella y Harry no eran nada. Además no sabía si Harry tenía sus sentimientos hacía ella, por lo cual se fue enojada y celosa de ahí, caminando a paso muy apresurado a su cuarto.

Se metió debajo de las sabanas, para agarrar una almohada y empezar a gritar lo más que pudo, que alguien te gustará puede ser muy estresante, más si otras le coquetean enfrente de tu maldita cara.

Travesura realizada. (Parte 2 pronto).