Shiva estaba demorando mucho, lo habían anunciado, pero no se estaba presentando en la arena... Pronto, comenzó a sonar una celestial pieza musical tocada por un violín... Era música del inigualable Hermes.... Estaba tocando la clásica música de batalla de Zeus. Zeus va a pelear con Adam? Tragué saliva, y pensé que era demasiado... Quieren derrotar a los humanos desde el inicio, humillandolos y matando a sus representantes uno a uno enviando a sus mejores guerreros... Esta actitud me enfureció... Sentía mucha rabia... Acaso los dioses tenían miedo a los humanos?, pensé... Zeus entró a la arena con un baile extraño, y desafiante.
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-- Ese es mi papá! te impresionaste, no es así?-- me comentó Ares, dios de la guerra-- Es un viejo, pero tranquila, puede con ese delgaducho de Adam. -- Tiene razón, señor Ares. En el interior... Odiaba mucho ver a ese viejo asqueroso y pervertido! Zeus horroroso, deseo que Adam te dé tu merecido... Los dioses hasta ahora mataron al valiente Lu Bu, y junto a él murió mi hermana Valkiria Randgriz... Ya no tenía sentido seguir agachando mi cabeza a los dioses... Debo decidir ahora, los dioses principales están aquí... Así me maten ahora mismo por darles la espalda... no tolerare un segundo más estar fingiendo estar de su lado. Tengo mis propios sueños y metas, y odio seguir siendo la dama de compañía de los dioses... Me daba náuseas cada vez que les servía sexualmente... Todo mi odio oculto estaba a punto de explotar. Mi transformación en Arma divina y mis nuevos sueños me hicieron reflexionar suficiente, debía ser valiente y hacerlo... Ares notó rareza en mi mirada... Odin también... Afrodita... -- Sucede algo, Valkiria? -- dijo Shiva, dios Hindú, apenas había regresado al lado VIP junto a los demás dioses, ya que Zeus cambio de lugar con él en la batalla --
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Los demás dioses también me miraban raro, era obvio que estaba ocultando algo... Mí cuerpo comenzó a temblar... Me puse pálida del miedo... Aún así, debía seguir... Con el corazón latiendo rápido por la adrenalina... Me levanté y me coloque frente a ellos... Con miedo, pero aceptándolo... Me dirigí a los dioses, decidida a hablar en voz alta, y casi gritando para agarrar valor.... -- No voy a servirle más a ustedes, dioses. Voy a unirme a los humanos! Los dioses de la sala guardaron silencio por un segundo, me observaron con detenimiento... y comenzaron a murmurar. Miles de años ocultando mi odio... -- Esta loca esa Valkiria?-- murmuró Ares-- Tu sentencia por dejarnos es la muerte... Está escrito en una cláusula por el mismísimo Zeus y demás dioses primordiales... -- Dejenla!-- dijo Poseidón, y todos los demás dioses callaron-- Que se vaya con quien desee, ya no importa, igualmente va a morir, su sentencia de muerte se cumplirá junto a la de los humanos al terminar el Ragnarok. Los dioses somos perfectos como somos, no la necesitamos. Los demás dioses, en silencio, respetaron y temieron mucho las palabras de Poseidón, y parecían estar de acuerdo con él. -- Es una pena que ya no nos sirvas, tus servicios eran un privilegio, y solo para los dioses más importantes... Jamás pude estar contigo... Auch. -- dijo Loki-- Adiós, Roja. Suerte. -- Desde el inicio nos odiaste mucho...Haha...-- rió Afrodita-- Lo suponía desde que rechazaste todas las propuestas de matrimonio de los dioses más guapos y poderosos. Pobrecita, morirás con los miserables humanos, jijiji. -- Eres una completa tonta.-- dijo Thor -- Debiste quedarte callada, como siempre lo haces. Y aún tiemblas por tu miedo a nosotros... pero ni eso te hizo pensar mejor. Las palabras de los dioses eran intimidantes, como si pudieran ordenar mí muerte de un capricho... De hecho podían hacerlo. Temblaba mucho... Estaba sudando frío... Las miradas de desaprobación de los dioses eran como en mis peores pesadillas... Sentía la muerte más cerca que nunca. Y me había quedado en shock... No podía moverme, ni reaccionar. -- Debiste aceptar ser una de mis esposas, Rojita-- comentó Shiva decepcionado-- Siempre parecías tan servicial y linda... -- Jijiji, miren como tiembla, creo que se arrepentirá mucho de esto!-- se burló Afrodita-- Qué excitante... -- Estoy de acuerdo con Poseidón, vete ahora, Roja. No te quedes parada ahí, fuera nuestra vista, traidora! -- ordenó Odín-- -- Yo la llevaré.-- interrumpe Poseidón -- Poseidón parecía haber notado mí estado de shock, por lo que me tomó de las manos y me acompañó a la salida... -- Estás bien ahora? -- Gracias señor Poseidón. Debo irme ahora, adiós... Me puse de espaldas a él, con intención de irme inmediatamente. -- No me ocultes tu odio, ódiame, me da igual ...-- afirmó Poseidón en voz alta-- A pesar de ser un dios, y ser el más perfecto, rechazaste ser mi esposa, y también rechazaste a todos los demás dioses alguna vez, por qué?... Quería quedarme callada e irme corriendo... Pero cambié de opinión y le respondí, aún dándole la espalda. -- Señor Poseidón, mi sueño nunca fue casarme, ni ser una dama de compañía... Me obligaron a satisfacer deseos de dioses, y todo contra de mi voluntad... Mi temor a una muerte horrible por la mano de los dioses era lo que me mantenía temerosa y leal... Pero eso cambió. Ya descubrí mi verdadera fuerza, y tengo nuevos sueños. Mi talento, mi transformación... Lo logré. No seré más la "Valkiria amante", ahora soy la Valkiria de la Venganza, no lo olvide señor Poseidón, nunca.
