Arreglo por la fuerza JULIANTINA(JULIANA GP)

Capitulo #19

{Valentina }

El viaje en auto fue totalmente silencioso, incómodo y de una duración insoportable. Juliana seguía sonriéndome y estoy muy segura de que esos ojos marrones suyos tenían diversión en ellos, pero debido a esos malditos pantalones de aviador que usaba, no podía ver. Y obviamente, la odiosa idiota tuvo que elegir el auto más caro que tenía en su garaje y ahora todas las almas volvieron la cabeza hacia nosotros. Era tan jodidamente molesto y solo quería salir de su Laferrari y considerar caminar hasta nuestro destino.

No pude evitar mirarla con el rabillo del ojo. Estaba paralizado por la forma en que su camisa blanca se pegaba a sus pechos, lo que haría para pasar mis dedos por cada uno de ellos. ¡Que demonios! ¿De dónde vino ese pensamiento? Compórtate Valentina.

Me regañé mentalmente y me giré para mirar a las personas que nos saludaban desde el costado. Definitivamente, deben estar sabiendo que no era otra que The Juliana Valdes . Obviamente, porque quién más, aparte de una gilipollas rica y egoísta, conduciría un LaFerrari en una isla.

Puse los ojos en blanco y me giré para mirar a los peatones por los que pasábamos. Había mujeres bonitas y regordetas que vendían todo tipo de frutas exóticas al costado de la carretera y se me hizo la boca agua. Ni siquiera había visto algunos de ellos y estaba deseando comer los frescos,frutos no inyectados.

Finalmente, después de diez minutos, nos detuvimos frente a un lujoso hotel. Era Cream con elegantes diseños en azul marino y un exuberante jardín verde, tenía balcones en todos y cada uno de los pisos y estoy seguro de que las vistas desde ellos deben ser mágicas. Juliana condujo el auto hasta un estacionamiento privado y yo salí del auto tan pronto como se detuvo.

Entramos en un área de recepción sofisticada que tenía candelabros bellamente diseñados. El piso de mármol se limpió para reflejar todo y el aire fresco del aire acondicionado calmó mi piel quemada. El olor a agua de mar con una mezcla de flores frescas era ligero en el aire y muchos sillones cómodos y mesas de centro de madera estaban colocados alrededor. Parecía una suite ejecutiva hecha especialmente para la playa.

Vi a un hombre de pelo pimienta acercarse a nosotros con la sonrisa más grande en su rostro mientras nos daba la bienvenida.

"Buenas tardes, señora, señora. Por favor, pase, señora Valdes. Me alegro mucho de verla. ¿Cómo estuvo su viaje, señora? Su mesa está donde pidió que estuviera". El maitre D 'habló todo de una vez y levanté una ceja en su dirección.

'Steven, iremos solos' Juliana habló sin siquiera pestañear en su dirección o incluso responder a su saludo.

¡Qué puto culo!

No me extraña que la odiara. Vi como la boca de Steven cambió a una mueca, pero él solo asintió hacia Juliana, debe estar acostumbrado a la rudeza de Juliana.

Lo miré y le di las gracias con una sonrisa genuina, sus ojos se abrieron un poco antes de que me devolviera la sonrisa, su sonrisa de megavatios volvió a su rostro.

"Si terminó con su coqueteo, ¿podemos ir a la mesa señorita Carvajal?" Juliana habló en voz baja, pude ver la vena en su cuello saliendo y levanté una ceja.

¿Cómo se considera coquetear sonreírle a alguien? Le puse los ojos en blanco antes de caminar detrás de ella.

Nos condujo hacia una enorme zona de baño que daba a la playa. Caminó hacia una mesa privada y en lugar de sacar una silla para mí, la  idiota me ignoró y se fue a algún lado. La maldije en mi cabeza y me senté en la silla, ni siquiera sé si esta era nuestra mesa o no, pero bueno, lo que sea, a quién le importa. Puse mi cabeza en mi palma y me senté aburrida. Mi estómago rugía y mi cabello largo volaba por todas partes haciéndome sentir agitado. Esperé una eternidad y cuando ya no pude controlar mi hambre llamé a la camarera.