Arreglo por la fuerza JULIANTINA(JULIANA GP)

Capitulo #46

{Juliana}

Valentina se puso rígida en mis brazos cuando vio a su familia. Su cobarde hermana y su inútil novio estaban sentados felizmente, charlando entre ellos, mientras miraban a su hijo.

El niño fue el primero en darse cuenta de nosotros. Miró a Valentina confundida antes de volverse a mirar a su madre, luego a Valentina, luego a la perra. Lo hizo una vez más antes de tartamudear.

"¿Mamá?" En confusión mientras miraba a Valentina.

Valentina se tensó aún más en mis brazos y yo apreté la mandíbula. no me gusto que ella estuviera incómoda.

Se hizo el silencio en la habitación cuando la familia de Valentina finalmente se dio cuenta de que estábamos aquí. Miradas incómodas pasaron entre las personas sentadas y me enojé más, estaban actuando como si Valentina y yo fuéramos extrañas.

'¡Valentina! Juliana!" Lucia, la madre de Valentina tenía que hablar, la mujer siempre estaba entusiasmada.

"Juliana, me gustaría que conozcas a mi otra hija, Valeria, y a mi yerno, Lucho", dijo alegremente la mujer bajita, haciéndoles gestos mientras me miraba. Sus ojos estaban llenos de satisfacción y sus labios se curvaron al máximo.

Asentí en su dirección, lo sé, los he conocido antes." Hablé brevemente, sin importarme si sonaba grosera o no. No me gustaban y no iba a endulzar mis acciones por ellos.

"¡Oh, lo tienes!" dijo Lucia, sonando confundida pero me importaba un carajo. Solo asentí en su dirección sin querer dar más detalles.

"Juliana, es bueno tenerte aquí. Por favor, siéntate", dijo León Carvajal y apreté la palma de mi mano.

Si tan solo no estuvieran relacionados con Valentina, ni siquiera valdría la pena perder el tiempo.

Sintiendo mi mano apretada en su cintura, Valentina apretó la suya alrededor de la mía y me miró, está bien, asintió con la cabeza pero no lo estaba. Estaba jodidamente enojada, Solo Juliana.

Nadie había reconocido siquiera a Valentina. ¡Bastardos!

Me senté justo al lado de Valentina, sin importarme si ofendía a alguien. No dejaría a mi mujer sola con esta gente inútil.

Disculpe, señorita, pero ¿quién es usted?", dijo el joven, arrugando la nariz y frunciendo el ceño. Se veía exactamente como el rígido hombre mayor frente a mí. No es de extrañar que le gustara al viejo bastardo, el niño tenía los mismos ojos Marrones. y pelo negro.

Valentina levantó una ceja y supe que se estaba controlando para no decir nada crudo.

"Uh, ella es tu tía", dijo Valeria, aclarándose la garganta.

La miré con mis ojos enojados. Ella era todo lo contrario de My Valentina. Mientras que mi Valentina era segura y sofisticada, Valeria era una tonta tartamuda y una perra que apuñala por la espalda. Tuve tanta suerte de que Valentina no tuviera los ojos marrones como la perra.

Valentina se rió entre dientes, una risa fría y sin humor, "Solucionaré eso, Valeria", dijo con voz distante, con los ojos protegidos.

"Hola Keyan, puedes llamarme Valen". Dijo suavemente, volviendo su mirada hacia el niño.

El niño le devolvió la sonrisa a Valentina y pude relacionar la sonrisa traviesa con la de Valentina. Ella le devolvió la sonrisa con los labios rectos y supe que estaba incómoda. Si no hubiéramos venido.

"Vamos a tomar un poco de postre ahora, ¿de acuerdo?" Lucia dijo entrando con un tazón y algunos platos de acompañamiento. El olor golpeó mis fosas nasales y casi me encogí, pastel de manzana con costra.