Arreglo por la fuerza JULIANTINA(JULIANA GP)

Capitulo #40

(Juliana}

Moví mi mano sobre la palma de Valentina,

abriendo su pequeño puño. Nunca me había imaginado que tuviera una hermana gemela, pero estando en el campo de los negocios he aprendido lo astutas y reservadas que pueden ser las personas. ¿Quién diría que la hija de León se escapó?

Pero por más egoísta que parezca, de alguna manera me alegré de que su hermana se escapara, si no, nunca hubiera conocido a la seductora en mis brazos.

"Valentina" le susurré al oído, asegurándome de que mis labios la provocaran. Sabía que estaba molesta. No quería que su mal humor estropeara nuestra velada, así que iba a hacer lo que mejor se me daba: seducir a mi seductora.

"Hmm" murmuró después de un rato aún perdida en sus pensamientos.

Apreté mi agarre en su cintura acercándola a mí, su trasero se apretó contra mi pene y gemí. Mierda

'¿Por qué te vistes de manera tan provocativa?', le pregunté empujando lentamente mis caderas contra las de ella mientras mis palmas vagaban por su frente. Valentina gimió y arqueó la espalda, empujando sus senos hacia afuera, pero no iba a tocarlos, no hasta que ella respondiera. ,

"¿Por qué?" pregunté de nuevo.

"Porque", dijo como la mujer obstinada que todavía era, pero no iba a dejarla ir. No hasta que me dijo la verdadera razón.

"Respuesta incorrecta" chasqueé la lengua en su oído. Moví mis manos a sus muslos, recorriendo la parte interna de sus muslos, tan cerca de su centro y sus deliciosos gemidos llenaron la habitación.

"¡Juliana!" Ella se quejó en protesta. Mi otra mano se movió para apretar contra su pecho cubierto y cómo deseaba que estuviéramos en mi casa. Moví mis labios al cuello de Valentina y sonreí. La mujer astuta trató de ocultar mis marcas, pero los chupones rojos aún se veían, un poco menos aburridos pero aún visibles. Iba a oscurecerlos de todos modos. Chupé su punto dulce y Valentina jadeó, frotando su culo contra mi polla. Joder, esta mujer me estaba matando.

Mordí con fuerza en su cuello y ella jadeó, "Preguntaré por última vez, Valentina, ¿por qué?"

"Yo," ella gimió y lamí mi mordisco, "....quería" otro gemido y otro empujón contra mi erección, "...volver ahh!" Ella gimió cuando chupé su mandíbula. Le tarareé al oído animándola a terminar su oración ".... por esta mañana" dijo jadeando.

Ah, la pequeña zorra quería venganza.

Bueno, deberías estar feliz porque realmente funcionó. Estoy duro como una roca y todo lo que quiero hacer es follarte aquí ahora mismo." Gemí en su oído y ella jadeó ante mi franqueza. Empujé

sus caderas hacia atrás y empujo mis caderas hacia adelante haciéndola sentir la dureza de mi pene. Ella gimió en voz alta, echando la cabeza hacia atrás.

"Vamos a comer primero", me alejé de ella, extrañando instantáneamente su presencia. Tomé su mano y la guié a la mesa. Sus ojos estaban llenos de deseo mientras me devolvía la mirada y yo le devolví una mirada prometedora, la iba a follar, duro.

{Valentina}

En lugar de comer la comida frente a nosotros, Juliana siguió mirándome con ojos lujuriosos, mojándome más de lo que ya estaba. Mi estómago se estaba apretando y quería salir de este lugar abandonado, pero sabía que Juliana se levantaría solo cuando terminara de comer.

Mastiqué lentamente y observé cómo los ojos de Juliana observaban mi garganta mientras tragaba. Sus ojos se detuvieron en mi blusa baja y mis cogollos se tensaron, joder, quería que sus labios estuvieran sobre ellos.