Capítulo 2🥀

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Al día siguiente...

Ayer fué un día de locos. Me junté con Ámbar, almorzamos juntos y fuimos a rehabilitación juntos. Fué el primer día que no me sentí solo, una nueva chica se sumó al grupo de las adicciones, se veía simpática, no lo sé. La alarma sonó, me levanté a hacer mis necesidades y partí camino a la escuela, me puse los auriculares y salí. En el camino me encontré con Ámbar y fuimos juntos, antes de entrar a la escuela nos pusimos la capucha para que nadie nos registre y entramos. Fuimos hasta el curso, nos sentamos en los asientos de atrás y esperamos hasta que lleguen los demás. Yo me puse a ver el Facebook y Ámbar se puso a dibujar en un cuaderno negro que tenía. Era muy buena dibujando... pero no sé porque siempre hace cosas oscuras. Minutos después todos empezaron a llegar.

- Buenos días alumnos, saquen su cuaderno de Literatura.

Todos nos pusimos a leer una novela de Ariana Godoy llamada "Sigue Mi Voz", era entretenida, era muy nostálgica y hablaba sobre adolescentes. Cada uno fué leyendo un capítulo, cada vez me asombraba más ya que era una vida difícil la de ella y tiene algo en que desahogarse. Hicimos unas tareas sobre de que se trataba, que capítulo nos gustó más y unas cosas más.

- Oye – Me giré para verla.

- ¿Pasa algo? - Le pregunté

- No entiendo esta consigna.

- Tienes que poner que te pareció el capítulo 17 y poner una breve frase o parte de él. - Le expliqué.

- Ah... okey. Gracias – Me dijo y volvimos a continuar con la tarea.

Cada vez que estamos sólos Ámbar y yo juntos me siento mejor, quizás es porque no estoy solo y tengo a alguien con quién conversar, pero me gusta pasar tiempo con ella. Compartimos los mismos sentimientos, tenemos pésimos padres y ambos nos llevamos bien. Creo que este comienzo de amistad va a funcionar. La primer clase terminó y ahora nos encontrábamos ordenando nuestras cosas, salimos al recreo y nos dirigimos a la cafetería, compramos nuestro desayuno y nos fuimos a sentar a una mesa alejada de las otras. Ahí si que nadie nos iba a molestar o eso creíamos hasta que llegó él profesor de arte.

- Buenos días alumnos. ¿Ámbar podríamos hablar en privado?

- Si, Jason espérame acá. Ya vengo – Yo asentí y ella salió de la cafetería con el profesor.

- Bueno Ámbar quería decirte que el profesor me habló de unos dibujos tuyos y dijo que eran llamativos y medio oscuros, me gustaría verlos.

- ¿Para que quiere verlos?

- Por que si es cierto lo que él me dijo... me gustaría que entre a mi clase y así poder participar del gran concurso.

- ¿Gran concurso?

- Sí, él mejor dibujo gana el premio mayor. Que es una beca para la Universidad de arte. - Me sorprendió esa noticia.

- ¡Wow! Entonces luego me busca en el curso y le muestro mis dibujos.

- Claro, cuando toque el timbre la busco en su grado. Bueno eso era todo, nos vemos luego – Dijo eso y se fué y yo volví a la cafetería a sentarme con Jason.

- ¿Que te dijo? - Me preguntó mirando su celular ya que la comida ya la comió.

- Me dijo que el profesor le había comentado sobre mis dibujos, él los quiere ver y si le gusta que me una a su clase y poder participar en el concurso.

- Ah, y ¿Que vas a hacer?

- Aún no lo sé pero me gustaría ganarlo por que el premio mayor es una beca a la universidad de arte más reconocida en Argentina. - Dije comiendo mi sándwich.

- Bueno entonces buena suerte – Se paró de su asiento y se fué.

- ¿Y ahora que le pasa? Quién lo entiende.

Seguí comiendo mi sándwich hasta que el timbre sonó y volví al curso y ahí estaba Jason, sentado sólo en su asiento, me acerqué a mi lugar y me puse a buscar mis dibujos pero no los encontré, yo los había dejado en mi cuaderno negro y ahora no está, quizás lo guardé en mi mochila. Me fijé en la mochila y tampoco estaban. Busqué y busqué y no los encontré.

- Que raro – Dije hablando sola.

- ¿Que buscas?.

- Mis dibujos. ¿Vos no los vistes Jason?

-No Ámbar, yo no toco tus cosas y vos lo sabes muy bien.

- Bueno ya.

- Ámbar ¿Tiene los dibujos? - Justo él profesor me viene a apurar.

- Profesor no encuentro los dibujos y los dejé acá – Levanté el cuaderno negro que tenía en mis manos.

- Bueno la sacaré de la clase y los hace frente a mí, entonces yo veo que es lo que la motiva y que es lo que la inspira.

-De acuerdo. Adiós Jason.

- Chau – Dijo él seco-

Llegamos al salón de arte y el profesor se puso a ordenar todo para que yo pinte, puso millones de colores en la paleta y me la entregó, acomodó el caballete, me dió un pincel y dejé todo encima de una mesa, saqué mi celular, mis auriculares inalámbricos, me los puse, puse Starboy de The Weeknd y me puse a pintar, no sin antes ponerme un delantal para no mancharme. Lo primero que hice fué imaginarme un rostro, tracé una linea negra, y otra hasta ir formando un rostro, acomodé unos detalles, agarré un poco de gris lo mezclé con un poco de negro y lo pasé por debajo de los ojos, haciendo una sombra más oscura. Terminé el cuadro y con rojo y negro hice detalles en los labios, haciendo que parezca que la persona tenía el labio partido, le hice unas lágrimas en los ojos con color negro, hice mi firma y puse la fecha y cuando me di vuelta había bastante gente mirando. Todos me aplaudieron y él profesor me miró sorprendido.

- Tu dibujo es una obra de arte, muestra un rostro, lastimaduras, lágrimas y una personalidad única, tu vida está resumida en esta pintura ¿Verdad? - Asentí avergonzada – Bueno déjame decirte que me gustaría que estés en mi clase, no siempre se ven pinturas así de únicas.

- Claro que estaré en esta clase. Sólo tiene que darme los horarios.

- Luego le digo al director que te los envíe. Ahora puedes retirarte.

- Gracias, encerio muchas gracias.

Salí de la clase de Arte y toqué la puerta de mi curso para entrar, me senté en mi lugar y me puse a copiar lo que había en la pizarra, terminé y le pregunté a Jason que había que hacer pero no me quiso responder, no se que le pasa a este chico, es muy difícil entenderlo de vez en cuando.

Seguí con mis cosas y no le presté atención, le pedí ayuda a la profesora y me explicó. Terminé la tarea rápido y me fijé si el profesor me había mandado los horarios de la clase de arte y si los mandó. Me puse a pensar que dibujar y mi mirada cayó el Jason, podría dibujarlo a él. Rápidamente saqué mi cuaderno, agarré mi lápiz y me puse a dibujarlo, lo miraba a el y dibujaba nuevamente, al lado de él escribí "i'm an addict" , lo metí en mi cuaderno rápidamente para que él no lo vea y guarde el cuaderno en la mochila.

- Quiero verlo – Dijo mirándome fijamente

¿Que cosa?.

-Tu dibujo de mi.

- Mmm, no lo sé, no salió bien.

- Bueno entonces yo lo saco – Arrebató mi mochila y sacó el cuaderno para ver el dibujo – No está feo, te salió genial. No pensé que era tan lindo.

- ¿Lindo vos? Creo que estás ciego – Ambos comenzamos a reírnos.

- Me lo quiero quedar.

- Si quieres, puedes quedártelo.

- Gracias.

- De nada

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Segundo capítulo de la historia, espero que hasta ahora les esté gustando....

Saludos:

Bárbara Simón💖

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