32. Me robó el beso y el corazón

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Era una noche común como cualquier otra para un chico universitario y trabajador a tiempo parcial de una tienda de conveniencia, su nombre era Nakajima Atsushi, estudiante y trabajador a tiempo parcial de un 9n, una tienda de conveniencia que habría 24 horas, y aquel día tenía el turno de la tarde/noche.

Era un joven de cabellos blancos y mal cortados, estudiante de literatura en la universidad de Yokohama, sus padres habían tenido que mudarse, había sido adoptado y llenado de amor, pero su actual tutor era una persona mayor que necesitaba aires frescos de campo. Así que, solo, comenzó a valerse por sí mismo y así poder ayudar a su ahora amado padre. Estaba dispuesto a trabajar duro y horrado.

Sonó la campana, justo a las 21:00 hrs. Entraban unos hermanos que al estudiante de literatura volvían loco. Solo sabía que su apellido era Akutagawa, por la tarjeta que miembro de la chica, no es que esperaba mucho, era tímido para eso de las relaciones, pero no podía evitar convertirse en un total inútil cuando los hermanos llegaban, su mundo se volvía rosa al verlos y sus ojos simplemente se plantaba en ellos.

Los hermanos Akutagawa solían ir a las 21:00 hrs, porque su última clase terminaba a las 20:45 y en todo lo que pensaban era en cenar y un café. Siempre se sentaban en la mesa de la tienda a comer ramen instantáneo, origini o en algunos casos extraños, cajas de obento. Atsushi siempre estaba curioso pero cada uno tenía sus asuntos.

Los hermanos Akutagawa se iban a las 21:25 hrs y él salía a las 22:00 hrs, jamás se los encontraba, en la universidad no los topaba nunca, y al final, solo tenía esos 25 minutos diarios para verlos.

Fue el viernes cuando la chica Akutagawa apareció sola, Atsushi suspiro por no verlos juntos, comía como normalmente lo hacía con su hermano, al terminar se acercó al albino – buenas noches, ¿tarjeta?

- Si, aquí – respondió entregando la tarjeta

Atsushi estaba en un momento de lucides, supo que era su oportunidad, ahora o nunca, cobraba todo mientras la miro un con ligero rubor en sus mejillas – aam, disculpa ¿y tu hermano? Es raro verte sola.

- Tuvo cita en el hospital

- ¡¿eh?! ¿Está bien?

Gin lo miro y sonrió tiernamente – Si, está mejorando, gracias por preguntar Atsushi

- ¿sa-sabes mi nombre?

- Está en tu gafete, - menciono – mi hermano y yo lo vimos el primer día

- Ah, di-disculpa

- Está bien, eres lindo.

Atsushi le cobro y la chica se fue, suspiro aliviado.

Después de su turno, Atsushi logró llegar a su departamento, allí tenía únicamente una cama, una mesita, un tapete, un baño pequeño, y una pequeña parrilla. Miraba las noticias sobre unos asaltos a tiendas de conveniencia – Que extraño que esto esté pasando – menciono – que miedo.

Trabajo toda la noche, tenía exámenes pronto.

En realidad, todo el fin de semana y toda la siguiente semana no vio a los hermanos Akutagawa, se sentía preocupado, pero tampoco es como si los conociera, solo sabía que los extrañaba.

Una vez más, era viernes, los exámenes había dejo a Atsushi completamente cansado, estaba sobre la barra, casi eran las 21:00 hrs y lo sabía, no llegarían, solo quería que la hora pasara rápido y lograr ir a su casa a dormir todo el fin de semana. De repente, escucho la campana, levanto su mirada adormecido, pudo verlo, era él. Se alegro tanto de verlo, pero su terrible sueño no lo dejaba reponerse.

Creando sueños BSDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora