𝑴𝒂𝒓𝒓𝒊𝒂𝒈𝒆 𝒐𝒇 𝒄𝒐𝒏𝒗𝒆𝒏𝒊𝒆𝒏𝒄𝒆 | 𝑪𝒉𝒂𝒓𝒍𝒊𝒆 𝑺𝒘𝒂𝒏

016

Narrador pov.

Por mucho tiempo intento suprimir  ese horrible presentimiento, sin embargo ahora se encontraba en él hospital junto a Charlie, ambos estaban sentados esperando a que Renée saliera de la habitación en donde se encontraba Bella.

-Bella esta bien excepto por una pierna y cuatro costillas rotas, algunas contusiones en la cabeza y moraduras por todo el cuerpo y la perdida de sangre.-Mencionó Emma haciendo una mueca.-Pero en unos días se recuperara por completo.-agregó poniendo una mano en el hombro de Charlie.

Charlie respiro profundamente, sabía que Emma también estaba preocupada. El jefe Swan no podía explicarlo por completo, pero todo en ella: Su tono, su postura, sus ojos y muchos pequeños detalles más, le hizo sentir una calidez que por mucho tiempo no tenía, era algo distinto y ni siquiera por Renée había tenido esos sentimientos.

-Lo se.-Sin ser consciente de lo que hacía su mano, él le acarició el mentón con el dedo pulgar, haciendo que el corazón de la peli-negra se acelerara. Charlie sonrió levemente.-Te agradezco por estar conmigo siempre que lo necesito.

-No me agradezcas Charlie, siempre estaré para ti, así como tú para mi, ya lo hemos demostrado ¿No?.-Emma le sonrió a Charlie.

Cuando ambos voltearon a ver como Renée salía de la habitación, observando a la pareja con un poco de confusión.

¿Desde cuando Charlie estaba con alguien?

Tanto Emma como Charlie se pusieron de pie, la peli-negra observó como Renée la miraba. Él ambiente se puso un poco tenso provocando que Emma se sintiera algo incómoda pero aun así no desvío la vista.

-Bella ha decidido quedarse contigo, volveré en la noche para ver como esta ella.-aviso Renée frunciendo levemente el ceño.

-Esta bien, Renée. De todos modos te aviso si algo necesita Bella.-Murmuró Charlie antes de entrar a la habitación junto a Emma.

Sus curiosos ojos recorrieron toda la habitación de paredes blancas. Unas persianas bajadas cubrían la pared de un lado. Hasta que su vista se enfocó en Bella, la castaña estaba recostada en una cama dura y desnivelada, una cama con barras. Tambien ahí en la habitación estaba Edward Cullen el sillón reclinable de cuero de imitación color turquesa que había al pie de la cama fingiendo estar dormido.

Emma puso los ojos en blanco, pero finalmente su vista se enfocó de nuevo en la castaña.

-¡Papá!¡Emma!.-susurró Bella aliviada al ver que ellos estaban bien.

-Bella, que alivio al ver que ya despertaste.-dijo Charlie sentándose al borde de la cama.

-Nos tuviste preocupados. Te han mantenido sedada bastantes horas debido a tus heridas.-Comentó Emma observando detenidamente el brazo de Bella.

¿Acaso en una mordida?

Pensó estremeciéndose ante la idea.

-Lo se, lamento preocuparlos de esta forma.-se disculpó la castaña intentando agarrar con su mano libre la mano de Charlie, pero algo se lo impidió. Bella bajó la mirada

descubriendo la vía intravenosa sujeta al dorso de su mano.

-¡Ay!.-exclamó la castaña con un gesto de dolor.