Golden Cage

El día en que perdí la confianza

Para Felix fue extraño ver gente en su casa, pero no comentó nada.

Hasta donde sabía -y eso porque le dijo Hyunjin- eran socios de las empresas Hwang que habían venido a tratar un par de cosas, pero como eran temas delicados que no se podían tratar en cualquier lado lo harían ahí, además, todos eran hombres de confianza, pero por seguridad habían llegado con los ojos cubiertos por lo que no sabían exactamente dónde estaban.

—¿Se van a quedar mucho tiempo? —preguntó Felix de forma inocente mientras subía las escaleras con Hyunjin hasta su habitación.

—No tanto cariño—respondió el pelinegro metiendo a Felix en la habitación para después dejar un suave beso en sus labios—Solo discutiremos unas cosas y se van, después seré todo tuyo ¿bien?

—Está bien...—lo tomó del rostro solo para poder darle otro beso.

Hyunjin correspondió sonriendo porque cuando Felix pedía un poquito más de cariño de forma esporádica lo ponía contento y por supuesto que se lo daría, después de todo, apenas hace 2 días había regresado a casa y Felix había estado pidiendo demasiada atención que no se negó en darle, no sabía por qué había estado tan mimoso esos días, pero él disfrutaba hacerlo.

Y pudo haber seguido así si no fuera porque tenía esa reunión con sus socios-que poco tenían que ver con las empresas Hwang sino más bien con sus negocios ilegales- siempre todos los meses y en esta ocasión tuvo que organizarla el.

No se podía negar, eran personas muy importantes-y peligrosas- que no podían reunirse en cualquier lado, y debido a que su casa de seguridad siempre fue en Jeju no pudo llevarlos a otro lugar aun si Felix también estaba ahí.

Hyunjin terminó el beso con una suave mordida en el labio inferior de su esposo para después besarle todo el rostro y abrazarlo solo por un momento.

—Todo está bien, solo no vayas a bajar, esta gente es algo... intensa y no me gustaría que te hicieran o dijeran algo malo ¿bien?

—Está bien—dijo apoyado en su cuello—no te tardes demasiado...

—Lo intentare—dejó un beso en su cabeza y se fue, cerrando la puerta con seguro por cualquier cosa.

Felix no comentó nada.

Le convenia que estuviera cerrada.

Él no era tonto, claro que sabía que esas personas eran gente peligrosa, varios en algún momento tuvieron tratos con su padre y los llegó a ver solo porque estuvo en el lugar y momento equivocado, pero se zafó fácilmente porque su madre logró llevárselo de ahí antes de que se dieran cuenta de la presencia de ambos.

El señor Lee no era tan precavido con ese tipo de reuniones ya que siempre las hacía en su casa, pero, en fin, no estamos hablando de él.

Felix rápidamente se fue al panel de control de las cámaras de seguridad, si no podía bajar para saber que pasaba, si los podía ver. Aunque cuando revisó las cámaras se dio cuenta que la de la sala -donde sería la reunión- estaba convenientemente averiada del video...

...pero no del audio.

Felix entonces fue por los audífonos que Hyunjin le había comprado-debido a que por las noches de insomnio jugaba en la consola y hacía mucho ruido a pesar de estar con el volumen bajo- y los conectó al panel de control de seguridad, incluso si la cámara estaba averiada del video todavía podía grabar audio, así que luego de una respiración profunda para quitarse los nervios activó el micrófono.

¿Quién era esa persona señor Hwang?

Si ¿quién es el lindo chico que nos abrió la puerta? Tiene cara de muñeca y lindas piernas